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Parteros y parteras del Pacífico serán priorizados en el Plan Nacional de Vacunación

El Tribunal Superior de Bogotá protegió los derechos a la salud y a la igualdad de las asociaciones de parteros y parteras del Pacífico, las cuales solicitaron ser tenidas en cuenta, de manera urgente, en el plan de vacunación contra el COVID-19 que está en desarrollo.

12 de mayo de 2021 - 09:48 p. m.
Partera de la Asociación de Parteras Unidas del Pacifico.
Partera de la Asociación de Parteras Unidas del Pacifico.
Foto: Ministerio de Cultura

Justo cuando inició la tercera fase del Plan Nacional de Vacunación contra el COVID-19, que favorecerá a las personas entre 50 y 59 años y miembros de la Fuerza Pública, el Tribunal Superior de Bogotá ordenó al Ministerio de Salud que incluyera en lo que queda de la fase 2 a los parteros y partes del Pacífico. A través de una acción de tutela, la Asociación de Parteras Unidas del Pacifico y la Asociación de la Red Interétnica de Parteras y Parteros del Chocó, lograron que las autoridades los ubicaran entre las personas que recibirán las dosis como parte del personal médico con alto riesgo de contagio.

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El Tribunal ordenó al Ministerio de Salud y a las secretarías de Salud de Chocó y Valle del Cauca que prioricen la vacunación de los parteros y parteros del Pacífico, quienes son sabedores ancestrales y médicos alternativos en comunidades donde el acceso a la salud es una travesía. Además, el tribunal ordenó a las autoridades entregar elementos de protección personal, como tapabocas y geles antibacteriales, para controlar las infecciones y detener la transmisión del virus en los territorios a cargo de los denunciantes.

“Entre las razones que tuvimos para interponer esta acción, resaltamos que con la llegada del COVID-19 y la posterior emergencia sanitaria que se desató, parteras y parteros han seguido atendiendo las necesidades de salud de sus comunidades en medio de las restricciones impuestas por las autoridades y el temor generado por la posible multiplicación de contagios, dada la grave situación de salud pública en los municipios apartados”, explicaron los colectivos representados por Ilex Acción Jurídica, cuando la petición llegó en principio al Juzgado 11 Civil de Bogotá.

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Sin embargo, el Juzgado 11 de Bogotá no atendió los reclamos de las asociaciones y el pasado 5 de abril negó la tutela presentada a principio de año. El despacho judicial consideró que los accionantes no entregaron pruebas sobre una presunta vulneración al derecho a la igualdad, pues no hay casos similares en los que personas diferentes al personal de salud hubiesen sido priorizados en el Plan Nacional de Vacunación. Incluso, los parteros y parteras solicitaron sustento económico, pero esa petición fue negada también.

Los parteros y parteras impugnaron la decisión, dado que pertenecen a la población afrodescendiente y por tanto son sujetos de especial protección. Además, vía acción de tutela quieren que se salvaguarde una practica que “define la identidad étnico cultural en el pacífico colombiano, como lo es la medicina tradicional a través de la partería”. Alegaron que las personas que ejercen la labor de medicina tradicional han sido reconocidas como actores esenciales del sistema de salud, a nivel nacional e internacional.

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El Tribunal Superior de Bogotá señaló, en principio, que es un hecho que los parteros y parteras del Pacífico no fueron reconocidos como personal del talento humano de salud, sin embargo, desempeñan un papel fundamental en las zonas apartadas de los centros urbanos y donde el Estado no garantiza el servicio público a través de centros de salud. El tribunal reconoció que las comunidades tienen una alta exposición al COVID-19, pues son los encargados de atender los partos de cientos de personas el las zonas de acción.

“Si bien es cierto que la partería y la medicina tradicional no ha sido incluida dentro del sistema de salud, no puede desconocerse que la misma ley 1164 de 2007, ha referido que: ‘de conformidad con los artículos 7 y 8 de la Constitución se garantizará el respeto a las culturas médicas tradicionales propias de los diversos grupos étnicos, las cuales solo podrán ser practicadas por quienes sean reconocidos en cada una de sus culturas de acuerdo a sus propios mecanismos de regulación social, de suerte que, no existe reparo que se les debe brindar la protección por parte del Estado”, concluyó el Tribunal Superior de Bogotá.

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Sobre el Plan Nacional de Vacunación, este miércoles 12 de mayo inició la tercera etapa, con la cual se inmunizará al personal del sector educativo público y privado del país, los miembros del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (Icbf), Fiscalía y Fuerza Pública: policías, soldados, miembros de la Fuerza Aérea, Armada, y también personas con preexistencias y comorbilidades. En la etapa están priorizadas alrededor de 6′506.321 personas, a las que se sumarán los parteros y parteras del Pacífico. Según el Instituto Nacional de Salud (INS), en Colombia hay 94.746 casos activos de COVID-19.

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La partería, como nombran el área vital en el cual se desempeñan, se remonta a la época de la esclavitud en la Nueva Granada -siglo XVI-, cuando mujeres africanas trajeron consigo los conocimientos ancestrales y prácticas culturales sobre el nacimiento y la salud reproductiva. Hoy los accionantes son reconocidos como “médicos tradicionales”, quienes trabajan bajo los estándares de la tradición oral, el aprendizaje empírico y el intercambio de saberes entre pares. Las parteros y parteras no solo tienen una responsabilidad profesional, también ejercen una labor social con su comunidad.

Así lo dejaron claro en la acción de tutela que fue confirmada en segunda su segunda ronda: “La ancestralidad y la espiritualidad es otra de las grandes características de la partería, en la multiplicidad de creencias que se pueden encontrar, existe una convergencia entre las figuras religiosas, la naturaleza y el territorio en general, que se acompaña con rezos, oraciones y alabazas. De ahí, que esto cobre una dimensión nueva en los procesos internos de las comunidades, porque afianza su identidad y la conexión con sus ancestros”.

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