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Los escándalos en la Universidad Incca no dan tregua. Ahora, la polémica es suscitada por una resolución en la que el viceministro de Educación, Luis Fernando Pérez, aprobó el registro calificado para el nuevo pregrado de la institución. Se trata del programa de Estadística que es presencial y cuenta con 144 créditos académicos, con una duración de nueve cuatrimestres. (Lea: Las claves de la crisis en la Universidad Incca)
Pérez otorgó por siete años el registro calificado del pregrado mediante la resolución 2283 del 8 de marzo. “El programa identificado en el artículo anterior deberá ser registrado en el Sistema Nacional de Información de la Educación Superior —SNIES- o en el medio que disponga el Ministerio de Educación Nacional para estos efectos”, señala el documento.
Este anunció surgió en medio de las denuncias de los profesores, estudiantes y trabajadores por el incumplimiento de las directivas en los pagos. Por tal razón, alegaban que la solución no era crear más programas, sino brindarle mayor calidad académica a las nueve carreras que ofrece la universidad. No obstante, las directivas dicen que para salir de la crisis financiera seguirán radicando en el Ministerio de Educación registros calificados para nuevos pregrados. María Carolina Villamizar asegura que ya han tramitado 11.
Tras la polémica, la cartera encabezada por la ministra María Victoria Ángulo, por medio de un comunicado anunció la designación de un inspector in situ para vigilancia especial tras las denuncias presentadas. “De acuerdo con los literales b y c del Artículo 11 de la Ley 1740 de 2014, se encuentran “afectadas de manera grave las condiciones de calidad del servicio, y porque sus recursos y rentas están siendo conservados, invertidos, aplicados o arbitrados indebidamente, con fines diferentes al cumplimiento de su misión y función institucional””, dice el comunicado. (Puede leer: ¿Siguen los problemas en la Universidad Incca?)
Según el ministerio, estas medidas se adoptaron luego de una serie de acciones iniciadas en enero con la radicación de las denuncias por la crisis financiera, académica y administrativa que afronta la Universidad Incca. Aclaró que tras las visitas a la sede principal y a las instalaciones en Fusagasugá ordenaron una serie de medidas preventivas, que consisten en “señalar condiciones de carácter académico, administrativo y financiero que la Institución y sus directivos deben atender para corregir o superar en el menor tiempo posible (…) el inspector in situ hará seguimiento a las acciones que se adelanten por parte de las directivas de la institución para garantizar a estudiantes, padres de familia y comunidad la prestación adecuada del servicio”, concluye la cartera.