La JEP dejó en libertad a Juan Carlos Meneses, testigo clave en el caso contra Santiago Uribe
Así lo determinó la Sala de Definición de Situaciones Jurídicas de la jurisdicción especial, luego de estudiar el caso del mayor retirado de la Policía quien se encontraba pagando una pena de 27 años de prisión por el asesinato de Camilo Barrientos en Antioquia en 1994.
Redacción Judicial
La Sala de Definición de Situaciones Jurídicas de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) le otorgó el beneficio de libertad condicionada al mayor retirado de la Policía, Juan Carlos Meneses Quintero, condenado en 2017 a pagar una pena de 27 años de cárcel por el asesinato de Camilo Barrientos en Antioquia en 1994.
Según la jurisdicción especial, “Meneses ya había firmado acta de sometimiento ante la JEP por hechos relacionados con el conflicto armado. El oficial, al recibir este beneficio, y por estar sometido a la JEP, debe cumplir con el régimen de condicionalidad que demanda su contribución a la verdad, la no repetición entre otros”.
(En contexto: Condenan a 27 años de prisión al mayor (r) Juan Carlos Meneses)
El mayor (r) Meneses es uno de los testigos claves en el caso en contra Santiago Uribe Vélez, quien es procesado por los delitos de concierto para delinquir y homicidio agravado. La Fiscalía sostiene que Uribe Vélez, hermano del senador Álvaro Uribe Vélez, participó y apoyó a la banda de Los 12 Apóstoles Según las pruebas que ha logrado recopilar el ente investigador, la banda ejecutó un “plan de exterminio” en contra de sectores marginales de la población civil, como delincuentes, drogadictos o supuestos auxiliadores de la guerrilla.
La Fiscalía tiene registros de casi 400 campesinos y pobladores asesinados, ocurridos entre 1990 y 1998,que habrían sido perpetrados por paramilitares. Según las declaraciones de Meneses, Uribe Vélez patrocinó grupos paramilitares. Dijo además que, cuando llegó a comandar la Policía de Yarumal en 1993, su antecesor, el entonces capitán Pedro Benavides, le dijo que debía “colaborar” con un grupo de limpieza social de la región. Con el testimonio de Meneses, la Fiscalía ordenó la captura de Santiago Uribe.
(Le puede interesar: El testimonio clave en el proceso contra Santiago Uribe)
El oficial retirado de la Policía fue condenado por el homicidio de Camilo Barrientos, ocurrido el 25 de febrero de 1994, quien era conductor de una chiva. De acuerdo con la investigación, dos de los pasajeros que transportaba Barrientos le pidieron que detuviera la marcha del vehículo y lo asesinaron. El homicidio lo perpetró el grupo de Los 12 Apóstoles, quien lo consideraba como un auxiliador de la guerrilla.
Que a Juan Carlos Meneses le consedieran el beneficio de la libertad condicionada no fue un proceso sencillo. En junio de 2013, la defensa del mayor (r) le solicitó a un juzgado de ejecución de penas que dejara en libertad a su cliente. Sin embargo, el juzgado cuarto penal del circuito especializado de Antioquia rechazó la petición pues consideró que los hechos por los que es investigado el excomandante de la Policía en el municipio de Yarumal (Antioquia) no tienen relación con el conflicto armado interno.
Los abogados apelaron la decisión y el caso llegó hasta la JEP. Sin embargo, no fue suficiente. En agosto del año pasado, la jurisdicción de paz volvió a negar la solicitud del oficial en retiro pues, explicó su abogado, los magistrados no lograron acreditar los días en que su defendido estuvo en la cárcel.
La Sala de Definición de Situaciones Jurídicas de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) le otorgó el beneficio de libertad condicionada al mayor retirado de la Policía, Juan Carlos Meneses Quintero, condenado en 2017 a pagar una pena de 27 años de cárcel por el asesinato de Camilo Barrientos en Antioquia en 1994.
Según la jurisdicción especial, “Meneses ya había firmado acta de sometimiento ante la JEP por hechos relacionados con el conflicto armado. El oficial, al recibir este beneficio, y por estar sometido a la JEP, debe cumplir con el régimen de condicionalidad que demanda su contribución a la verdad, la no repetición entre otros”.
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El mayor (r) Meneses es uno de los testigos claves en el caso en contra Santiago Uribe Vélez, quien es procesado por los delitos de concierto para delinquir y homicidio agravado. La Fiscalía sostiene que Uribe Vélez, hermano del senador Álvaro Uribe Vélez, participó y apoyó a la banda de Los 12 Apóstoles Según las pruebas que ha logrado recopilar el ente investigador, la banda ejecutó un “plan de exterminio” en contra de sectores marginales de la población civil, como delincuentes, drogadictos o supuestos auxiliadores de la guerrilla.
La Fiscalía tiene registros de casi 400 campesinos y pobladores asesinados, ocurridos entre 1990 y 1998,que habrían sido perpetrados por paramilitares. Según las declaraciones de Meneses, Uribe Vélez patrocinó grupos paramilitares. Dijo además que, cuando llegó a comandar la Policía de Yarumal en 1993, su antecesor, el entonces capitán Pedro Benavides, le dijo que debía “colaborar” con un grupo de limpieza social de la región. Con el testimonio de Meneses, la Fiscalía ordenó la captura de Santiago Uribe.
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El oficial retirado de la Policía fue condenado por el homicidio de Camilo Barrientos, ocurrido el 25 de febrero de 1994, quien era conductor de una chiva. De acuerdo con la investigación, dos de los pasajeros que transportaba Barrientos le pidieron que detuviera la marcha del vehículo y lo asesinaron. El homicidio lo perpetró el grupo de Los 12 Apóstoles, quien lo consideraba como un auxiliador de la guerrilla.
Que a Juan Carlos Meneses le consedieran el beneficio de la libertad condicionada no fue un proceso sencillo. En junio de 2013, la defensa del mayor (r) le solicitó a un juzgado de ejecución de penas que dejara en libertad a su cliente. Sin embargo, el juzgado cuarto penal del circuito especializado de Antioquia rechazó la petición pues consideró que los hechos por los que es investigado el excomandante de la Policía en el municipio de Yarumal (Antioquia) no tienen relación con el conflicto armado interno.
Los abogados apelaron la decisión y el caso llegó hasta la JEP. Sin embargo, no fue suficiente. En agosto del año pasado, la jurisdicción de paz volvió a negar la solicitud del oficial en retiro pues, explicó su abogado, los magistrados no lograron acreditar los días en que su defendido estuvo en la cárcel.