“El plan 15/33”: secuestros, sociopatía y venganza
A través de la historia de un secuestro, Shannon Kirk desarrolló a Lisa Yyland, una mujer que personifica sus amores, miedos y rencores sin sentir ningún tipo de remordimiento.
Juliana Vargas
Shannon Kirk hizo de la sociopatía el vehículo por medio del cual descubrió parte de la psicología humana y construyó un thriller en el que dicho trastorno se convierte en un arma contra el mal.
Hay alguien a su lado. Podría considerarse una sociópata, pero es capaz de manejar sus sentimientos a voluntad. Su corazón es de piedra, pero ella no tiene que hacer más que desear compasión o tristeza para poder activar ese sentimiento. Cuando no tiene que activar algún sentimiento, su rostro permanece impasible y sus ojos inexpresivos. Su tono de voz es un conjunto de sonidos que se mantienen en línea recta y sus movimientos nunca reflejan ansiedad, miedo o inseguridad. Eso sí, en su alma se esconde un profundo remordimiento y su mente retiene una ira que se mece como olas en borrasca. Cuidado con hacerla enfadar, pues lo deshumanizará, lo perseguirá y no solo lo matará, lo hará desaparecer. No crea que logrará despertar en ella algún tipo de remordimiento, todo en ella es determinación y no conoce el arrepentimiento.
Puede usted preguntarse cuáles fueron las causas de su personalidad. Cuando a uno lo secuestran, cuando uno mata a su captor, cuando uno jura vengarse del grupo que ha hecho de eso un negocio, una personalidad tendiente a la sociopatía se convierte en un mecanismo de defensa. No hay vuelta atrás, no hay cabida para la compasión o las instituciones jurídicas y la vida empieza a girar en torno a un plan, como si fuera un satélite encadenado.
El plan 15/33 que ha ideado Lisa Yyland ha afectado incluso a quien ha escrito la obra del mismo nombre. Shannon Kirk sabe que es ficción, pero siguen siendo su tiempo, su corazón, sus pensamientos y toda ella los que han construido la novela, sin disociarse de sí misma, por mucho que trate de concentrarse en el lado profesional del proceso de escritura. El plan 15/33 es ficción, pero también existen miles de Lisa Yyland alrededor del mundo, miles de mujeres privadas de su libertad física y sexual y, por ende, la obra está cargada de una humanidad que hiere. El plan 15/33 es ficción, pero sus personajes se desprenden de los mayores anhelos y miedos de la autora, así como también de una concienzuda documentación relacionada con la sociopatía y con la manera como el hombre traduce las emociones en uno de sus cinco sentidos. El plan 15/33 es ficción, pero también está lleno de amores que Kirk debe expresar y demonios que todos debemos expiar.
Puede leer: Viajar al lugar de los hechos, la esencia del reporterismo de Kapuscinski
Y tal vez lo más importante de El plan 15/33 es su lucha continua. Shannon Kirk ha escrito dos partes de esta historia sobre privaciones, superaciones, venganza y justicia: El método 15/33 y El plan 15/33. Pronto escribirá una tercera y asegura que la vida de Lisa Yyland podría tomar miles de direcciones. Por esto, Shannon Kirk les agradece a sus lectores colombianos, pues dice que la han apoyado a través de este camino que espera sea tan largo como le alcancen las palabras.
El plan 15/33 ha sido un escape, un obstáculo, una puerta, un secreto y una revelación para Shannon Kirk. Ha sido un remolino de emociones y descubrimientos que espera compartir con sus lectores. Ese es el plan de Kirk.
Shannon Kirk hizo de la sociopatía el vehículo por medio del cual descubrió parte de la psicología humana y construyó un thriller en el que dicho trastorno se convierte en un arma contra el mal.
Hay alguien a su lado. Podría considerarse una sociópata, pero es capaz de manejar sus sentimientos a voluntad. Su corazón es de piedra, pero ella no tiene que hacer más que desear compasión o tristeza para poder activar ese sentimiento. Cuando no tiene que activar algún sentimiento, su rostro permanece impasible y sus ojos inexpresivos. Su tono de voz es un conjunto de sonidos que se mantienen en línea recta y sus movimientos nunca reflejan ansiedad, miedo o inseguridad. Eso sí, en su alma se esconde un profundo remordimiento y su mente retiene una ira que se mece como olas en borrasca. Cuidado con hacerla enfadar, pues lo deshumanizará, lo perseguirá y no solo lo matará, lo hará desaparecer. No crea que logrará despertar en ella algún tipo de remordimiento, todo en ella es determinación y no conoce el arrepentimiento.
Puede usted preguntarse cuáles fueron las causas de su personalidad. Cuando a uno lo secuestran, cuando uno mata a su captor, cuando uno jura vengarse del grupo que ha hecho de eso un negocio, una personalidad tendiente a la sociopatía se convierte en un mecanismo de defensa. No hay vuelta atrás, no hay cabida para la compasión o las instituciones jurídicas y la vida empieza a girar en torno a un plan, como si fuera un satélite encadenado.
El plan 15/33 que ha ideado Lisa Yyland ha afectado incluso a quien ha escrito la obra del mismo nombre. Shannon Kirk sabe que es ficción, pero siguen siendo su tiempo, su corazón, sus pensamientos y toda ella los que han construido la novela, sin disociarse de sí misma, por mucho que trate de concentrarse en el lado profesional del proceso de escritura. El plan 15/33 es ficción, pero también existen miles de Lisa Yyland alrededor del mundo, miles de mujeres privadas de su libertad física y sexual y, por ende, la obra está cargada de una humanidad que hiere. El plan 15/33 es ficción, pero sus personajes se desprenden de los mayores anhelos y miedos de la autora, así como también de una concienzuda documentación relacionada con la sociopatía y con la manera como el hombre traduce las emociones en uno de sus cinco sentidos. El plan 15/33 es ficción, pero también está lleno de amores que Kirk debe expresar y demonios que todos debemos expiar.
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Y tal vez lo más importante de El plan 15/33 es su lucha continua. Shannon Kirk ha escrito dos partes de esta historia sobre privaciones, superaciones, venganza y justicia: El método 15/33 y El plan 15/33. Pronto escribirá una tercera y asegura que la vida de Lisa Yyland podría tomar miles de direcciones. Por esto, Shannon Kirk les agradece a sus lectores colombianos, pues dice que la han apoyado a través de este camino que espera sea tan largo como le alcancen las palabras.
El plan 15/33 ha sido un escape, un obstáculo, una puerta, un secreto y una revelación para Shannon Kirk. Ha sido un remolino de emociones y descubrimientos que espera compartir con sus lectores. Ese es el plan de Kirk.