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El Banco Central Europeo bajaría las tasas de interés cuatro veces este año a medida que la inflación retrocede más rápidamente de lo previsto anteriormente, según una encuesta realizada por Bloomberg a economistas.
Se espera que los recortes, cada uno de 25 puntos básicos, comiencen en junio y que se realicen nuevas bajas de tasas en septiembre, octubre y diciembre, lo que llevaría la tasa de depósito al 3 %. Si bien dicha proyección incluye un recorte más de lo esperado en la encuesta del mes pasado, sigue siendo más conservadora que los seis recortes, a partir de abril, que los inversionistas están descontando.
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El BCE se encuentra actualmente en espera de ver cómo afectan a la economía las 10 alzas de tasas implementadas desde mediados de 2022. Las autoridades se están centrando especialmente en la evolución de los salarios en el primer semestre de 2024, para confirmar que el aumento de los costos laborales no impedirá que la inflación se desacelere hasta la meta del 2 %.
Los economistas ahora esperan una caída más rápida del crecimiento de los precios, hasta el 2,3 % en 2024. Se trata de una revisión a la baja de 0,3 puntos porcentuales en comparación con la encuesta de diciembre. Todavía prevén un camino lleno de obstáculos y que la inflación se reacelerará desde el nivel meta en el cuarto trimestre hasta un promedio de 2,1 % en 2025.
Tal escenario está en línea con las advertencias de los funcionarios del BCE, quienes han dicho que la dramática desaceleración del año pasado no continuará en 2024, en parte porque los Gobiernos están eliminando gradualmente la ayuda destinada a abordar el alto costo de la vida.
Ahora se prevé una baja para este año de la tasa de inflación subyacente, que excluye componentes volátiles como la energía y los alimentos, pero una ligera alza en 2025, manteniéndose por encima de la meta del BCE del 2,2 %.
Según la encuesta, a una recesión en el segundo semestre de 2023 le seguirá una recuperación gradual que podría acelerarse a lo largo de este año. Las expectativas de crecimiento se mantuvieron estables para 2024 y aumentaron en 0,1 puntos porcentuales para 2025.
Los datos de Eurostat publicados el lunes mostraron que la producción industrial cayó un 0,3 % en noviembre, en línea con las previsiones de los economistas. Eso sitúa el indicador general de producción en el nivel más bajo desde finales de 2020.
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