Imputarán por violencia sexual al pastor cristiano José Francisco Jamocó

“Esto es un ósculo santo”. Esas son las palabras que recuerda una de las denunciantes del líder cristiano José Francisco Jamocó. La mujer denunció que, cuando tenía 17 años, fue besada a la fuerza por el fundador del Centro Cristiano de Alabanza, El Shaddai. Se trata de una de las múltiples formas de violencia sexual, que nueve denunciantes consignaron hace más de tres años en la Fiscalía y que recién en los próximos días tendrá su primer avance.

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El Espectador conoció que la Fiscalía citó a las denunciantes y al investigado Jamocó, el próximo 1 de agosto, a audiencia de imputación y de medida de aseguramiento. De tal gravedad son las denuncias de las mujeres que la Fiscalía lo investigará por los delitos de acceso carnal y acto sexual abusivo con persona en incapacidad de resistir. En la misma audiencia, la Fiscalía podría revelar parte de las pruebas que permitan al juez de Garantías ordenar medida de aseguramiento contra el líder religioso.

Una de las denunciantes asegura que ingresó a su primer trabajo como recepcionista en 2005 en el centro cristiano. Dice que Jamocó le dio subsidios universitarios y de vivienda. No obstante, ese mismo año, al parecer, el mismo líder la obligó a sentarse en sus piernas, cuyo fin sería que sintiera sus genitales. Las mismas situaciones, presuntamente, se repitieron hasta 2012, cuando Jamocó la habría obligado a practicarse sexo oral en su oficina, además de accederla en la misma locación.

Antecedentes: Piden a Colombia investigar a pastor Francisco Jamocó por denuncias de violencia sexual

Las Igualadas documentaron el caso y expusieron públicamente las denuncias. La respuesta de Jamocó fue radicar una acción de tutela contra El Espectador. Sin embargo, el Tribunal Superior de Bogotá declaró la acción improcedente y, por tanto, los usuarios puede visitar al material periodístico, el cual goza de plena validez y está reporteado con las denuncias presentadas ante la Fiscalía. En algún punto del rifirrafe judicial, Las Igualadas debieron rectificar y explicar que Jamocó no ha sido condenado por la justicia. De hecho, después de una larga cadena de súplicas, la Fiscalía por fin toma su primera decisión de peso.

Las denunciantes, en 2020, radicaron una tutela contra la Fiscalía porque en lugar de avanzar con la investigación, al parecer las estaría revictimizando. Las mujeres, así como hijos de algunas víctimas más que ya fallecieron, le pedían a la Fiscalía, a través de cartas y derechos de petición, que llevara las pesquisas, como ordena el Protocolo de Investigación de Violencia Sexual del mismo ente investigador. A la demora por la esperada imputación, se sumaron quejas como las de Laura*, a quien una fiscal le dijo que si su “mamá no le había enseñado a cuidarse”.

En contexto: Los reproches a la Fiscalía de las denunciantes del pastor Jamocó

Las denunciantes pidieron, entonces, que los procesos fueron acumulados en uno solo para agilizar la investigación; que se conformara un equipo especializado en violencia de género para el caso; que los fiscales se centraran en la tortura psicológica en contexto de secta religiosa; e indagar si existen más denuncias contra Jamocó. De hecho, la cantante Adriana Lucía compartió la publicación de Las Igualdas y aseguró notar ese tipo de comportamientos, pues era asistente recurrente a El Shaddai.

Ahora, la Fiscalía y las denunciantes esperan que, por reparto, un juez de Garantías escuche la imputación. Ese día se conocerá cual fue la línea de investigación escogida por la Fiscalía de cara a un eventual juicio y se podrían conocer pruebas que dejen a Jamocó de nuevo en el ojo del huracán. El líder cristiano, por su parte, ha insistido en que respeten su presunción de inocencia. “Estamos muy agradecidos con el Señor. Una cosa planea Satanás contra ti, otra planifican los enemigos contra ti, pero hay planes que Dios tiene contigo y esos son los que van a perseverar”, dijo en una reciente intervención.

Para conocer más sobre justicia, seguridad y derechos humanos, visite la sección Judicial de El Espectador.

“Esto es un ósculo santo”. Esas son las palabras que recuerda una de las denunciantes del líder cristiano José Francisco Jamocó. La mujer denunció que, cuando tenía 17 años, fue besada a la fuerza por el fundador del Centro Cristiano de Alabanza, El Shaddai. Se trata de una de las múltiples formas de violencia sexual, que nueve denunciantes consignaron hace más de tres años en la Fiscalía y que recién en los próximos días tendrá su primer avance.

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El Espectador conoció que la Fiscalía citó a las denunciantes y al investigado Jamocó, el próximo 1 de agosto, a audiencia de imputación y de medida de aseguramiento. De tal gravedad son las denuncias de las mujeres que la Fiscalía lo investigará por los delitos de acceso carnal y acto sexual abusivo con persona en incapacidad de resistir. En la misma audiencia, la Fiscalía podría revelar parte de las pruebas que permitan al juez de Garantías ordenar medida de aseguramiento contra el líder religioso.

Una de las denunciantes asegura que ingresó a su primer trabajo como recepcionista en 2005 en el centro cristiano. Dice que Jamocó le dio subsidios universitarios y de vivienda. No obstante, ese mismo año, al parecer, el mismo líder la obligó a sentarse en sus piernas, cuyo fin sería que sintiera sus genitales. Las mismas situaciones, presuntamente, se repitieron hasta 2012, cuando Jamocó la habría obligado a practicarse sexo oral en su oficina, además de accederla en la misma locación.

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Las Igualadas documentaron el caso y expusieron públicamente las denuncias. La respuesta de Jamocó fue radicar una acción de tutela contra El Espectador. Sin embargo, el Tribunal Superior de Bogotá declaró la acción improcedente y, por tanto, los usuarios puede visitar al material periodístico, el cual goza de plena validez y está reporteado con las denuncias presentadas ante la Fiscalía. En algún punto del rifirrafe judicial, Las Igualadas debieron rectificar y explicar que Jamocó no ha sido condenado por la justicia. De hecho, después de una larga cadena de súplicas, la Fiscalía por fin toma su primera decisión de peso.

Las denunciantes, en 2020, radicaron una tutela contra la Fiscalía porque en lugar de avanzar con la investigación, al parecer las estaría revictimizando. Las mujeres, así como hijos de algunas víctimas más que ya fallecieron, le pedían a la Fiscalía, a través de cartas y derechos de petición, que llevara las pesquisas, como ordena el Protocolo de Investigación de Violencia Sexual del mismo ente investigador. A la demora por la esperada imputación, se sumaron quejas como las de Laura*, a quien una fiscal le dijo que si su “mamá no le había enseñado a cuidarse”.

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Las denunciantes pidieron, entonces, que los procesos fueron acumulados en uno solo para agilizar la investigación; que se conformara un equipo especializado en violencia de género para el caso; que los fiscales se centraran en la tortura psicológica en contexto de secta religiosa; e indagar si existen más denuncias contra Jamocó. De hecho, la cantante Adriana Lucía compartió la publicación de Las Igualdas y aseguró notar ese tipo de comportamientos, pues era asistente recurrente a El Shaddai.

Ahora, la Fiscalía y las denunciantes esperan que, por reparto, un juez de Garantías escuche la imputación. Ese día se conocerá cual fue la línea de investigación escogida por la Fiscalía de cara a un eventual juicio y se podrían conocer pruebas que dejen a Jamocó de nuevo en el ojo del huracán. El líder cristiano, por su parte, ha insistido en que respeten su presunción de inocencia. “Estamos muy agradecidos con el Señor. Una cosa planea Satanás contra ti, otra planifican los enemigos contra ti, pero hay planes que Dios tiene contigo y esos son los que van a perseverar”, dijo en una reciente intervención.

Para conocer más sobre justicia, seguridad y derechos humanos, visite la sección Judicial de El Espectador.