Boyacá Chicó y Leones empataron en la gran final del Torneo Águila 2017
El cuadro ajedrezado no pudo pasar del empate en Tunja mientras los antioqueños gozan con la tranquilidad de ya tener certificado su ascenso.
Thomas Blanco
El único equipo que ha disputado todos los torneos de Primera B desde 1991 hasta la fecha es Leones. Una premisa que se esfumará a partir de 2018, pues el conjunto antioqueño certificó su ascenso luego de ser campeón del segundo semestre de la Primera B y de quedarse con el primer puesto de la reclasificación. Gozando de esa tranquilidad, los nuevos inquilinos de la A empataron 0-0 frente a Boyacá Chicó en la ida de la gran final del Torneo Águila 2017. (La historia de Leones)
Así funciona el ascenso en Colombia. Un cupo va para el vencedor de la llave entre el ganador del primer semestre (Chicó) y el campeón del segundo (Leones). El otro se define entre el perdedor de la serie y el primero de la reclasificación (Leones). Esa es la ecuación que ya tiene a los antioqueños en la primera división del fútbol colombiano. (Aseguran que ya están ascendidos: Chicó, en disputa legal con la Dimayor)
La tranquilidad de ya haber certificado el ascenso fue palpable en la cancha para los jugadores de Leones, que no tuvieron muchos argumentos en ataque. Y tampoco jugaron con la intensidad de partidos anteriores. Por el otro frente, la incertidumbre es el común denominador de los boyacenses. El conjunto ajedrezado lo intentó constantemente por intermedio de los disparos de media distancia de Felipe Ponce, pero ahí estuvo firme con sus buenas maneras el guardameta rival, Arled Cadavid.
Las caras largas y la rabia se apoderaron del conjunto boyacense tras la mala expulsión de Dennis Mena. El colegiado Carlos Betancur había tenido un arbitraje impecable.
Más allá de eso, hallar una figura excluyente en el encuentro, una tarea imposible. Empate pálido que dejó un sabor amargo en el Boyacá Chicó, pues no hizo respetar la casa y ahora definirá su suerte el próximo miércoles en Itagüi. Y de perder, se enfrentaría en el repechaje ante el Cúcuta, segundo de la reclasificación.
El único equipo que ha disputado todos los torneos de Primera B desde 1991 hasta la fecha es Leones. Una premisa que se esfumará a partir de 2018, pues el conjunto antioqueño certificó su ascenso luego de ser campeón del segundo semestre de la Primera B y de quedarse con el primer puesto de la reclasificación. Gozando de esa tranquilidad, los nuevos inquilinos de la A empataron 0-0 frente a Boyacá Chicó en la ida de la gran final del Torneo Águila 2017. (La historia de Leones)
Así funciona el ascenso en Colombia. Un cupo va para el vencedor de la llave entre el ganador del primer semestre (Chicó) y el campeón del segundo (Leones). El otro se define entre el perdedor de la serie y el primero de la reclasificación (Leones). Esa es la ecuación que ya tiene a los antioqueños en la primera división del fútbol colombiano. (Aseguran que ya están ascendidos: Chicó, en disputa legal con la Dimayor)
La tranquilidad de ya haber certificado el ascenso fue palpable en la cancha para los jugadores de Leones, que no tuvieron muchos argumentos en ataque. Y tampoco jugaron con la intensidad de partidos anteriores. Por el otro frente, la incertidumbre es el común denominador de los boyacenses. El conjunto ajedrezado lo intentó constantemente por intermedio de los disparos de media distancia de Felipe Ponce, pero ahí estuvo firme con sus buenas maneras el guardameta rival, Arled Cadavid.
Las caras largas y la rabia se apoderaron del conjunto boyacense tras la mala expulsión de Dennis Mena. El colegiado Carlos Betancur había tenido un arbitraje impecable.
Más allá de eso, hallar una figura excluyente en el encuentro, una tarea imposible. Empate pálido que dejó un sabor amargo en el Boyacá Chicó, pues no hizo respetar la casa y ahora definirá su suerte el próximo miércoles en Itagüi. Y de perder, se enfrentaría en el repechaje ante el Cúcuta, segundo de la reclasificación.