La UEFA impuso el castigo el viernes luego de investigar alegatos de que los aficionados del Atlético fueron racistas y violentos en un partido jugado el pasado 1 de octubre ante el conjunto francés Marsella. Un panel de apelaciones de la UEFA indicó que el Atlético debe enfrentar al equipo holandés PSV Eindhoven el 26 de noviembre en el estadio Vicente Calderón de Madrid sin público presente. Un castigo de jugar un segundo partido a puertas cerradas fue diferido por dos años.
Sin embargo, los abogados del Atlético indicaron que el equipo apelará el veredicto en la Corte de Abitraje para el Deporte. “No creo que haya ninguna prueba que señale que somos un equipo racista”, dijo el abogado Juan de Dios Crespo a The Associated Press.
El Atlético de Madrid ya había apelado previamente un castigo de jugar dos partidos de la Liga de Campeones a por lo menos 300 kilómetros de Madrid. Un tercer partido de veto fue aplazado por cinco años.
El nuevo veredicto fue decidido por un panel de tres personas de la UEFA, el organismo que regula el fútbol en Europa, después de una audiencia que duró más de siete horas, el cual reiteró dos castigos ulteriores que formaban parte de la decisión original del organismo de control y disciplina de la UEFA.
El técnico mexicano del Atlético de Madrid, Javier Aguirre, permanecerá suspendido por los próximos dos partidos de la Liga de Campeones: ante el Liverpool la próxima semana, y el 26 de noviembre ante contra el PSV, por presuntamente haber insultado a un jugador del Marsella.
El equipo también fue multado con 150.000 euros.