La diabetes es una enfermedad metabólica crónica caracterizada por niveles elevados de glucosa en sangre (o azúcar en sangre), y con el tiempo produce daños graves en el corazón, los vasos sanguíneos, los ojos, los riñones y los nervios.
La más común es la diabetes tipo 2 presentada en adultos, que ocurre cuando el cuerpo se vuelve resistente a la insulina o no produce suficiente insulina. Mientras que la diabetes tipo 1, también conocida como diabetes juvenil o diabetes insulinodependiente, es una afección crónica en la que el páncreas produce poca o ninguna insulina por sí mismo.
Según la Federación Internacional de la Diabetes, actualmente hay más de 537 millones de personas entre los 20 y 79 años que padecen de esta patología en el mundo, y se cree que esta cifra podría aumentar a 784 millones de personas en 2045.
“La diabetes es una enfermedad que se caracteriza por tener niveles de glucosa elevada en la sangre. Esta enfermedad se puede prevenir con ejercicio regular, alimentación saludable y manteniendo el peso corporal. Factores determinantes, porque en promedio 8 de cada 10 personas que sufren de sobrepeso padecen diabetes y con el pasar de los años pueden desarrollar enfermedades del corazón, derrames cerebrales o enfermedades renales, debido a la alta concentración de glucosa en la sangre”, afirma el Dr. Miguel Omeara, endocrinólogo de Compensar EPS.
En las Américas existen cerca de 62 millones de personas que padecen diabetes, y según la Organización Panamericana de la Salud (OPS), la mayoría vive en países de ingresos bajos y medianos; asimismo, se estima que cada año cerca de 244 mil (1.5 millones en todo el mundo) muertes se atribuyen a esta enfermedad. Es de resaltar que, en la mayoría de casos, la diabetes es una consecuencia de otras patologías, como la obesidad, frente a esto, la OPS revela que la obesidad infantil afecta al 33,6 % de los niños, niñas y adolescentes de 5 a 19 años en las Américas.
Mientras que en Colombia, las cifras de la Cuenta de Alto Costo, indican que 3 de cada 100 colombianos padecen diabetes. Solo durante 2021 se reportaron 1.474.567 personas diagnosticadas con esta enfermedad, y se evidenció una mayor prevalencia en Bogotá, Antioquia y Valle del Cauca.
De igual forma, la más reciente Encuesta Nacional de la Situación Nutricional (2015) del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) revela que en el país cerca del 25 % de los niños, niñas y jóvenes tiene sobrepeso, lo que indicaría que, si se mantienen las proporciones estadísticas, el 80 % de esos menores de edad tendrán diabetes. Cabe destacar que la incidencia de esta enfermedad en menore de edad es baja, sin embargo, sí puede ser un factor desencadenante si no es controlada de manera adecuada.
“El sobrepeso u obesidad, hace que el cuerpo necesite producir más insulina para llevar la glucosa a las células y el páncreas, por lo tanto, debido a este esfuerzo, el páncreas se va cansando y reduce su capacidad de producir insulina. Hacer un control efectivo de la obesidad en nuestros niños y orientarlos a tener hábitos saludables, reducirá la cantidad de personas con diabetes en el futuro”, agrega el Dr. Omeara.
Así como la obesidad es una de las principales causas de la diabetes, esta última enfermedad también puede desencadenar problemas de salud o diversas patologías, ya que según la OPS, la diabetes es una de las principales causas de la ceguera, ataques cardíacos, derrames cerebrales y amputación de miembros inferiores. “La diabetes mal controlada aumenta las posibilidades de estas complicaciones y la mortalidad prematura. Además, las personas con diabetes tienen mayor riesgo de presentar enfermedades cardiovasculares y tuberculosis, especialmente aquellas con mal control glucémico”, enfatiza la entidad.
Y aunque la Federación Internacional de la Diabetes destaca que el 80 % de las personas con esta patología son diagnosticadas, también existe un 20 % restante que no logra identificar y tratar la enfermedad, por lo que la primera y más recomendada acción para reducir el riesgo de sufrir de diabetes es la de controlar la obesidad y apropiar hábitos saludables.
“Promover los hábitos alimenticios saludables rica en proteínas y vegetales, reduciendo las bebidas azucaradas y los excesos de sodio; promover la actividad física por lo menos de 30 minutos al día, tener en familia mecanismos conjuntos para controlar el peso y tener prácticas comunes en casa que permitan aprender entre todos sobre salud nutricional, siguiendo siempre las indicaciones de los profesionales de la salud”, comenta Miguel Omeara, endocrinólogo de Compensar EPS.
Y noviembre, mes en el que se conmemora el Día Mundial de la Diabetes, se convierte en una oportunidad única para generar más conciencia acerca del impacto de esta enfermedad en la salud pública. Por lo que se hace importante que más personas, entidades e instituciones fortalezcan los canales de comunicación a información frente a esta patología; asimismo, se debe reconocer la importancia del acceso a tratamientos asequibles y en tiempos justos, pues insumos como la insulina son fundamentales para la supervivencia de los y las diabéticas, así como de garantizar calidad de vida aún padeciendo la enfermedad.