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Fueron 5.500 kilómetros los que viajó la selección de fútbol de Colombia después de derrotar 3-0 a Perú para entrar de forma oficial en modo Copa América. Este lunes, en la madrugada, el equipo nacional arribó al aeropuerto Luis Eduardo Magallañes de Salvador de Bahía, ciudad sede de la tricolor que debutará en el Arena Fonte Nova este próximo sábado (5:00 p.m.) ante Argentina.
El equipo de 23 jugadores llegó a las 6:00 a.m. hora local, (4:00 a.m. hora colombiana), descansará toda la mañana en el hotel de concentración, luego habrá almuerzo y ya en la tarde el cuerpo técnico realizará una jornada de recuperación en especial con quienes más sumaron minutos en el duelo ante el conjunto inca.
Después del primer juego del Grupo B en esta Copa América ante la albiceleste, la selección nuevamente tomará un avión rumbo a Sao Paulo para enfrentar (4:30 a.m.) por la segunda jornada a Catar, el 19 de junio, e inmediatamente regresará a Salvador.
El equipo dirigido por Carlos Queiroz cerrará la fase de grupos frente a Paraguay el 23 de junio (2:00 p.m.). A la ronda de cuartos de final clasificarán el primero y segundo de cada zona más los dos mejores terceros.
Desde que comenzó la era del portugués Carlos Queiroz, la tricolor ha probado diferentes esquemas, jugadores y hasta ha cambiado las posiciones habituales de ciertos futbolistas. El DT de la selección afirmó tras la goleada a Perú que le “iba a ser muy difícil armar el equipo que jugará ante Argentina”, aduciendo que el “buen nivel de los jugadores” iba a poner “las cosas complicadas”.
El sistema que hasta el momento mejor ha funcionado, el 4-3-3, con las destacadas actuaciones de Matheus Uribe, William Tesillo, Gustavo Cuellar, Edwin Cardona y Stefan Medina, se perfila como la mejor opción que tiene Queiroz para parar el once titular ante el equipo de Lionel Messi.
Los buenos resultados ante Perú y Panamá, un 3-0 en el estadio El Campín, mantiene un buen ambiente en el grupo y con una buena imagen al portugués que ahora sí deberá comenzar a competir al más alto nivel. Terminó el tiempo para los ensayos, por eso Queiroz espera que esa orquesta, como llama a su equipo, comience a tocar y no desafine.