A modo de despedida, el director de la Policía, el general Jorge Luis Vargas, estuvo en la Basílica de Nuestro Señor de Los Milagros en Buga y se arrodilló ante la imagen de cristo crucificado. Minutos después, la fotografía del momento la compartió en su cuenta de Twitter, en la que incluyó varios mensajes de agradecimiento y de buena suerte para quien lo sucede en el cargo: el mayor general Henry Sanabria, quien fue elegido por el presidente Gustavo Petro como el nuevo director de la Policía.
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Como Vargas, son al menos 30 los altos oficiales, no solo de la Policía, que tendrán que colgar el uniforme ahora que se conoce la nueva cúpula. Salen por una razón sencilla: los elegidos por Petro tienen un rango menor que varios altos oficiales que estaban por encima de las nuevas cabezas del Ejército y la Policía. Expertos en temas de seguridad describen estas situaciones con la figura de “efecto dominó”, pues es claro que nadie puede estar por encima de los directores y, por regla fundamental, se debe respetar la línea de mando y la jerarquía.
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La nueva cúpula está conformada así: el general Helder Fernán Giraldo Bonilla, asumirá como comandante de las Fuerzas Militares; el general Luis Mauricio Ospina Gutiérrez, será el comandante del Ejército; el vicealmirante Francisco Hernández Cubides Granados, como comandante de la Armada; y al general Luis Carlos Córdoba Avendaño, como comandante de la Fuerza Aérea. Estos nombramientos ocasionaron la salida de al menos 20 generales de la Policía y 10 en el Ejército.
Aunque en todos los cambios de cúpula se generan movimientos de este tipo, no es normal que solo de la Policía tengan que salir 20 altos oficiales. Aunque no es claro cuáles fueron los criterios exactos que tuvo en cuenta el alto gobierno para escoger a las nuevas cabezas de la fuerza pública, el presidente Petro dio varias pistas de cómo fue la selección: revisaron las hojas de vida de cada uno y se fijaron que no tuvieran investigaciones por corrupción ni señalamientos por violación de derechos fundamentales.
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Frente a las críticas por el remezón entre los altos oficiales de la fuerza pública, el propio Petro señaló en este tipo de decisiones nunca son perfectas y siempre hay injusticia en ellas. “Yo tengo que agradecerles a todas las personas que salen del servicio por estas decisiones, por su labor, por su vida dedicada. Indudablemente, estamos ante un cambio y ese es el mensaje: cambió el gobierno y cambian las estrategias, ya tendrá la población que valorarlas”, agregó el presidente Petro.
La segunda orden de Petro: “Mandos deben neutralizar masacres”
En orden cronológico, la primera orden que le dio Gustavo Petro a los mandos militares fue una inesperada. En plena posesión presidencial, el pasado 7 de agosto, cuando ya había jurado cumplir con sus responsabilidades como primer mandatario, el presidente le ordenó a la Casa Militar trasladar la espada de Bolívar desde la Casa de Nariño hasta la Plaza de Bolívar. Los uniformados cumplieron en cuestión de minutos y el símbolo de la libertad llegó en medio de aplausos a la posesión. Ahora, ya con su cúpula nombrada, Petro les dio la segunda orden.
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“Todo mando militar o policial en su jurisdicción debe velar por neutralizar al máximo la comisión de masacres y muerte de líderes sociales”. Ese fue el mensaje que publicó el presidente en su cuenta de Twitter, en donde añadió: “La comisión de masacres y su impunidad en jurisdicciones de mandos militares y policiales afectará la hoja de vida de los mandos”. El mensaje fue criticado especialmente por figuras del Centro Democrático. Una de ellas fue la senadora Paloma Valencia.
“El presidente Petro amenaza con consecuencias sobre las hojas de vida de los miembros de las Fuerzas Armadas por los actos que cometen los terroristas con quienes Petro quiere negociar. Uno no entiendo qué es lo que tiene contra las fuerzas armadas”, escribió Valencia en su cuenta de Twitter. Sin embargo, la orden de Petro hace parte desde hace años de las tareas y responsabilidades que asumen los uniformados que hacen parte de la Fuerza Pública.
¿Qué es la seguridad humana?
Todos los cambios que ha anunciado el nuevo gobierno hacen parte de lo que ha denominado como seguridad humana. Según las propias palabras de Petro, esto implica “que los consejos de seguridad no solo sean de la Fuerza Pública, sino también de una serie de instituciones que pueden ser claves sin estar armadas en la solución de la violencia en el Chocó, por ejemplo, la universidad, la institución pública de educación, de salud”. Estas declaraciones se conocieron luego de un consejo de seguridad que se desarrolló esta semana en Quibdó (Chocó).
Durante ese mismo encuentro, el presidente expresó que esos consejos también deben buscar diálogos entre todos los sectores de la sociedad, para que se generen espacios donde se creen alternativas, especialmente para encontrar soluciones y oportunidades para quienes “están en la ilegalidad. Así se reduciría la violencia en Colombia”, expresó el presidente, quien agregó: “En el diálogo regional queremos que asista todo el mundo, que se expresen allí las diferentes ideas y concepciones sobre cómo desarrollarse en este territorio”.
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