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“La fotografía y el arte son formas de expandir las historias”

La artista caleña Tatiana Aristizábal habló sobre su fotolibro “El caballero del páramo”, su relación con la fotografía y las implicaciones de su proyecto.

Andrea Jaramillo Caro
25 de marzo de 2025 - 12:00 p. m.
Tatiana Aristizábal es artista y fotógrafa graduada de la U. de Kentucky.
Tatiana Aristizábal es artista y fotógrafa graduada de la U. de Kentucky.
Foto: Montaña Gama Vilallonga
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¿Cuándo y cómo nació el proyecto de “El caballero del páramo”?

Surgió en 2022, cuando estaba haciendo un máster en fotografía de autor en Madrid, y empecé a experimentar un poco con las fotos de los páramos, haciendo intervenciones, pero al mismo tiempo tenía la intención de hablar sobre el secuestro de mi hermano. Había visitado los páramos por primera vez en 2019, en un intento por reconectar con el país y las montañas, ya que había estado viviendo por fuera porque me fui de Colombia en 2006. Durante ese proceso de la maestría tuve una conversación con un amigo de este proyecto, y a partir de ella traté de reconectar con Colombia a través de los páramos, y con ellos empezó a nacer “El caballero del páramo”, como un proyecto que habla sobre el conflicto armado, basado en mi experiencia con el secuestro de mi hermano y la crisis climática en los páramos. En 2023 conecté con Santiago Escobar Jaramillo, de Raya Editorial, para empezar a trabajarlo como fotolibro.

¿Por qué se decidió por un fotolibro?

Es la forma de difundir la historia, es un poco diferente cuando se hace a manera de libro. Algo que noté cuando lo tuve en mis manos fue que se sentía como un álbum familiar, porque hay muchas de mis cartas, de mis fotos de archivo, de documentos, entre otros. Algunas personas que lo han visto me han dicho que conectan con la historia y no necesariamente con la mía, sino con la de Colombia. Este fue un proyecto bastante íntimo, pero en el que muchos se pueden ver reflejados en ese sentimiento de frustración de ver un país tan violento. Ahí es donde creo que tener el fotolibro en las manos se siente diferente a entrar a una galería y que cuente la historia una y otra vez en visitas guiadas. Creo que la manera en la que hice este proyecto es más amplia y otra forma de crear memoria histórica.

¿Qué implicó el hecho de plasmar una historia íntima para consumo del público?

En ese momento no me di cuenta de lo vulnerable que estaba siendo. Como estaba trabajando con Santiago y estaba en mi mundo, teniendo mi propio proceso de catarsis, no lo noté. Fue hasta unos días antes de la presentación en Cali que caí en cuenta de que estaba desnudando bastante mi ser. Fue un conflicto interno que tuve por un tiempo, pero al final, aunque haya sido muy duro, sé que este tipo de historias tienen que conocerse para crear memoria histórica, y que algo que pasó hace 25 años lo recordemos no para causar más dolor, sino porque es algo que sigue sucediendo.

¿Por qué se dedicó a la fotografía? ¿Qué fue lo primero que le llamó la atención de ella?

Con la fotografía tengo una historia larga. A los 12 años mi papá me compró mi primera cámara de rollo y empecé a documentar la vida en el colegio. Siempre me gustó mucho registrar lo que estaba pasando. Luego, cuando me mudé a Estados Unidos, seguí tomando fotos y comprando cámaras. Veo la fotografía y el arte como una forma de amplificar las historias, y eso fue lo primero que me llamó la atención. Antes hacía más fotoperiodismo, pasé a la documental porque me interesaba pasar más tiempo con una historia que fuera algo más de reportaje, no solo el momento e irme. Así descubrí la fotografía de autor, donde me di cuenta de que puedo contar historias que valen la pena amplificar. De esa forma llegué a la fotografía expandida, que fue lo que hice en el fotolibro, y ahora la uno a manera de catarsis y para soltar energías que tenía estancadas.

Para este proyecto trabajó con la transferencia de imágenes en biomateriales, ¿podría explicar qué es eso?

Lo utilicé como un soporte. A partir de materiales como gelatina y trocitos de musgo creé una base y sobre ella hago la transferencia de imágenes. En el proyecto está una de un frailejón y otra foto de mi hermano. Empecé a explorar un poco con estos materiales nuevos para unir estos dos mundos del conflicto armado y los páramos.

¿Cómo ha cambiado su visión de Colombia y de su vida a través de la fotografía?

Este proyecto fue un redescubrimiento, me enseñó a ir despacio. Cuando empecé con la idea del fotolibro y a desarrollarlo como mi gran meta, aprendí a ir sin afanes. Tenía como la meta de lograr publicarlo este año porque se conmemoran los 25 años del secuestro y quería sacar el fotolibro, hacer una exposición. El tema de ir sin prisas lo entendí especialmente en este proyecto y creo que también a través de la fotografía o viendo obras de otros artistas. Así se crea empatía.

¿Cómo cree que se crea empatía a través de un medio visual?

La fotografía tiene la capacidad de entender otras realidades y dar una imagen visual de lo que está pasando en el mundo y ni siquiera muy lejos, sino en nuestra misma ciudad. Históricamente, la fotografía ha revolucionado cómo vemos el mundo. Por ejemplo, las noticias se difundían a través de imágenes y fotografías de lo que estaba pasando en otros lugares, porque no eran de fácil acceso. Ahí es donde se ven las otras realidades, eso es lo que hace la fotografía: no vivir tanto en la burbuja propia, sino crear un poco de empatía frente a lo que está pasando en el mundo.

¿Quiénes son sus referentes fotografía?

Me gusta mucho Ana Mendieta y la crudeza con la que ella representaba temas tan fuertes. También admiro mucho un fotógrafo de Nueva York llamado Dwayne Michaels, que es un poco más surrealista. También me fijo mucho en fotógrafos o artistas de mi época. En Cali hay ahora una artista que me gusta mucho: Martha Calle, me parece muy linda la forma en la que ella hila la historia.

¿Para usted qué es la memoria?

La memoria es lo que no olvidamos. Lo que activamente trabajamos para que esté presente.

Andrea Jaramillo Caro

Por Andrea Jaramillo Caro

Periodista y gestora editorial de la Pontificia Universidad Javeriana, con énfasis en temas de artes visuales e historia del arte. Se vinculó como practicante en septiembre de 2021 y en enero de 2022 fue contratada como periodista de la sección de Cultura.@Andreajc1406ajaramillo@elespectador.com
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