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“La soberanía está en constante necesidad de ser representada y visualizada” - Andreas Behnke
En la política del día a día asuntos de finanzas y de políticas públicas salen a relucir y en gran medida son estos los que fijan el curso por el cual cierto mandatario o aspirante a mandatario podría dirigir la economía y la sociedad de un determinado territorio. Sin embargo, aspectos relacionados a la cultura popular son olvidados y poco discutidos en oficinas ministeriales o campañas políticas. Dentro de estos aspectos, la moda y la estética (comunicación no verbal) se les resta importancia y pasan a ser tomados por sentado.
A pesar de esto, es ineludible que la política es más amplia y compleja. Esta pasa de relaciones y prácticas estatales e internacionales, a prácticas de poderosos actores no estatales que inciden en lo cotidiano. De acuerdo con el internacionalista Andreas Behnke un gobierno necesita ser visualmente representado para obtener legitimidad y asentarse en el poder. En el actual panorama de elecciones colombianas, se hace evidente la poca conciencia que existe sobre la moda y la vestimenta como una herramienta de persuasión y comunicación política.
También es evidente el poco nivel de conciencia y rigurosidad en el momento de vestir a las figuras que nos rigen en Colombia. Un caso que causó revuelo fue el de la Primera Dama María Juliana Ruiz, quien en una visita diplomática a Washington portó una chaqueta azul claro de la firma de Leal Daccarett, prenda que en redes sociales se convirtió en motivo de burla y adquirió la denominación de ‘Chaqueta de Foami’. Quienes la vistieron, en este caso los diseñadores Francisco Leal y Karen Daccarett, afirmaron en la prensa que el styling se hizo de esa manera debido a que la intención era presentar a la primera dama cómo “una mujer jóven y que está comprometida con el diseño y con la industria local”. Así mismo, los diseñadores mencionaron que la idea de esto era esencialmente arriesgarse.
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A pesar de que las intenciones eran buenas, confundieron la figura de la Primera Dama con la de una estrella del rock y arriesgarse demasiado al vestir una figura política resultó contraproducente. Faltó una labor investigativa y etnográfica que revelara la individualidad de la primera dama ya que esta no es solo una valla publicitaria que únicamente sirve para promocionar diseño colombiano. Así mismo, faltó indagar en archivos fotográficos o sartoriales para encontrar cultura material relevante que sirviera de herramienta en la selección de prendas para la primera dama.
De igual manera, cayeron en la obviedad de poner en la primera dama la representación del poder estatal a nivel sartorial, mientras que el presidente sí mantuvo un atuendo sobrio y tradicionalmente apropiado para el ámbito político. En otras palabras, el vestir en la política no necesariamente tiene que buscar lo extravagante, sino basarse en leer el contexto del personaje político, reflejar sus ideales y tendencias y emitir un mensaje claro. La importancia está en los detalles.
Esto es un esfuerzo que ha hecho el candidato presidencial Juan Manuel Galán ya que implementa guiños de su partido y sus ideales políticos en sus preferencias de indumentaria. Instagram de hecho, resulta ser una herramienta útil para hacerle un seguimiento a sus elecciones sartoriales, ya que sirve como un archivo de imágenes en orden cronológico (generalmente) que dan pista sobre el evento al que ha asistido revelando su atuendo.
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En cuanto a sus elecciones sartoriales, Juan Manuel Galán es un candidato que viste de una manera sobria y presta atención a los detalles. Esto se evidencia en la persistencia del rojo, color reminiscente al de su partido el Nuevo Liberalismo, en accesorios como su reloj, sus zapatos y corbata. Cabe mencionar a sus pines que han causado mucho revuelo en twitter cuando los ha portado en debates presidenciales. Uno enuncia la palabra ‘FEMINISTA’ y el otro es una hoja de marihuna, que insinúa su propuesta de campaña sobre la regulación de las drogas.
Uno de los atuendos que usó en una visita a Armenia, Quindío llamó mi atención. Este consistía de una camisa blanca, jeans, una mochila, manillas y unos tenis rojo intenso. En general este resulta ideal para el tipo de actividad que estaba realizando en aquel momento, caminar por las calles de la ciudad e interactuar con las personas. El uso de la mochila lo hace ver como una persona accesible y abierta, sin embargo, debo afirmar que los tenis rojos generan un bloque de color que lo hacen ver estrafalario. Aunque trata de hacerle un guiño a su partido por medio del color rojo, los zapatos en realidad no se manifiestan convenientes sino que atención de la gente hacia los pies del candidato y no a su rostro.
Estos zapatos recuerdan a la tendencia de la cual muchos pastores e inclusive mandatarios han sido víctimas, estos se han encontrado portando tenis de cientos de dólares e inclusive de miles mientras asisten a eventos religiosos o culturales. Una conocida cuenta de Instagram llamada ‘Preachers n Sneakers’ se ha encargado de documentar a estos personajes usando Jordans y Versace Chain Reactions entre otros, mientras predican una vida de austeridad y entrega cristiana.
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Al venir de un linaje político, Juan Manuel Galán ha podido empaparse de los quehaceres del oficio de la política, en debates es un candidato que se sabe expresar y modera sus tiempos llegando al grano de manera concerniente. En sí, Juan Manuel Galán emula a su padre a través de sus ideales políticos pero a la vez busca diferenciarse de él, puesto que desea asentar su individualidad y posicionarse como figura política reconocible.
Su patrimonio lo hace un candidato con mucho material cultural que valdría la pena explorar y explotar. Un ejemplo palpable es la camisa que su padre usó el día de su asesinato, esta camisa de hecho está exhibida en el Museo Nacional y es atesorada por esta institución como un elemento histórico de colección. Hace un par de meses, por ejemplo, la familia de Gabriel García Marquez puso a la venta las prendas que pertenecieron al escritor. En el reportaje de Camila Osorio para El País, se evidencia la importancia material de las ropas y cómo estas cargan con historias que trascienden lo personal.
Galán no necesariamente tiene que adherirse a elementos obvios y literales como los pines y los colores de su partido, el candidato tiene la posibilidad de aventurarse con prendas que revelen más su individualidad y herencia. Por qué no usar prendas heredadas de su padre, por qué no usar ropas que tengan un significado biográfico importante para él. El poner esto en práctica le dará mayor autenticidad y revelará un candidato vulnerable, que tiene una historia sustancial que contar de manera no verbal.