Conozca a Benji, un perro maltratado que nunca dejó de proteger a sus hermanos

Benji está en la búsqueda de una familia que le dé una segunda oportunidad de vida.

Foto: @AnimalesBOG

Benji es un perro de aproximadamente siete años de edad que vive entre ladridos y colas en la Unidad de Cuidado del Instituto Distrital de Protección y Bienestar Animal de Bogotá (IDPYBA). De acuerdo con la entidad, el can fue rescatado hace aproximadamente tres años junto a sus hermanos peludos por el Escuadrón Anticrueldad, pues toda la camada se encontraban en situación de maltrato y abandono.

El perro llamó la atención de los funcionarios del IDPYBA desde el primer momento gracias al instinto protector que tenía hacia sus hermanos: no dejaba que nadie se les acercara. Con el tiempo, todos los perritos fueron encontrando hogares responsables y amorosos. Sin embargo, Benji aún está en la búsqueda de esa familia que le dé una segunda oportunidad de vida.

“Alguna vez fue el escudo protector de su familia. Juntos aprendieron a sobrevivir, a resistir, a aferrarse a la vida. Pero con el tiempo, uno a uno fue encontrando un hogar… y ahora solo queda él”, informó el IDPYBA en un comunicado.

Apenas llegó a la Unidad de Cuidado Animal, Benji era un perro con un temperamento bastante fuerte debido a los malos tratos que recibió por parte de su anterior familia. Desconfiaba del contacto humano, gruñía si alguien intentaba acercarse a su comida y erguía su cuerpo fuerte y robusto.

Por eso, el equipo de comportamiento empezó a trabajar con él en sesiones de sensibilización y manipulación. Gracias al esfuerzo, la paciencia y la educación de los veterinarios y etólogos, Benji logró recuperar su confianza en las personas y ahora es un perro que brinda mucho amor, lealtad y compañía.

“Aprendió que las manos que se acercaban no venían a arrebatarle nada, sino a ofrecerle caricias. Descubrió que los humanos no siempre significaban peligro, que también podían ser compañía, afecto, hogar”, indicó el IDPYBA.

Hoy, Benji está listo para dar el siguiente paso: encontrar un hogar responsable y cariñoso, donde pueda ser él mismo, donde lo acompañen con tranquilidad y donde no lo obliguen a juegos bruscos ni caricias invasivas. Él espera correr con la misma suerte que tuvieron sus hermanos peludos.

“Es un perro grande, imponente, con un pelo bastante bonito y suele proteger muy bien a las personas que ama. Solo necesita una familia que le tenga paciencia y sepa ganarse su confianza. Preferiblemente, sin niños pequeños, porque no le gusta que lo estén tocando”, indicó Andrés Torres, médico veterinario del área de comportamiento de la entidad.

Si está interesado en adoptar a este can puede solicitar más información en la página web https://adopciones.idpyba.com/adoptar o en las redes sociales del IDPYBA.

🐾 ¿Quiere estar al día y conocer las últimas noticias sobre el mundo animal? Lo invitamos a verlas en La Red Zoocial. 🐶🐱