Con el paso de los años, las cajas de compensación familiar se han consolidado como actores fundamentales en la promoción de la educación y la formación técnica y profesional. A través de programas de capacitación, becas y alianzas con instituciones educativas, estas entidades contribuyen a mejorar la calidad de vida de miles de familias, facilitando el acceso a la educación y el desarrollo de competencias laborales que responden a las demandas del mercado.
En Bogotá, cuatro cajas de compensación se destacan por su compromiso con la formación: Colsubsidio, Compensar, Cafam y Comfacundi. Cada una ofrece una propuesta educativa integral, que abarca desde subsidios para útiles escolares hasta programas técnicos, tecnológicos y profesionales, con modalidades flexibles y beneficios especiales para sus afiliados. Por ello le contamos en detalle las ofertas educativas de cada una de ellas con las cuales están transformando la vida de los colombianos.
Un enfoque integral para la formación
Colsubsidio es una de las cajas de compensación más reconocidas en Bogotá y su área metropolitana, con una trayectoria sólida en el apoyo a la educación de sus afiliados. De acuerdo con la entidad, su oferta educativa se caracteriza por un enfoque integral que combina subsidios directos, programas de capacitación y alianzas con instituciones de educación técnica y superior.
Uno de los beneficios más visibles es el subsidio educativo en forma de bono escolar, que hoy asciende a $80.000 y puede ser utilizado para la compra de útiles escolares en tiendas autorizadas en Cundinamarca, Tolima y Risaralda. Este apoyo económico facilita que las familias puedan cubrir los gastos básicos relacionados con la educación de sus hijos entre cinco y 12 años, especialmente en los niveles de básica y media.
Sin embargo, más allá de este apoyo, Colsubsidio ha desarrollado una robusta oferta de programas de formación técnica y profesional a través de convenios con instituciones educativas reconocidas, para facilitar el acceso a cursos técnicos, tecnológicos y universitarios con beneficios exclusivos para sus afiliados. “Estos programas están diseñados para responder a las necesidades del mercado laboral, ofreciendo formación en áreas como tecnología, administración, salud, diseño y manufactura, entre otras”, detallan en su oferta.
La modalidad de estos cursos es flexible, combinando clases presenciales con opciones virtuales, lo que permite a los trabajadores y sus familias ajustar su formación a sus horarios y responsabilidades. Además, Colsubsidio promueve la continuidad educativa mediante subsidios adicionales para la educación superior, facilitando que jóvenes y adultos puedan avanzar en sus estudios y mejorar sus oportunidades laborales.
Capacitación y becas para el desarrollo profesional
Compensar es otra caja de compensación que ha puesto un fuerte énfasis en la educación y la formación técnica y profesional, con una oferta que combina subsidios, programas de capacitación y una red de alianzas estratégicas con instituciones educativas.
Uno de los beneficios más importantes es el subsidio educativo de $95.700, entregado a través de la Tarjeta Compensar, que puede ser utilizado para la compra de útiles escolares, uniformes, alimentos y dispositivos tecnológicos para estudiantes entre seis y 18 años, a la par que contribuye a que las familias puedan afrontar los costos asociados a la educación básica y media.
En cuanto a la formación técnica y profesional, Compensar destaca por su amplia oferta de cursos, talleres y programas de capacitación. La caja tiene su Fundación Universitaria Compensar, que ofrece programas técnicos, tecnológicos y universitarios con descuentos y facilidades de pago para los afiliados.
“Nuestro campus refleja nuestra convicción de que la educación debe evolucionar al ritmo del país, convirtiéndose en un escenario que prepara profesionales con visión crítica, habilidades técnicas y una profunda conciencia social, capaces de generar cambios significativos en la sociedad. Aquí, estudiantes, docentes, empresarios y comunidades convergen para intercambiar saberes y generar soluciones que respondan a los desafíos de un contexto cada vez más dinámico y exigente”, afirma Margarita Añez, rectora de la UCompensar.
Además, esta caja mantiene alianzas con otras instituciones educativas reconocidas, ampliando la oferta académica y facilitando el acceso a estudios de calidad en diversas áreas del conocimiento. Los programas están orientados a fortalecer competencias técnicas, habilidades blandas y actualización profesional, elementos esenciales para la inserción y permanencia en el mercado laboral.
Apoyo integral para la educación y la formación laboral
Cafam es otra caja de compensación que se ha destacado por su compromiso con la educación desde los primeros niveles, apoyando a más de 100.000 niños con kits escolares esenciales para facilitar su regreso a clases. Según esta organización privada sin ánimo de lucro, esta ayuda es entregada mediante la Tarjeta Integral Cafam e incluye elementos básicos para la educación de menores de 12 años.
En el ámbito de la formación superior, Cafam ofrece una variedad de programas de capacitación dirigidos a jóvenes y adultos diseñados para la formación para el trabajo, con un enfoque en el desarrollo de competencias laborales que respondan a las demandas del mercado.
“Cafam también ofrece becas parciales y totales para aquellos afiliados que deseen continuar sus estudios en niveles técnicos, tecnológicos o profesionales. Estas becas son un apoyo fundamental para quienes buscan avanzar académicamente y mejorar sus oportunidades laborales”, asevera la entidad.
Formación técnica, cultural y social para el desarrollo
Comfacundi, la Caja de Compensación Familiar de Cundinamarca, ofrece una propuesta educativa que integra subsidios para la educación básica con una amplia oferta de formación técnica y profesional. La caja entrega, al igual que las anteriores, kits escolares a los hijos de sus afiliados, apoyando así la educación en los niveles de básica y media y facilitando el acceso a los recursos necesarios para el aprendizaje. Comfacundi cuenta además con una variedad de programas de capacitación y formación continua, con énfasis en la educación para el trabajo. “La caja administra escuelas propias de música, artes y saberes, que complementan la formación técnica con un enfoque cultural y social, promoviendo el desarrollo integral de sus beneficiarios”, describen. Es así como adicionalmente mantiene alianzas con instituciones educativas, técnicas y tecnológicas, que permiten a los afiliados acceder a cursos y programas con descuentos y facilidades de pago.
Los programas de Comfacundi están orientados a fortalecer competencias laborales y personales, con un enfoque especial en poblaciones vulnerables y jóvenes en búsqueda de inserción laboral, quienes tienen la oportunidad de presentar proyectos que combinan aspectos técnicos, culturales y sociales, contribuyendo a la construcción de comunidades más fuertes y resilientes.
