Volvemos a tocar un tema fundamental en la cocina que muchas veces olvidamos: menos es más. Según este principio, lo principal es el ingrediente, y a veces con tan solo unos pocos elementos de muy buena calidad y trabajados con absoluto respeto podemos hacer platos realmente deliciosos. En este caso una sencilla receta que me fascina: unos lindos tomates asados lentamente en el horno para concentrar su sabor, sin más que sal, un poco de azúcar, aceite de oliva y el aroma de algunas hierbas. Luego se pueden conservar en la nevera para tenerlos a mano y utilizarlos en ensaladas, en sopas, en salsas, en pastas… A veces simplemente saco unos tomates de estos, los pongo sobre una tajada de queso o un pan tostado, y listo. O los mezclo con huevo duro y aceitunas, y listo. O los mezclo con unos zucchinis salteados -que es la sugerencia de esta semana, a la que también se le pueden agregar unas zanahorias baby o berenjena en trozos-, y listo.
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INGREDIENTES
Para los tomates
10 tomates maduros cortados por la mitad
2 cucharadas de sal
1 cucharada de azúcar
Aceite de oliva
Pimienta negra de molino
Aromáticas como orégano, albahaca, tomillo y romero
Para el zuchinni
2 zuchinnis grandes cortados en rodajas
3 cucharadas de aceite de oliva
Sal y pimienta negra
Orégano seco
PREPARACIÓN
Para los tomates, mezcle la sal y el azúcar. Acomode los tomates en una bandeja de hornear y espolvoréelos con esta mezcla y con las hierbas, y vierta encima un chorrito de aceite de oliva. Lleve al horno precalentado a 250º F durante dos horas, hasta que se concentren y se arruguen. Deje enfriar y, si lo prefiere, pélelos. Guarde en un frasco cubriendo con aceite de oliva. Para el zucchini, en una sartén de hierro caliente con aceite de oliva dore los zucchinis. Agregue el tomate, sazone con sal, saltee un poco más y sirva.