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Esta es la curiosa razón por la que una gata no deja de maullarle a su dueña (video)

Su dueña, entre risas y culpa, le pidió perdón varias veces e incluso prometió reprender al culpable por lo ocurrido.

La Red Zoocial
08 de mayo de 2025 - 11:55 a. m.
(Imagen de referencia) / La dueña notó que la gata no dejaba de maullar insistentemente y la seguía por toda la casa.
(Imagen de referencia) / La dueña notó que la gata no dejaba de maullar insistentemente y la seguía por toda la casa.
Foto: Pixabay
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Una conmovedora y divertida escena protagonizada por una gata mamá se ha robado el corazón de miles en TikTok. El video, publicado por la usuaria @catspetsanimals, muestra el poderoso instinto maternal de una gata que no descansó hasta recuperar a su cría.

Todo comenzó cuando la hija de la dueña cerró la puerta de su habitación al salir para la escuela, sin notar que uno de los gatitos se había escabullido dentro. Más tarde, la dueña comenzó a notar que la gata no dejaba de maullar insistentemente y la seguía por toda la casa, visiblemente angustiada.

Al acercarse a la habitación, la mujer vio algo negro sobresaliendo por debajo de la puerta: era una diminuta patita. Al abrir, un pequeño gatito negro salió corriendo, seguido por su madre, quien inmediatamente inspeccionó el cuarto para asegurarse de que no quedara ningún otro hijo atrapado.

Una vez confirmado que todos estaban a salvo, cerró la puerta y pensó que el drama había terminado. Pero la gata tenía otros planes: no paró de maullarle, como si estuviera “exigiendo una disculpa formal y una explicación”. La dueña, divertida y arrepentida, le pidió perdón repetidamente y hasta prometió “regañar” a su hija en nombre de la gata.

¿Qué decían esos maullidos?

Lejos de ser simples sonidos, los maullidos son una herramienta de comunicación sofisticada entre los gatos y los humanos.

Los gatos domésticos han adaptado sus vocalizaciones para interactuar con las personas. Un maullido puede expresar desde hambre, miedo o dolor, hasta reclamos o emociones complejas como frustración o preocupación.

En este caso, los maullidos persistentes de la mamá gata eran probablemente una mezcla de angustia por su bebé y un llamado claro de atención hacia la humana responsable. Expertos en comportamiento felino señalan que los gatos pueden modular su tono y frecuencia para transmitir distintos estados de ánimo, algo que esta madre hizo con notable intensidad.

Esta historia es un recordatorio tierno del fuerte lazo que puede formarse entre una madre felina y sus crías, así como de su capacidad de comunicación emocional. Y, por supuesto, de lo importante que es revisar bien las habitaciones antes de cerrar una puerta en casas donde hay gatitos curiosos.

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