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Tras conocerse que la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) sancionó este lunes, con una multa de $18.352 millones y por competencia desleal, a la Federación Colombiana de Fútbol (FCF), a las empresas Ticketshop y Ticket Ya, y a 17 personas naturales, entre las que se encuentran máximos directivos del fútbol colombiano como el presidente de la FCF, Ramón Jesurún, y el expresidente de la FCF, Luis Bedoya, el ministro del deporte, Ernesto Lucena, se pronunció al respecto y dejó en claro que esperará la notificación oficial para tomar medidas en el asunto.
En una entrevista realizada por Yolanda Ruiz en RCN Radio, Lucena afirmó que: “Acá lo que hay que decir es que esa sanción de la SIC pone en alerta a otras instituciones y sobre esa base esperaremos la notificación para iniciar los procesos disciplinarios a través de la comisión disciplinaria de la Fedefútbol pensando en la transparencia del deporte”.
Lo que dice la SIC es que desde la Federación se ejecutó “un sistema que limitó la libre competencia para favorecer a Ticketshop en la adjudicación del contrato de boletería para las eliminatorias al Mundial Rusia 2018 (por más de $40.000 millones)”.
El ministro del deporte también contó en la entrevista radial que: “nosotros, una vez notificados, le pediremos a la comisión disciplinaria de la FedeFútbol que inicie un proceso disciplinario en contra de las personas que hay en este fallo. Si encuentra mérito para suspender, le solicitamos la suspensión, ese es el primer procedimiento desde el ministerio (…). El segundo caso que puede salir es que La Fiscalía puede imputar cargos a algunos de los miembros del Comité Ejecutivo. En ese caso, si es de oficio, nosotros como ministerio los podemos suspender inmediatamente, son dos escenarios en los cuales el ministerio puede actuar, pero dependemos de otros entes para tomar esas determinaciones”.
En el transcurso del día también se conoció que la Federación Colombiana de Fútbol interpuso una tutela que no ataca la sanción impuesta por la SIC, sino que argumenta que el curso de las investigaciones no debió llevarse por el superintendente Andrés Barreto, pues según la FCF este carecía de imparcialidad para llevar el caso. Así, el documento lo que señala es que debió designarse un superintendente “ad hoc”.