Falta de garantías fue el argumento con el que el juez central del partido, que se disputaba en Tunja entre Boyacá Chicó F.C. y Atlético Júnior, diera por suspendido el encuentro.
El árbitro principal del compromiso, Adrián Vélez, comunicó la decisión a los delegados de los respectivos equipos, luego de analizar la situación del asistente de línea 2, Alejandro Gallego, quien resultó herido en su rostro como consecuencia de lo que al parecer era una esquirla de pólvora de uno de los fuegos artificiales que se veían en las tribunas del estadio La Independencia de Tunja.
El partido con el que se cerraba la jornada sabatina de los cuartos de final del Finalización 2011 se encontraba 0-0 al término del primer tiempo con un Júnior envalentonado, que había logrado sacudirse de un arranque vibrante en el que los de casa tuvieron algunas opciones de riesgo para abrir el marcador.
Aunque el estado de la cancha no era el mejor aliado para Giovanni Hernández, el ‘10’ de Júnior empezó a inquietar a la defensa local con sus acertadas intervenciones y en varias ocasiones el portero juvenil Cristian Bonilla tuvo que lucirse para evitar la caía de su arco.
Al final de ese primer tiempo el equipo visitante terminó mejor que el local y por eso para el arranque del complemento Luis Mena ya se alistaba para darle un nuevo aire al ataque boyacense.
Sin embargo, la suspensión del juego dejó todo en 'intenciones' y a la espera de que Dimayor resuelva si el partido debe reanudarse o si por el contrario se le adjudica el triunfo al equipo visitante, el cual en ese caso llegaría con una ventaja de 3-0 al encuentro de vuelta en Barranquilla.