¡Qué rico unas alitas de pollo! Esta pieza es bien aprovechada en la gastronomía mundial. Por ejemplo, en Estados Unidos existe una verdadera cultura de las alitas, que suelen presentarse como pasabocas durante los espectáculos deportivos, siempre empapadas en salsa bbq o salsa picante, y acompañadas con palitos de apio y zanahoria con salsa de queso azul. Las famosas bufalo wings suelen aderezarse con una salsa de mantequilla, vinagre y pimienta de cayena, lo que les da un sabor característico; y su origen, como suele pasar con los platos más famosos, tiene varias teorías: una dice que se sirvieron por primera vez en Buffalo, Nueva York, en 1964, en un famoso local llamado Anchor Bar, y otra asegura que fue en el John Young’s Wings’n Things, en la misma ciudad de Estados Unidos. Otra cultura culinaria que ha sacado buen provecho de las alitas es la china, donde se suelen ofrecer con alguna salsa agridulce, ojalá poderosa y bien pegajosa, como la que presento en mi receta de esta semana: se le pone salsa de soya, miel y vinagre, y en este menjurje se ponen a nadar las ricas alitas asadas.
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INGREDIENTES
20 alitas de pollo
Para el adobo
1 cucharadita de sal
1 cucharadita de pimienta negra
1 cucharadita de sal de ajo
1 cucharadita de orégano seco
1 cucharadita de comino
Para la salsa oriental
2 dientes de ajo finamente picados
1 cucharadita de jengibre rallado
1/2 cucharadita de ají seco (al gusto)
1/2 taza de salsa de soya
1/2 taza de miel de abejas
2-3 cucharadas de vinagre blanco
2 cucharadas de aceite vegetal
PREPARACIÓN
Mezcle todos los ingredientes del adobo y sazone con este las alitas. Deje reposar durante unos 15 minutos. Acomode en una bandeja y lleve al horno a 325º F durante 30 minutos. Luego suba la temperatura a 375º F durante 5 a 10 minutos, para dorar. Mientras tanto, para la salsa, en una olla con el aceite sofría el ajo, añada el resto de ingredientes y deje reducir un poco. Finalice con el vinagre. Sirva las alitas bañadas con la salsa.