Miembros de una milicia planeaban secuestrar a la gobernadora de Michigan
El Buró Federal de Investigaciones frustró un complot para secuestrar a Gretchen Whitmer, la gobernadora demócrata de Michigan. Seis personas fueron acusadas de conspirar para raptar a la dirigente en su casa de vacaciones. ¿Qué está pasando en Estados Unidos?
Estados Unidos parece salido de control. El FBI informó este jueves que frustró el plan de una milicia paramilitar para secuestrar a la gobernadora de Michigan, Gretchen Whitmer, quien estuvo en la baraja de opciones del candidato demócrata a la presidencia Joe Biden para ser nombrada como su fórmula vicepresidencial.
Whitmer, además, es reconocida por su liderazgo frente a la pandemia. Sus medidas estrictas como el cierre de locales y el uso obligatorio del tapabocas fueron, sin embargo, las que animaron a este grupo a raptarla en su casa de verano.
Según el FBI, seis residentes del estado (Adam Fox, Ty Garbian, Kaleb Franks, Daniel Harris, Brandon Caserta y Barry Croft, este último proveniente de Delaware) conspiraron para “asesinar” o “secuestrar” a un gobernador en funciones con el objetivo de mostrar su furia contra las medidas adoptadas por los liberales en el manejo de la pandemia.
Estos hombres dicen que varios gobiernos estatales -los liberales- están “violando la Constitución de Estados Unidos” al adoptar medidas restrictivas, como las cuarentenas, los cierres de locales y el uso de las mascarillas. La elegida para este plan fue Whitmer, quien ya había recibido amenazas por parte de extremistas de derecha en el pasado. El Buró Federal de Investigaciones logró conocer todos los detalles de la operación gracias a informantes confidenciales.
Uno de los informantes, que grabó las conversaciones con el grupo conspiracionista que pretendía secuestrar a Whitmer, también dijo que había planes para asaltar el edificio del Capitolio y tomar rehenes allí. Para esto, el grupo de extremistas señaló que eran necesarios 200 hombres para la misión.
El grupo de seis hombres, que tendría nexos con la organización paramilitar Michigan Militia, acordó finalmente secuestrar a Whitmer en su casa de vacaciones. El plan estaba pensado para ejecutarse antes de las elecciones presidenciales de noviembre. Según dicen los informantes, el grupo realizó ejercicios de entrenamiento y ensayos durante agosto y septiembre. Además, estaban buscando recaudar dinero para explosivos “y otros suministros”.
En Michigan, como en muchos estados del país, se ha visto un preocupante incremento de las milicias de extremistas que muchas veces han salido a “patrullar” las calles armadas. En abril, las milicias de movimientos de extrema derecha se reunieron en el Capitolio y bloquearon las calles para presionar a Whitmer a que levantara las medidas de confinamiento.
Este jueves, los cinco residentes de Míchigan se presentarán en la Corte estatal de ese estado. El destino de Croft, el conspiracionista que provenía de Delaware, no está claro para las autoridades. La gobernadora, entre tanto, tiene previsto pronunciarse sobre la noticia en horas de la tarde.
Le recomendamos: La amenaza de los supremacistas blancos en Estados Unidos preocupa al FBI
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Whitmer, además, es reconocida por su liderazgo frente a la pandemia. Sus medidas estrictas como el cierre de locales y el uso obligatorio del tapabocas fueron, sin embargo, las que animaron a este grupo a raptarla en su casa de verano.
Según el FBI, seis residentes del estado (Adam Fox, Ty Garbian, Kaleb Franks, Daniel Harris, Brandon Caserta y Barry Croft, este último proveniente de Delaware) conspiraron para “asesinar” o “secuestrar” a un gobernador en funciones con el objetivo de mostrar su furia contra las medidas adoptadas por los liberales en el manejo de la pandemia.
Estos hombres dicen que varios gobiernos estatales -los liberales- están “violando la Constitución de Estados Unidos” al adoptar medidas restrictivas, como las cuarentenas, los cierres de locales y el uso de las mascarillas. La elegida para este plan fue Whitmer, quien ya había recibido amenazas por parte de extremistas de derecha en el pasado. El Buró Federal de Investigaciones logró conocer todos los detalles de la operación gracias a informantes confidenciales.
Uno de los informantes, que grabó las conversaciones con el grupo conspiracionista que pretendía secuestrar a Whitmer, también dijo que había planes para asaltar el edificio del Capitolio y tomar rehenes allí. Para esto, el grupo de extremistas señaló que eran necesarios 200 hombres para la misión.
El grupo de seis hombres, que tendría nexos con la organización paramilitar Michigan Militia, acordó finalmente secuestrar a Whitmer en su casa de vacaciones. El plan estaba pensado para ejecutarse antes de las elecciones presidenciales de noviembre. Según dicen los informantes, el grupo realizó ejercicios de entrenamiento y ensayos durante agosto y septiembre. Además, estaban buscando recaudar dinero para explosivos “y otros suministros”.
En Michigan, como en muchos estados del país, se ha visto un preocupante incremento de las milicias de extremistas que muchas veces han salido a “patrullar” las calles armadas. En abril, las milicias de movimientos de extrema derecha se reunieron en el Capitolio y bloquearon las calles para presionar a Whitmer a que levantara las medidas de confinamiento.
Este jueves, los cinco residentes de Míchigan se presentarán en la Corte estatal de ese estado. El destino de Croft, el conspiracionista que provenía de Delaware, no está claro para las autoridades. La gobernadora, entre tanto, tiene previsto pronunciarse sobre la noticia en horas de la tarde.
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