Este jueves 20 de junio, la Policía confirmó la captura de siete presuntos integrantes de una banda criminal en Bogotá, dedicada al almacenamiento y venta de medicamentos oncológicos, formulados para enfermedades como el cáncer y VIH, los cuales eran alterados y ofrecidos a farmacias y ciudadanos por debajo de los precios establecidos.
Las capturas, detallan las autoridades, se lograron luego de seis diligencias de allanamiento en la capital y el municipio de Soacha (Cundinamarca), con apoyo de la Dirección de Investigación Criminal e Interpol, en coordinación con la Fiscalía General y la Agencia de Investigaciones de Seguridad Nacional de los Estados Unidos (HSI).
De acuerdo con los reportes de la Policía, entre los capturados se encuentran dos enfermeros que trataban pacientes oncológicos, una persona quien extraía de forma irregular medicamentos de una clínica privada y del Instituto Nacional de Cancerología y otros integrantes de la organización criminal dedicada al transporte de los medicamentos, además de quienes los alteraban y los comercializaban.
Contra uno de los líderes de la organización fue emitida una circular azul de Interpol, pues, según los datos de Migración Colombia en el curso de la investigación, esta persona habría salido del país con destino a Madrid (España), con el fin de evadir a las autoridades colombianas, según detalló la Policía Nacional.
Las pesquisas contra esta banda comenzaron en 2021, cuando funcionarios de la DIJIN recibieron denuncias sobre la existencia de una red criminal que, al parecer, comercializaba y distribuía medicamentos alterados en Bogotá y el municipio de Soacha. Según las investigaciones, los integrantes de la organización ingresaban algunos productos de contrabando al país o los alteraban para ser comercializados en droguerías abiertas al público.
“Así mismo, obtenían varios medicamentos de alto costo de uso institucional, que conseguían por medio de funcionarios corruptos del Instituto Nacional de Cancerología y otros reconocidos hospitales de la ciudad, que normalmente son utilizados para tratar pacientes con enfermedades como el cáncer, VIH y la diabetes”, señala la Policía. Según la investigación, se estima que el promedio mensual de comercialización oscilaba entre 420 y 450 cajas de fármacos de este tipo, equivalente a más de 4.200 tabletas, cápsulas o ampolletas.
Además, se pudo establecer que, con el fin de evadir los controles y registros del Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (INVIMA) y de la Secretaría Distrital de Salud de Bogotá, los medicamentos eran ocultados en una vivienda la capital.
Las autoridades confirmaron la incautación de más de $55 millones en efectivo, 15.052 frascos de medicamentos oncológicos, 432 empaques para medicamentos, 414 productos de consumo alimenticio y de uso sanitario alterados; “medicamentos que, según el análisis de funcionarios del INVIMA, se encontraban en estado de alteración, vencidos, mal almacenados y otros de uso institucional del Instituto Nacional de Cancerología de Bogotá”.
Los capturados fueron puestos a disposición de las autoridades competentes y deberán responder por los delitos de concierto para delinquir, corrupción de alimentos, productos médicos o material profiláctico y enajenación ilícita de medicamentos y estimulo al uso ilícito; durante las audiencias de control de garantías dos de ellos aceptaron los cargos que la Fiscalía les imputó.
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