Las mortales lluvias en Brasil dejan al menos 80 muertos

La antigua ciudad imperial de Petrópolis, a unos 70 kilómetros de la ciudad de Río de Janeiro, recibió en cuestión de seis horas las lluvias previstas para todo febrero. Las consecuencias fueron mortales: al cierre de esta edición, y tras los cerca de 200 deslizamientos de tierra, las autoridades informaron que al menos 80 personas murieron, sin mencionar que los equipos de rescate seguían en la búsqueda de una cantidad indeterminada de desaparecidos.

Decenas de viviendas quedaron reducidas a escombros y los vehículos apilados entre el lodo y las calles inundadas. “Escenas de guerra. ¡Autos colgados de postes! Lo que se vio en la parte alta de la ciudad fue algo impresionante, un volumen de agua nunca visto”, comentó el gobernador Claudio Castro tras visitar la zona. Y la previsión del tiempo tampoco es alentadora: nuevas tormentas y lluvias fuertes podrían llegar tanto hoy como el viernes.

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“Estaba cenando cuando empezó la tormenta. Mi hermano vino a buscarme y me dijo: ‘Tenemos que irnos, el cerro se está derrumbando’”, explicó a la AFP Jerónimo Leonardo, de 47 años, cuya casa resultó sepultada por el deslizamiento de tierra. Hasta ahora, según datos del gobierno local, que decretó el estado de calamidad, unas 300 personas fueron evacuadas y atendidas en las escuelas. Además, la iglesia de Santo Antonio, ubicada cerca de la zona del desastre, abrió sus puertas para acoger a más de 150 personas.

Medios locales informaron que al menos 400 bomberos, con ayuda de perros de rescate, participan en las labores de búsqueda. “Los hombres que venían del cuartel de la ciudad de Río solo lograron llegar a Petrópolis al final de la noche, porque la carretera estaba cortada. Esperamos que más de 200 hombres lleguen a la ciudad en las próximas horas. La mayor dificultad de acceso está en la región de Morro da Oficina. Hay muchas personas sin techo, desplazadas y necesitaremos ayuda”, dijo el coronel Leandro Monteiro, jefe de la Defensa Civil estatal, al diario O Globo.

Hasta el momento, unas 80 viviendas resultaron afectadas en la localidad de Morro da Oficina, mientras que en otras seis zonas también se registraron daños estructurales, estimaron las autoridades municipales.

Brasil ha vivido en los tres últimos meses episodios de intensas lluvias, especialmente en los estados de Bahía y de Minas Gerais, que han dejado decenas de muertos y causado destrozos en centenares de municipios. Los científicos sostienen que, debido al cambio climático, los fenómenos meteorológicos extremos serán cada vez más recurrentes.

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La antigua ciudad imperial de Petrópolis, a unos 70 kilómetros de la ciudad de Río de Janeiro, recibió en cuestión de seis horas las lluvias previstas para todo febrero. Las consecuencias fueron mortales: al cierre de esta edición, y tras los cerca de 200 deslizamientos de tierra, las autoridades informaron que al menos 80 personas murieron, sin mencionar que los equipos de rescate seguían en la búsqueda de una cantidad indeterminada de desaparecidos.

Decenas de viviendas quedaron reducidas a escombros y los vehículos apilados entre el lodo y las calles inundadas. “Escenas de guerra. ¡Autos colgados de postes! Lo que se vio en la parte alta de la ciudad fue algo impresionante, un volumen de agua nunca visto”, comentó el gobernador Claudio Castro tras visitar la zona. Y la previsión del tiempo tampoco es alentadora: nuevas tormentas y lluvias fuertes podrían llegar tanto hoy como el viernes.

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“Estaba cenando cuando empezó la tormenta. Mi hermano vino a buscarme y me dijo: ‘Tenemos que irnos, el cerro se está derrumbando’”, explicó a la AFP Jerónimo Leonardo, de 47 años, cuya casa resultó sepultada por el deslizamiento de tierra. Hasta ahora, según datos del gobierno local, que decretó el estado de calamidad, unas 300 personas fueron evacuadas y atendidas en las escuelas. Además, la iglesia de Santo Antonio, ubicada cerca de la zona del desastre, abrió sus puertas para acoger a más de 150 personas.

Medios locales informaron que al menos 400 bomberos, con ayuda de perros de rescate, participan en las labores de búsqueda. “Los hombres que venían del cuartel de la ciudad de Río solo lograron llegar a Petrópolis al final de la noche, porque la carretera estaba cortada. Esperamos que más de 200 hombres lleguen a la ciudad en las próximas horas. La mayor dificultad de acceso está en la región de Morro da Oficina. Hay muchas personas sin techo, desplazadas y necesitaremos ayuda”, dijo el coronel Leandro Monteiro, jefe de la Defensa Civil estatal, al diario O Globo.

Hasta el momento, unas 80 viviendas resultaron afectadas en la localidad de Morro da Oficina, mientras que en otras seis zonas también se registraron daños estructurales, estimaron las autoridades municipales.

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