La historia de Félix Salcedo, el excongresista investigado por tráfico de migrantes

El pasado miércoles 14 de marzo, a altas horas de la noche, el exsenador Félix Salcedo Baldión fue enviado a prisión por sus presuntos vínculos con una poderosa organización criminal dedicada al tráfico de migrantes. Durante este tiempo, sus escasas exposiciones a la luz pública se reducen, por ejemplo, al apoyo que le dio a la campaña del actual alcalde de Cúcuta, César Rojas. Su recorrido concluyó, al menos temporalmente, con la decisión del Juzgado 20 de garantías de Bogotá de enviarlo a prisión mientras sigue siendo investigado. Este, sin embargo, no es el único problema con que Salcedo ha lidiado desde hace casi 30 años.

Vea el vídeo que registró la captura de Félix Salcedo Baldión

Salcedo fue elegido senador tanto en 1990 como en 1991, tras la Asamblea Nacional Constituyente. El 18 de diciembre de ese último año fue demandada su elección ante la sección quinta del Consejo de Estado, pues, para el demandante, la elección había estado viciada porque Salcedo habría contratado “con Centrales Eléctricas del Norte de Santander, con la Junta Departamental de Beneficencia del Norte de Santander, con la Empresa de Licores del Norte de Santander y con el Municipio de Cúcuta, a través de las empresas Diario de la Frontera, Radio 900 Televisión y Comunicaciones S.A., y Vallas Cero Ltda., a las cuales Salcedo Baldión había aportado recursos de capital por medio de la sociedad familiar Mix Up Ltda.”. Es decir, le reclamaban un supuesto choque de intereses.  

En esa ocasión, el Consejo de Estado negó la solicitud de la demanda. Sin embargo, en 1994, la misma persona repitió el recurso jurídico contra Salcedo, esta vez por pérdida de investidura, nuevamente ante el Consejo de Estado. Los argumentos se reducían a los mismos, es decir, lo señalaba por los contratos con empresas públicas del Norte de Santander. Esta vez, el demandante agregó que, como senador, “había gestionado ante ISA la adjudicación del contrato de generación de energía eléctrica por barcazas a la firma HMS Global Corporation, representada en Colombia por la sociedad Prevel Ltda, de la cual formaba parte uno de sus cuñados”.

(Vea: Envían a la cárcel al exsenador Félix Salcedo, investigado por tráfico de migrantes)

Tales irregularidades se habrían presentado en un momento clave del país, pues el 2 de marzo de 1992 comenzó el mayor racionamiento en la historia del país, tras considerar que la gente consumía más energía de la que el país entonces podía producir. El apagón, como pasó a conocerse, duró 13 meses debido a la sequía del fenómeno de El Niño. En ese momento, las lluvias de la región de Tumaco, según el entonces Himat (hoy Ideam) fueron superiores al promedio, pero en el resto del occidente colombiano, en especial en la zona andina, bajaron de forma considerable, justo donde está la mayoría de las fuentes de agua del país.

En el editorial de ese día en este diario se lee: “La situación es delicada por muchas razones. Sin embargo, es preciso destacar dos: la impreparación del país para una emergencia energética, pese a una posibilidad no descartada que se columbraba por las condiciones del sistema eléctrico; y la indolencia, por no decir la insania, con que los trabajadores de las empresas del sector actúan en lo que llaman ‘en lucha por las reivindicaciones sociales’”.

El 26 de agosto de 1994, el Consejo de Estado concluyó que Salcedo Baldión sí se había aprovechado de su posición como senador para conseguirle a su familia un lucrativo contrato relacionado con la crisis energética, y decretó la pérdida de su investidura: la muerte política. El alto tribunal consideró que “había celebrado contratos con entidades del Estado mientras ejercía su cargo y que había gestionado ante ISA la adjudicación del contrato de generación de energía eléctrica por barcazas a la firma norteamericana HMS Global Corporation, representada en Colombia por la sociedad Prevel Ltda”.  

(Le puede interesar: Tráfico de migrantes, el delito que mueve $3.000 millones por semana)

Luego de ese escándalo, Félix Salcedo Baldión pasó a la sombra. Su nombre no había vuelto a resonar hasta ahora, con este nuevo proceso, que se conoció hace unos pocos días. La Fiscalía, en el desarrollo de la investigación, aseguró que Salcedo Baldión hizo parte de una “organización criminal” que enviaba personas a otros países con documentación falsa. El excongresista, según las pesquisas del ente investigador, era el encargado de firmar cartas de invitación al país, que después eran utilizadas para tramitar visas, de manera ilegal, en los consulados de Colombia en Ecuador y República Dominicana. 

Además de Salcedo Baldión, las autoridades ya han identificado a más funcionarios que habrían participado de este red, entre ellas la excónsul en República Dominicana, Yasmín Eliana Serrada Bautista, quien fue capturada pero dejada en libertad pues su caso lo tiene que resolver el Tribunal Superior de Bogotá. Según el diario El Tiempo, la organización criminal vendía a migrantes, la mayoría hindúes, pero también africanos, servicios completos que iban desde la invitación para entrar a Colombia, hasta la estadía y transporte en el país mientras lograban definir una ruta hacia Estados Unidos.

Para la Fiscalía ya es claro cómo se movía esta red de tráfico de migrantes. El ente investigador asegura que el trabajo de Salcedo Baldión estuvo mediado por un ciudadano ecuatoriano, José Guamán Miranda, quien sería el cerebro del grupo. De acuerdo con información de El Tiempo,  a Salcedo Baldión le ofrecieron $15 millones para que viajara a República Dominicana y contactara a la excónsul Serrada. Fue allí en donde se concretó el negocio con la exfuncionaria. La Fiscalía está convencida de que en este grupo hay otros cónsules involucrados y funcionarios públicos en Colombia.

 A cambio de estos negocois, dice la Fiscalía, Salcedo Baldión habría recibido decenas de pagos, entre $40 y $50 millones por cada grupo de migrantes que pasaban por Colombia, con la invitación del exsenador. Las pruebas presentadas ante el juez fueron determinantes para que tomara la decisión de enviarlo a la cárcel mientras avanzan las investigaciones. El funcionario judicial criticó que Salcedo Baldión, utilizando su posición de excongresista, se hubiera aprovechado -al parecer- para cometer actividades con fines indebidos. En cuestión de meses se definirá si es llamado a juicio.

El pasado miércoles 14 de marzo, a altas horas de la noche, el exsenador Félix Salcedo Baldión fue enviado a prisión por sus presuntos vínculos con una poderosa organización criminal dedicada al tráfico de migrantes. Durante este tiempo, sus escasas exposiciones a la luz pública se reducen, por ejemplo, al apoyo que le dio a la campaña del actual alcalde de Cúcuta, César Rojas. Su recorrido concluyó, al menos temporalmente, con la decisión del Juzgado 20 de garantías de Bogotá de enviarlo a prisión mientras sigue siendo investigado. Este, sin embargo, no es el único problema con que Salcedo ha lidiado desde hace casi 30 años.

Vea el vídeo que registró la captura de Félix Salcedo Baldión

Salcedo fue elegido senador tanto en 1990 como en 1991, tras la Asamblea Nacional Constituyente. El 18 de diciembre de ese último año fue demandada su elección ante la sección quinta del Consejo de Estado, pues, para el demandante, la elección había estado viciada porque Salcedo habría contratado “con Centrales Eléctricas del Norte de Santander, con la Junta Departamental de Beneficencia del Norte de Santander, con la Empresa de Licores del Norte de Santander y con el Municipio de Cúcuta, a través de las empresas Diario de la Frontera, Radio 900 Televisión y Comunicaciones S.A., y Vallas Cero Ltda., a las cuales Salcedo Baldión había aportado recursos de capital por medio de la sociedad familiar Mix Up Ltda.”. Es decir, le reclamaban un supuesto choque de intereses.  

En esa ocasión, el Consejo de Estado negó la solicitud de la demanda. Sin embargo, en 1994, la misma persona repitió el recurso jurídico contra Salcedo, esta vez por pérdida de investidura, nuevamente ante el Consejo de Estado. Los argumentos se reducían a los mismos, es decir, lo señalaba por los contratos con empresas públicas del Norte de Santander. Esta vez, el demandante agregó que, como senador, “había gestionado ante ISA la adjudicación del contrato de generación de energía eléctrica por barcazas a la firma HMS Global Corporation, representada en Colombia por la sociedad Prevel Ltda, de la cual formaba parte uno de sus cuñados”.

(Vea: Envían a la cárcel al exsenador Félix Salcedo, investigado por tráfico de migrantes)

Tales irregularidades se habrían presentado en un momento clave del país, pues el 2 de marzo de 1992 comenzó el mayor racionamiento en la historia del país, tras considerar que la gente consumía más energía de la que el país entonces podía producir. El apagón, como pasó a conocerse, duró 13 meses debido a la sequía del fenómeno de El Niño. En ese momento, las lluvias de la región de Tumaco, según el entonces Himat (hoy Ideam) fueron superiores al promedio, pero en el resto del occidente colombiano, en especial en la zona andina, bajaron de forma considerable, justo donde está la mayoría de las fuentes de agua del país.

En el editorial de ese día en este diario se lee: “La situación es delicada por muchas razones. Sin embargo, es preciso destacar dos: la impreparación del país para una emergencia energética, pese a una posibilidad no descartada que se columbraba por las condiciones del sistema eléctrico; y la indolencia, por no decir la insania, con que los trabajadores de las empresas del sector actúan en lo que llaman ‘en lucha por las reivindicaciones sociales’”.

El 26 de agosto de 1994, el Consejo de Estado concluyó que Salcedo Baldión sí se había aprovechado de su posición como senador para conseguirle a su familia un lucrativo contrato relacionado con la crisis energética, y decretó la pérdida de su investidura: la muerte política. El alto tribunal consideró que “había celebrado contratos con entidades del Estado mientras ejercía su cargo y que había gestionado ante ISA la adjudicación del contrato de generación de energía eléctrica por barcazas a la firma norteamericana HMS Global Corporation, representada en Colombia por la sociedad Prevel Ltda”.  

(Le puede interesar: Tráfico de migrantes, el delito que mueve $3.000 millones por semana)

Luego de ese escándalo, Félix Salcedo Baldión pasó a la sombra. Su nombre no había vuelto a resonar hasta ahora, con este nuevo proceso, que se conoció hace unos pocos días. La Fiscalía, en el desarrollo de la investigación, aseguró que Salcedo Baldión hizo parte de una “organización criminal” que enviaba personas a otros países con documentación falsa. El excongresista, según las pesquisas del ente investigador, era el encargado de firmar cartas de invitación al país, que después eran utilizadas para tramitar visas, de manera ilegal, en los consulados de Colombia en Ecuador y República Dominicana. 

Además de Salcedo Baldión, las autoridades ya han identificado a más funcionarios que habrían participado de este red, entre ellas la excónsul en República Dominicana, Yasmín Eliana Serrada Bautista, quien fue capturada pero dejada en libertad pues su caso lo tiene que resolver el Tribunal Superior de Bogotá. Según el diario El Tiempo, la organización criminal vendía a migrantes, la mayoría hindúes, pero también africanos, servicios completos que iban desde la invitación para entrar a Colombia, hasta la estadía y transporte en el país mientras lograban definir una ruta hacia Estados Unidos.

Para la Fiscalía ya es claro cómo se movía esta red de tráfico de migrantes. El ente investigador asegura que el trabajo de Salcedo Baldión estuvo mediado por un ciudadano ecuatoriano, José Guamán Miranda, quien sería el cerebro del grupo. De acuerdo con información de El Tiempo,  a Salcedo Baldión le ofrecieron $15 millones para que viajara a República Dominicana y contactara a la excónsul Serrada. Fue allí en donde se concretó el negocio con la exfuncionaria. La Fiscalía está convencida de que en este grupo hay otros cónsules involucrados y funcionarios públicos en Colombia.

 A cambio de estos negocois, dice la Fiscalía, Salcedo Baldión habría recibido decenas de pagos, entre $40 y $50 millones por cada grupo de migrantes que pasaban por Colombia, con la invitación del exsenador. Las pruebas presentadas ante el juez fueron determinantes para que tomara la decisión de enviarlo a la cárcel mientras avanzan las investigaciones. El funcionario judicial criticó que Salcedo Baldión, utilizando su posición de excongresista, se hubiera aprovechado -al parecer- para cometer actividades con fines indebidos. En cuestión de meses se definirá si es llamado a juicio.