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El 9 de diciembre de 2018 es una fecha que será eterna en la memoria del fútbol. Ese día se disputó la final de la Libertadores más importante de la historia. Luego de incidentes violentos, que no permitieron que el encuentro de vuelta se celebrara en el estadio Monumental, River Plate ofició como local en el Santiago Bernabéu de Madrid ante Boca Juniors, con el que había empatado 2-2 en el compromiso de ida y al que venció en territorio europeo por 3-1 con un golazo inolvidable del colombiano Juan Fernando Quintero.
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Tuvieron que pasar casi nueve meses para que la camiseta de la banda cruzada y la horizontal se enfrentaran de nuevo. Fue el 1 de septiembre pasado, esta vez sí en el Monumental. Poco entretenido fue el 0-0 por la Superliga Argentina, torneo que los dos equipos más importantes de ese país desprecian cuando también están luchando por la Libertadores. Por eso, la llave que comenzarán a jugar este martes (7:30 p.m., Fox Sports) es la que en realidad desean ganar este año. Es el primer paso de la clasificación a una final en la que alguno de los dos buscará el título frente a Flamengo o a Gremio.
Y para el compromiso en la futbolera Buenos Aires, cinco colombianos están convocados. De ellos, tres serían titulares. Marcelo Gallardo, uno de los entrenadores más importantes en la historia de River, convocó a los atacantes Jorge Carrascal y Rafael Santos Borré. El primero, que viene de anotar en la victoria 2-0 contra el Gimnasia que dirige Diego Armando Maradona, no será inicialista. Desde que llegó al elenco millonario ha tenido buenas actuaciones como alternativa, y hasta ha jugado en el mediocampo, pero Gallardo todavía no lo utilizará desde el arranque en un compromiso de semejante importancia.
Santos Borré, por su parte, con sus diagonales, sus movimientos en la zona ofensiva y sus goles, se ha ganado la confianza del técnico y es probable que sea titular junto a Lucas Pratto o Matías Suárez. Sin embargo, Ignacio Scocco también convirtió en el partido contra Gimnasia y es pedido como inicialista por parte de una hinchada que lo quiere. No es de los indiscutidos para Gallardo, pero el estratega de River siempre sorprende con alguna novedad en los clásicos ante Boca, por lo que Nacho podría arrebatarle el lugar a Santos Borré, quien acumula 573 minutos en la presente Copa Libertadores.
“El hincha de River está viviendo uno de los momentos más lindos de su historia. Se le nota feliz y hay un amor incondicional entre el aficionado y el equipo. Tenemos una energía que va de adentro hacia afuera y viceversa. Cuando pasa eso es porque hay una conexión muy fuerte. Un saludo y un abrazo enorme para ellos, que el martes nos van a estar alentando”, manifestó Gallardo, emocionado por una nueva edición del Superclásico.
En Boca, Gustavo Alfaro, criticado por sus planteamientos defensivos en un club grande, llamó a Frank Fabra, Jorman Campuzano y Sebastián Villa. Fabra se ganó la titular en el lateral izquierdo y en el mencionado empate sin goles ante River en el Monumental ya demostró que, además de sus cualidades ofensivas, también puede ser aplicado en el aspecto defensivo y sabe marcar cuando se le pide, lo cual es valorado por un entrenador con las características de Alfaro.
Villa también le ha respondido al entrenador, quien lo ha utilizado en los compromisos más importantes. En la Libertadores, el atacante colombiano suma 393 minutos, 404 en el campeonato argentino y apenas siete en la Copa Argentina. Sus desbordes y calidad para tirar centros con balón en movimiento y parado son fundamentales en un equipo que le da mucha importancia al juego aéreo y que por ese camino buscará llevarse un tanto de la cancha de River, lo cual sería clave por el valor que tiene el gol de visitante en estas instancias.
Campuzano llegó al cuadron xeneize tras demostrar su enorme talento en el mediocampo de Atlético Nacional y Alfaro, al principio de su gestión, lo elogió y hasta lo contempló como titular. No obstante, las lesiones, el buen rendimiento de quienes compiten por un lugar en la posición de volante de primera línea y los fichajes en ese lugar de la cancha han propiciado que el colombiano se quede rezagado y casi no juegue con Boca. Es posible que ni siquiera vaya al banco de suplentes. (La emotiva historia de Jorman Campuzano)
“Tenía claro el partido que tenía que jugar y dónde tenía que jugarlo. Y más que nada porque era el partido que se disputaba después de la final de Madrid y yo no iba a ser partenaire del festejo de nadie. Yo quería demostrar que Boca está de pie, que Boca está duro”, manifestó Alfaro tras la propuesta de un juego defensivo ante River. No se avergüenza de jugar así y se presume que ahora, por el duelo de Copa Libertadores, no cambie. “Somos un equipo molesto”.
Muchos recuerdos alrededor de los Superclásicos en el certamen de clubes más importantes del continente. En el 2000, el gol de Palermo en La Bombonera en los cuartos de final; en 2004, el emocionante partido que terminó con River eliminado en semifinales y un Boca que luego perdió la final ante Once Caldas; en 2015, el penal anotado por Carlos Sánchez en el Monumental en octavos de final; la serie definitiva de la edición anterior, entre otros. Es un enfrentamiento sin comparación, en el que el acto de sorprenderse aparece.