Publicidad

¿Por qué no puede usar musgo en su pesebre?

En Colombia, el uso de musgo en los pesebres navideños, además de afectar gravemente los ecosistemas, es una práctica ilegal que puede acarrear fuertes sanciones,

Sigue a El Espectador en Discover: los temas que te gustan, directo y al instante.
La  Huerta
16 de diciembre de 2025 - 08:00 p. m.
Un kilo de musgo puede tardar hasta 7 años en regenerarse.
Un kilo de musgo puede tardar hasta 7 años en regenerarse.
Foto: Secretaría de Ambiente
Resume e infórmame rápido

Escucha este artículo

Audio generado con IA de Google

0:00

/

0:00

En Colombia comienzan las novenas, una de las tradiciones más queridas y arraigadas del país, y con ellas llega también la construcción del pesebre, un ritual que reúne a las familias y llena los hogares de símbolos, cantos y memoria. Sin embargo, hay un detalle que suele pasar desapercibido: uno de los elementos del pesebre que sigue siendo común y que podría causarle un serio problema si lo tiene en casa y alguien lo ve.

Se trata del musgo, una especie fundamental para los ecosistemas en los que habita. Su función va mucho más allá de lo decorativo, y es que estas especies, propias de varios ecosistemas como el bosque altoandino cumplen funciones ecológicas de gran relevancia. Por ello, según la secretaria de Ambiente de Bogotá, Adriana Soto, extraerlas de su hábitat natural tiene consecuencias graves, como la propagación de incendios, el aumento de la erosión del suelo y la pérdida de biodiversidad asociada.

“El compromiso de cuidar nuestros ecosistemas y hacer de Bogotá una ciudad más resiliente al cambio climático es de todos. Por eso, invitamos a la ciudadanía a evitar el uso de esta o cualquier especie natural”, dijo la secretaria.

¿Qué hace tan importante a los musgos?

Primero lo primero: ¿qué son los musgos? Según el Jardín Botánico de Kew, los musgos, junto con sus parientes más cercanos —las hepáticas y las antocerotas—, pertenecen al grupo de las briofitas (Bryophyta), uno de los linajes vegetales más antiguos del planeta. Se estima que aparecieron hace unos 450 millones de años y han logrado sobrevivir a profundos cambios climáticos a lo largo de la historia de la Tierra.

Actualmente, se conocen entre 15.000 y 25.000 especies de musgos, distribuidas en todos los continentes y presentes en casi todos los ecosistemas donde es posible la vida vegetal, desde bosques y desiertos hasta ambientes extremos como la Antártida. Sin embargo, según la Secretaría de Ambiente de Bogotá, al menos 38 especies se encuentran en algún grado de amenaza, en gran parte por su alta vulnerabilidad: el musgo crece, en promedio, apenas un centímetro al año y un solo kilo puede tardar hasta siete años en regenerarse.

Aunque suelen pasar desapercibidos por su tamaño, los musgos son organismos fundamentales para el equilibrio de la Tierra y considerados ancestros de muchas de las plantas terrestres actuales. Esta secretaria menciona que, en específico, cumplen funciones ecológicas clave como:

  • Retener hasta diez veces su peso en agua, liberándola de forma gradual en épocas de sequía
  • Filtran sedimentos y facilitan la infiltración del agua hacia las reservas subterráneas.
  • En procesos de restauración ecológica hacen parte de las primeras capas vegetales que permiten la recuperación del suelo y preparan el terreno para el crecimiento de especies de mayor tamaño, como árboles.

Por otro lado, de acuerdo con el Jardín Botánico de Kew, sus beneficios se reflejan en otros múltiples procesos:

  • Contribuyen a regular la temperatura del suelo: en climas cálidos protegen las raíces al dar sombra y aislar el suelo del calor. En cambio, en regiones frías, como el Ártico, reducen el deshielo al impedir que el calor solar llegue directamente al suelo.
  • Son componentes esenciales de la biodiversidad en bosques húmedos, montañas, humedales y tundras,
  • Crean microhábitats vitales para insectos y otros organismos, que los utilizan como refugio, espacio de reproducción y fuente de alimento.

¿Qué podría causarle su uso?

Las autoridades ambientales han sido claras en que la extracción, movilización y comercialización no autorizada de musgo constituye una conducta ilegal, sancionable en el marco de la Ley 1333 de 2009, que regula el proceso sancionatorio ambiental. A esto se suma lo establecido en el Código Penal, que contempla sanciones económicas para las personas que sean sorprendidas traficando o haciendo uso de estas especies, así como de otras asociadas como quiches, lamas o líquenes.

Las multas van desde 134 hasta 43.750 salarios mínimos legales mensuales vigentes, así como penas de prisión de 60 a 135 meses, de acuerdo con la normativa ambiental vigente.

Por esta razón, la Secretaría de Ambiente de Bogotá hace un llamado a la ciudadanía para evitar el uso de musgo y de especies asociadas en los tradicionales pesebres navideños y en cualquier tipo de decoración decembrina.

¿Cómo puedo remplazar el musgo de mi pesebre?

Entre las recomendaciones emitidas por la autoridad ambiental de Bogotá, se sugiere acceder a materiales sustitutos, como

  • Aserrín: puede teñirse y usarse para simular el suelo o caminos del pesebre.
  • Césped artificial: ofrece un acabado verde, fácil de conseguir y que no afecta al ecosistema.
  • Elementos reciclables: como cartón o envases, pueden transformarse en paisajes y estructuras.
  • Fibra de coco: es una alternativa natural y sostenible que imita bien la cobertura vegetal.

🌳 ☘️ 🌿 Encuentre en La Huerta toda la información sobre plantas, jardinería, cultivos y siembra. 🍂🌺 🌼

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscríbete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta  política.