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La ciudad de Peñico, ubicada al norte del Perú, fue descubierta por un grupo de arqueólogos. Las ruinas datan de hace 3.500 años y se cree que este era un importante centro de comercio que conectaba la zona costera del Perú con la cordillera de Los Andes.
Se estima que la población que se encontraba a 600 metros sobre el nivel del mar fue fundada entre el 1800 y el 1500 a.C, mientras que en el Medio Oriente y Asia se desarrollaban algunas civilizaciones.
“Imágenes de un dron del sitio tomadas por los investigadores muestran una estructura circular en una terraza en la ladera de una colina en el centro de la ciudad, rodeada por restos de edificios de piedra y barro”, reportó The Telegraph.
Tras ocho años de investigación, los arqueólogos encontraron 18 estructuras, entre las cuales se encontraban complejos residenciales y templos.
“En los edificios del sitio, los investigadores descubrieron objetos ceremoniales, esculturas de arcilla de figuras humanas y animales y collares hechos de cuentas y conchas marinas”, reportó la BBC.
Algo que sorprendió a los investigadores fue el parecido entre Peñico y la ciudad de Caral, emergió hace 5.000 años, alrededor del 3000 a.C, y es conocida como la civilización más antigua del continente americano y creen que este descubrimiento podría dar más pistar sobre lo que sucedió con esta civilización.
“Caral se considera contemporánea de las civilizaciones de Egipto, India, Sumeria y China. Sin embargo, a diferencia de ellas, se desarrolló en completo aislamiento, según los investigadores”, escribió The Telegraph.
“Estaban situados en un lugar estratégico para el comercio, para el intercambio con sociedades de la costa, la sierra y la selva”, dijo Ruth Shady, quien lideró esta excavación y la de la ciudad de Caral en 1990.
La ciudad de Peñico será abierta al público el próximo 12 de julio. “Los vestigios encontrados en este complejo arqueológico incluyen esculturas de barro, relieves y objetos ceremoniales que representan la mezcla de influencias culturales de la costa, la sierra y la selva. El descubrimiento de estos elementos ha llevado a los arqueólogos a concluir que la ciudad fue un centro clave en la circulación de bienes como la hematita, utilizada para producir pigmentos rojos, y otros recursos naturales de la región", reportó Infobae.