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Yoann Bourgeois es el director de la obra en la que seis artistas desafiarán las leyes de la gravedad, tratando de mantener el equilibrio sobre una plataforma suspendida que se mueve: choca, se eleva, rueda y se tambalea. Los movimientos son impredecibles ya que la única forma de enfrentarlo es moverse ágilmente. Una peligrosa danza de la supervivencia.
Una puesta en escena para apreciar cómo la vida se vuelve ligera y divertida por personajes que desde la sorpresa y la destreza vuelven a la infancia y suscitan las risas del público. Los seis acróbatas construyen con sus movimientos esta pieza de teatro físico con una evidente influencia del circo. Tres hombres y tres mujeres se moverán en un cuadrado móvil que sufre los tormentos de una tierra desatada. La lucha será por vencer el territorio móvil para convertirlo en un columpio enorme.
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Bourgeois, el director, ha dedicado su vida a las artes circenses y la danza contemporánea. Siempre se ha inclinado hacia las ideas de la ingravidez y la física de la suspensión, fascinación que justifica este espectáculo en el que retará a los artistas a que cumplan con las exigencias físicas que implica intentar bailar sobre el movimiento y la sorpresa. La obra contiene coreografías al ritmo de Beethoven y Fran Sinatra.