Este 18 de junio se logró una nueva condena en el marco del escándalo por el saqueo de recursos públicos en la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd). Esta vez, el contratista Luis Eduardo López Rosero, conocido como el Pastuso, fue sentenciado a 6 años de cárcel, tras haber aceptado su responsabilidad en las maniobras ilegales que permitieron el direccionamiento de contratos.
La decisión, dictada por un juez penal especializado de Bogotá, se dio luego de que la Fiscalía y el procesado suscribieran un preacuerdo en el que López Rosero confesó los delitos de concierto para delinquir agravado, peculado por apropiación propio y en favor de terceros, falsedad ideológica en documento público y falsedad en documento privado.
Además de los años de prisión, alias el Pastuso deberá pagar una multa equivalente a 7.948 salarios mínimos mensuales legales vigentes y la imposición de una inhabilidad de carácter indefinido para ocupar cargos públicos o contratar con entidades del Estado, bien sea directamente o a través de terceros.
De acuerdo con las pruebas recopiladas por la Fiscalía en esta macroinvestigación, entre septiembre de 2023 y enero de 2024, López Rosero accedió de manera irregular a información privilegiada de los procesos contractuales que adelantaba la Ungrd.
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Con esos datos, ajustó propuestas, cotizaciones y demás requisitos para que las empresas bajo su control resultaran favorecidas en la adjudicación de un contrato relacionado con el suministro de carrotanques destinados a atender la crisis de agua en La Guajira.
Por estas maniobras, López Rosero pagó sobornos y logró apropiarse ilícitamente de $7.722 millones. Como parte del acuerdo judicial, el contratista devolvió la totalidad de los recursos robados, lo que fue tenido en cuenta para la suscripción del preacuerdo y la reducción de la pena.
¿Quién es Luis Eduardo López?
El empresario Luis Eduardo López Rosero, conocido como el Pastuso, logró adjudicarse contratos millonarios relacionados con el suministro de carrotanques para La Guajira, camiones de bomberos y materiales de construcción destinados a varias regiones del país.
La Fiscalía concentró su investigación en el contrato más representativo de este esquema: el de la compra de 40 carrotanques para abastecer de agua potable a La Guajira, el cual dejó un presunto sobrecosto de $14.163 millones sobre un valor total de $46.800 millones.
La indagación, que apunta directamente al exdirector de la Ungrd, Olmedo López; al exsubdirector Sneyder Pinilla; y al contratista Luis Eduardo López Rosero, alias El Pastuso, permitió establecer el flujo de los dineros desviados. Según la fiscal Andrea Muñoz, quien durante semanas escuchó las versiones de los involucrados, de los sobrecostos habrían salido no solo los recursos apropiados por los partícipes, sino también los presuntos sobornos que habrían terminado en manos de expresidentes del Congreso, Iván Name (Senado) y Andrés Calle (Cámara), señalados por su supuesta participación en maniobras para impulsar reformas del Gobierno.
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De acuerdo con las evidencias recopiladas, los pagos irregulares se habrían viabilizado gracias a una adición presupuestal de $700.000 millones autorizada en 2023 por orden del entonces ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla. De esos recursos, al menos $100.000 millones se habrían destinado al contrato de los carrotanques y a otros convenios asociados.
La adjudicación a Impoamericana Rogers S.A.S., empresa de López Rosero, fue clave en la repartición de los recursos: la Fiscalía señala que Olmedo López habría recibido $724 millones, Sneyder Pinilla $342 millones, y el Pastuso recibió total de $7.821 millones, convirtiéndolo en el mayor beneficiario del entramado corrupto.
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