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En la noche del pasado viernes 26 de enero fue asesinado el líder indígena del Chocó Eleazar Tequia Bitucay. Su muerte violenta se dio en medio de un paro que organizaron las comunidades como rechazo a que la Gobernación y el Ministerio de Educación no habían firmado los contratos para que el año escolar arrancara en sus comunidades. Se trataba de una protesta pacífica que terminó con una persona muerta y hoy el Ejército le pidió perdón al resguardo por la pérdida de la vida de Eleazar Tequia Bitucay.
Así lo informó la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC), a través de un comunicado de prensa, en el que además aseguró que en el acto de perdón estarían miembros del Ministerio de Defensa y de Educación, así como del gobernador del Chocó, Carlos Palacios. Hacia las 9 nueve de la mañana estaba previsto que los funcionarios llegaran a la Comunidad el 18 para comenzar el acto público de perdón. En cabeza del Ejército estuvo el general Mauricio Moreno, quien pidió disculpas en nombre del batallón Mansalva Flores de la Décima Brigada de Quibdó (Chocó) por la muerte de Tequia Bitucay.
(En contexto: ONIC denuncia asesinato de guardia indígena por parte del Ejército)
Sigue a El Espectador en WhatsAppSegún las primeras versiones de lo ocurrido el 26 de enero, el líder mayor, perteneciente a la comunidad embera, murió al finalizar el día de paro cuando trataba de desarmar a un soldado en la vía que de Quibdó conduce a Medellín. Por lo menos eso fue lo que el Ejército informó que había pasado. Sin embargo, miembros de la comunidad y más tarde la ONIC aseguraron que a Tequia Bitucay lo asesinaron sin ninguna razón. Cinco días después de los hechos, el Ejército volvió al lugar y pidió perdón.
Además de escuchar las palabras del Ejército, los miembros de la comunidad indígena organizaron un ritual de armonización para los miembros de la Fuerza Pública y la entrega de unas armas que estaban custodiadas por indígenas. Miembros de la comunidad que estuvieron presentes en el acto explicaron que el general Moreno, además de pedir disculpas, se comprometió a compensar a la familia de Tequia Bitucay y dijo que su muerte jamás debió ocurrir. “Eleazar era un guerrero como nosotros”, agregó el general.