Visitantes de un museo chino presentaron una denuncia contra el artista malasio Heman Chong, luego de que este compartiera sus imágenes en redes sociales junto con “acusaciones despectivas”, como han señalado.
Según la querella, Chong compartió fotos de los visitantes posando con las obras de su exposición El Verano Interminable, que se presentó en el museo UCCA Dune. En esas publicaciones, que fueron eliminadas, el artista escribió comentarios como: “... usaron mi obra como fondo para su narcisismo”, “... imágenes egocéntricas” y “... se apropiaron de mi obra como fondo para sus imágenes”.
Según la investigación de The Art Newspaper, que tuvo acceso al documento de la demanda, se encontró que Chong también es acusado de violar los derechos de retrato de China. Según la enmienda al Código Civil de China prohíbe el uso de imágenes reconocibles de personas sin su consentimiento expreso. Asimismo, se denunció que el artista ridiculizó y humilló al público que apoyó su trabajo y que su acción era tomada como un acto de discriminación por género, ya que usó únicamente imágenes de mujeres.
Por el momento, Chong no se ha pronunciado y el Centro de Arte Contemporáneo UCCA tampoco ha emitido una comunicación al respecto. “El silencio de UCCA traicionó la confianza pública. En una época en que los museos dependen del apoyo de los visitantes, esta falla institucional facilita la discriminación y la explotación”, manifestaron los denunciantes.
Se espera que el artista ofrezca “disculpa formal bilingüe en Instagram admitiendo la violación de los derechos de imagen y los insultos públicos” y que “UCCA/Aranya deben disculparse conjuntamente e implementar revisiones éticas para los artistas”.
Un portavoz de la UCCA declaró a The Art Newspaper: “La UCCA contactó al artista Heman Chong inmediatamente al enterarse de las preocupaciones planteadas en respuesta al contenido que publicó en su cuenta personal de Instagram”, tras lo cual el artista eliminó las publicaciones de inmediato. Y aseguraron que han ofrecido disculpas directas a las personas afectadas, “quienes han aceptado la disculpa”.
¿Qué dice la demanda contra Heman Chong?
De acuerdo con los afectados, ellos ejercieron un derecho legítimo de apreciar y documentar su experiencia. “Al ser una exposición pagada, los visitantes invirtieron tiempo y dinero para apoyar al artista y a la institución sin dañar las obras ni interrumpir las operaciones. Nuestras fotos se tomaron de buena fe, lo que refleja un compromiso genuino con la exposición”, expresaron al medio ya citado.
El grupo, autodenominado “Visitantes Victimizados de Heman Chong, UCCA y Aranya”, indicó que “muchos museos de todo el mundo fomentan esta interacción para fomentar la participación y promocionar las exposiciones. Nuestras fotos, compartidas de buena fe, aumentaron la visibilidad de Aranya, UCCA, el artista y la exposición, una iniciativa comercial que depende del apoyo del público”.
Los denunciantes señalaron que tanto artistas como instituciones culturales deben respetar la libertad del público para relacionarse con las obras, siempre que no haya daño ni mala intención. “Si la fotografía representa un inconveniente, los museos deberían prohibirla de forma clara mediante señalización o políticas”, en lugar de permitirla y luego avergonzar a los asistentes, advirtieron. También cuestionaron que si una muestra no está pensada para todo público, entonces no debería estar abierta al público general con entrada paga.
En lugar de responsabilizar a los visitantes por posibles malentendidos, propusieron ofrecer mayor contexto a través de textos explicativos o visitas guiadas. “Estos enfoques mantendrían el profesionalismo y evitarían alienar al público”, concluyeron.