¿Podrán repetir los Vigilantes?

Los Vigilantes de Texas posan con el trofeo tras derrotar a los Houston Astros durante el séptimo partido de los playoffs de la American League Championship Series de la Major League Baseball (MLB) en octubre de 2023.

Foto: EFE - ADAM DAVIS

En lo que va de este siglo, ningún equipo ha podido ganar dos veces de manera consecutiva la Serie Mundial de Béisbol, y por eso salta a la vista la gran pregunta para este 2024: ¿podrán los Vigilantes de Texas repetir en la conquista del Clásico de Octubre? Muchos lo dudan y en ese grupo me incluyo.

Por dos razones: lo que hizo la novena de Bruce Bochy en la postemporada del año pasado, creo que no se repetirá durante un largo período. La primera es que ganar todos sus compromisos en calidad de equipo visitante, no solo es una marca difícil de conseguir, sino que deportivamente es bien complicada para repetir. Y, la segunda, es conseguir que la maquinita funcione a la perfección en los momentos cruciales, no es cosa que se alcance todos los días y en todos los juegos.

Empecemos por señalar que el rendimiento efectivo y oportuno de Marcus Semien, Corey Seager, el novato sensación Evan Carter y el cubano Adolis García, en todos los juegos de la pasada postemporada, cuando no era uno era el otro quien respondía con su batazo oportuno o con una espectacular jugada a la defensiva, en fin, no será tan fácil que lo volvamos a ver.

Y también, que la calidad de los brazos que hicieron campeones a los Vigilantes, con el zurdo Jordan Montgomery y el batallador Max Scherzer, en la rotación, y el taponero cubano Aroldis Chapman, cuyos servicios llegaron en la recta final de la campaña, dos de ellos —Montgomery y Chapman — ya no estarán en la nómina.

¿Va a suceder de nuevo?

Los Vigilantes tienen con qué volver a la postemporada y que el juego de los actuales campeones de la Serie Mundial conserve su línea normal. Pero en ese grupo, con los otros cinco participantes, que a ojo de buen cubero, pueden ser los Orioles de Baltimore, los Astros de Houston, los Mellizos de Minnesota, los Azulejos de Toronto y, probablemente, la sexta casilla, a disputarse entre los Medias Rojas de Boston, los Yanquis de Nueva York, los Tigres de Detroit y los Marineros de Seattle.

Los Orioles exhiben más solidez para esta campaña, con la llegada de Corbin Burnes a la rotación, y el indiscutible buen trabajo que puedan ofrecer Grayson Rodríguez, Dean Kremer, Tyler Wells y Cole Irvin, como abridores, y el haber conservado su línea con Gunnar Henderson, Adley Rustchman, el venezolano Anthony Santander, Ryan Mountcastle y Ryan O´Hearn, van a ofrecer una seria resistencia tanto en el Este de la Liga Americana, como en la posibilidad de ganar el título del circuito, y Brandon Hyde, su estratega, lo sabe.

Ahora bien. La tropa del francés-estadounidense Bochy, no se puede desechar bajo ningún punto de vista. No tanto por la forma en cómo jugaron el pasado año, sino por la calidad de todos sus integrantes.

Nathan Eovaldi, Jon Gray, Andrew Heaney, Max Scherzer, Dane Dunning y Cody Bradford, están en la rotación. Detrás de Semien, Seager, Carter y Adolis, aparecen Josh Jung, Nathaniel Lowe, Jonah Heim, el dominicano Leody Taveras y Justos Foscue, por lo que la combatividad está intacta.

El boricua, Joe Espada, es el nuevo capataz de los Astros, una novena que lo tiene todo para estar en la postemporada, si bien han perdido algunas piezas —caso del receptor Martín Maldonado —, no parece que por ello se vaya a caer la solidez del equipo. La experiencia y el retorno de Justin Verlander — cuya capacidad física y dolencias están por verse este año —, cuenta con el perfil para volver a estar en la cima, con el venezolano José Altuve, Alex Bregman, los cubanos Yordan Alvarez y José Abreu, Kyle Tucker y el dominicano Yainer Díaz, y sus lanzadores, los dominicanos Famber Valdez y Cristian Javier; el mexicano José Urquidy y el veloz Hunter Brown.

Los otros

Los Mellizos de Rocco Baldelli deben erigirse como la novena a derrotar en su zona, la Central de la Americana, con el venezolano Pablo López, abriendo la rotación, secundado por Joe Ryan, Bailey Ober, Chris Paddack y Anthony DeSclafani, todos derechos. Un zurdo podría ser una pieza que le haga falta, que podrían adquirir de un momento otro, mientras que se espera que el boricua Carlos Correa, Royce Lewis, el alemán Max Kepler, Byron Buxton, Alex Kiriloff y que los dominicanos Carlos Santana y Manuel Margot, hagan su tarea en el campo de juego, tanto a la defensiva como a la ofensiva.

Los Azulejos de John Schneider saben muy bien que “el palo no está para cucharas”, y que si quieren volver a la postemporada, tienen que ofrecer la competitividad necesaria para encontrar esa ruta, que no les será nada fácil. De la solidez de su rotación dependerá la mayor responsabilidad, con Kevin Gausman, el boricua José Berríos, Chris Basitt, el japonés Yusei Kikuchi y Alex Manoah, y, desde luego, de la producción ofensiva y la calidad defensiva de George Springer, Bo Bichette, el dominicano, Vladimir Guerrero Jr., del nuevo en la alineación, Justin Turner, como bateador designado; Davis Schneider y el mexicano Alejandro Kirk, está encomendada la tarea para llegar a la vuelta de octubre.

¡Por un cupo!

En el remate de esta visión sobre la Liga Americana, hay cinco equipos en procura de obtener la última casilla para la postemporada de este 2024 en el circuito.

Los Medias Rojas de Boston, los Yanquis de Nueva York, los Rayas de Tampa, los Tigres de Detroit y los Marineros de Seattle, son los candidatos para ese último cupo de la pos en este circuito. Y para el caso, se ha definido un orden que permita presumir qué se puede esperar de estos equipos para la campaña que está próxima a iniciarse.

Sobre el escritorio, el boricua Alex Cora y su combo de Boston, se muestra como un club equilibrado, con una buena ofensiva con el dominicano Rafael Devers, el japonés Yoshida Masataka, Jarred Durán y Triston Casas, sin que se pueda advertir por el momento lo que pueda ocurrir con Trevor Story, que ha sido un pelotero con poca acción desde cuando fue llevado a los ‘Pati-rojos’. Pero carentes de un brazo poderoso en la rotación, ante la ausencia obligada por lesión del nuevo lanzador Lucas Giolito, que podría ser la gran falencia a la hora de la verdad, los Medias Rojas están contando con Nick Pivetta, el dominicano Brayan Bello, Garret Whitlock y Kutter Crawford para salir adelante.

Los Yanquis de Aaron Bonne sobre el campo, muestran una indiscutible línea ganadora. DJ. LeMahieu, el dominicano Juan Soto, Aaron Judge, Anthony Rizzo, el mexicano Alex Verdugo, Anthony Volpe, el venezolano Gleyber Torres y Giancarlo Stanton — muchos generales, pocos soldados—, pero con un débil cuerpo de lanzadores abridores, porque no tienen un segundo y un tercero con la profundidad necesaria para llegar a octubre, pues, ya no cuentan con los dominicanos Luis Severino y Domingo Germán.

Aun cuando están el as Gerrit Cole, quien no estará disponible por lo menos en el primer mes de acciones; Carlos Rodon, quien desde cuando llegó no ha sido el lanzador de capacidad que mostraba en sus antecedentes; el cubano-americano Néstor Cortés Jr., Marcus Stroman y Clarke Schmidt, a menos que las cosas cambien en el transcurso de la temporada, la divisa no muestra la fortaleza que se necesita para la rotación.

Kevin Cash, el capataz de los Rayas, sabe manejar con habilidad sus piezas, hecho que lo ha demostrado en más de una oportunidad, pero para esta campaña, da la impresión de que su cuerpo de lanzadores no es tan fuerte como en ocasiones anteriores. Lo más seguro es que dependan más de su ofensiva, con el cubano Yandy Díaz, el cubano-mexicano Randy Arozarena, el mexicano Isaac Paredes, el dominicano José Siri y el colombiano Harold Ramírez, Brandon Lowe y Josh Lowe, que de sus serpentineros, con Zack Eflin, Aaron Civale, Ryan Pepiot, Zack Littell y Taj Bradley, para aspirar al pasaporte de la pos.

Los Tigres ya no contarán con el cotizado venezolano Miguel Cabrera, con cuya presencia la novena no pudo ganar una Serie Mundial, pero A.J. Hinch, su actual estratega, está moldeando la nómina a su estilo, aun cuando por el momento, su grupo no muestra fortaleza.

Si se analiza a fondo, se pueden ver matices de calidad para un inmediato futuro que podría dar sorpresas y este año puede hacerlo. Con el boricua Javier Báez, Spencer Torkelson, Kerry Carpenter, Mark Canha, Riley Greene y el colombiano Gio Urshela, en plan de refuerzo; y los lanzadores el zurdo Tarik Skubal, el japonés Kenta Maeda, Jack Flaherty, Casey Mize y Reese Olson, las cosas pueden variar sustancialmente.

Scott Servais, el dirigente de los Marineros, cuenta con los elementos para pensar a la vuelta de octubre, a menos que la capacidad de juego de los peloteros no responda a la hora de la verdad. Y eso ocurre, y con frecuencia. Con los dominicanos, el formidable Julio Rodríguez y Jorge Polanco, con Mitch Garver, Ty France y Cal Raleigh, la ofensiva está para colocarse en plan ganador, con el apoyo de los lanzadores abridores, encabezados por el dominicano Luis Castillo, y seguido por George Kirby, Logan Gilbert, Bryce Miller y Bryan Wood.

Y los otros equipos, ¿ya están eliminados? De ninguna manera. En estas líneas son solo las posibilidades para la postemporada de la Liga Americana, sin que por este análisis desaparezcan las opciones de las otras novenas que estarán en competencia y que pueden llegar a dar más de una agradable sorpresa, cuando no se ha jugado todavía ninguno de los 2.430 partidos que tiene la temporada en la Gran Carpa.

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