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Desde los 5 años, Laura Juliana Leguizamo Cortés desarrolló su amor por las fichas de ajedrez. Una casualidad la llevó a conocer los primeros detalles del tablero en el que hoy en día pone todo su esfuerzo, alma y conocimiento para lograr los primeros lugares en competencias.
Su abuelo fue quien le dio ese primer tablero de ajedrez, y desde entonces no ha parado de aprender. Pero no solo a mover las fichas, crear una estrategia de juego o cómo ganarles a los oponentes más desafiantes, sino también a controlar sus emociones, a analizar a sus contrincantes y a entender que a veces las derrotas también pueden convertirse en triunfos.
Hace parte del club Copa Real, que desde hace cinco años se dedica a formar a niños y niñas en el ajedrez. Su proceso de entrenamiento, que es diario, lo hacen en el Centro Comercial Ventura, en Soacha, que tiene sus puertas abiertas para incentivar el desarrollo social de los niños y niñas que aman este deporte.
Allí, el profesor Fernando Gabriel Gómez Hernández, quien es instructor y organizador FIDE (Federación Internacional de Ajedrez), le ha dado a Juliana lo necesario para mejorar sus habilidades deportivas en el ajedrez y la ha motivado para obtener un ranking Elo, un método matemático basado en cálculo estadístico, que clasifica a los jugadores dependiendo de su fuerza mental de juego.
“1800 es un Elo fuerte. Yo considero que Juliana está en ese ranking, es una niña de 1800 de Elo. Está apuntándose a ser 2000 este año”, afirma Gómez, quien además cuenta que encontrar una deportista ella sucede únicamente cuando los planetas se alinean.
La Liga de Ajedrez de Cundinamarca, que es la entidad que reúne a cientos de clubes de diferentes municipios del departamento, se ha convertido en una de las más importantes del país gracias a su gestión.
La creación del circuito de Cundinamarca, en el que Juliana fue subcampeona en 2024, la hizo merecedora de un importante reconocimiento: “Hemos sido reconocidos por la Federación Colombiana de Ajedrez (FECODAZ) como el circuito más grande de Colombia y de Latinoamérica”, cuenta Helberth Alexander Castillo, vicepresidente de la Liga de Cundinamarca y Director del Circuito de Cundinamarca, quien agrega que este proyecto ha llegado a reunir más de 1.500 personas, entre deportistas, padres de familia y aficionados al ajedrez.
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“El ajedrez como deporte es además una excusa para incentivar el turismo y detrás del turismo el desarrollo económico de las comunidades alrededor de un evento que es muy sano y que es de todos y para todos”, afirma Castillo, quien destaca el hecho de que este evento se desarrolle en diferentes municipios, en los que generan impacto.
Un repaso los títulos de Juliana Leguizamo en el ajedrez
Ser subcampeona del Circuito de Cundinamarca es solo uno de los logros de esta niña de 13 años que sueña con convertirse en Gran Maestra Internacional, un título que consiguen solo los mejores jugadores y que en Colombia tienen ocho personas.
Además, Juliana hace parte de la selección colombiana femenina sub 14 que participará en el Campeonato Sudamericano que se realizará en Cali a finales de año. Clasificó al equipo nacional de manera invicta, al obtener seis puntos de seis posibles en el Nacional Escolar Impar de Cartagena 2024.
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El papel de los padres en la formación deportiva en el ajedrez
El proceso formativo de Juliana nunca para. Además de sus entrenamientos habituales de ajedrez, ella aprovecha su tiempo libre para practicar en su celular. Su familia es pilar vital para sus triunfos. Aunque ya no pueda practicar con ellos, “porque siempre les gana”, sí están ahí para apoyarla y felicitarla cuando hay victorias y aconsejarla para mejorar cuando hay derrotas.
“En Juliana se veía esa pasión y esas ganas de seguir con el deporte, entonces como padres decidimos apoyarla”, afirma Yazmín Cortés, su mamá, quien le brinda ese soporte emocional en cada competición.
La cuota de exigencia la pone su papá, Carlos Leguizamo, quien la impulsa a reconocer sus errores y mejorar después de cada competencia.
La inteligencia emocional en este deporte es uno de los elementos fundamentales para triunfar. Antes, durante y después, sobre todo con los niños, tener ese apoyo emocional (o no) es clave para ganar o perder un torneo.
“En el momento de perder siento tristeza, pero después motivación para ganar la próxima vez y mejorar el nivel. En el ajedrez, creo que he mejorado un montón. Alguna vez me puse a ver un video de una competencia que había hecho y dije “ush yo sí jugaba muy mal””, afirma Juliana entre risas.
En un listado muy claro y completo, su entrenador Fernando Gómez destaca varias habilidades de Juliana: atención, percepción, memoria, racionamiento lógico, pensamiento crítico, pensamiento creativo, resolución de problemas, toma de decisiones, comprensión verbal, fluidez verbal, planificación y metacognición, y agrega: “Considero que Juliana es una de las pocas mujeres en Colombia que va a triunfar en el exterior”.
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“De aquí a cinco años me veo teniendo una norma de IM (Maestro Internacional) o GM (Gran Maestro Internacional) dependiendo del nivel y así poder ir a varios torneos internacionales”, afirma Juliana.
No por jugar ajedrez eres más o menos inteligente. Necesitas practicar metodológicamente las habilidades naturales que tienes para desarrollar esas habilidades a fondo, y eso es lo que ha hecho esta deportista que está en camino de convertirse en la mujer más joven en ser Gran Maestra de Colombia.
