Por eso es que cuando un club afronta dos competencias de manera simultáneas guarda a sus mejores hombres para el torneo que considera más importante. Y eso fue lo que hizo Nacional. El sábado, ante Millonarios en El Campín, presentó su segunda formación, porque la primera enfrentará el martes a Peñarol de Uruguay, por la Copa Libertadores.
Pero los suplentes verdolagas se comportaron como titulares y salieron a buscar la victoria sin complejos. Tanto así, que a los 20 minutos de juego ya ganaban 2-0, con anotaciones del defensa central Óscar Murillo.
Millonarios, en un espectacular marco y ante cerca de 37 mil espectadores, reaccionó más por actitud que por fútbol y logró igualar antes del entretiempo.
En el complemento los embajadores parecían seguir de largo, sobre todo porque Nacional se quedó con un hombre menos, por expulsión del delantero peruano Johan Fano. Los dirigidos por Richard Páez manejaban la pelota, pero no llegaban con peligro.
Hasta que a 15 minutos del final el volante Juan Fernando Quintero cobró magistralmente un tiro libre desde 30 metros y marcó el tercer tanto verde.
Millonarios no tuvo cómo empatar. Se fue encima, pero sin claridad, mientras que Nacional terminó contragolpeando y hasta pudo ampliar la ventaja.
El equipo de Santiago Escobar llegó a nueve puntos y es líder solitario del torneo, escoltado por Itagüí con ocho unidades y Huila y Tolima, que tienen siete.
Millonarios sigue sin ganar en casa y deja dudas cada vez que salta a la cancha. Para completar, la ventaja que tiene sobre los últimos en la tabla del descenso comienza a acortarse, así como crece la preocupación de sus hinchas.