El apagón que afectó a la península ibérica hacia el mediodía del lunes, con fuertes repercusiones en España y Portugal, dejó a algunas zonas sin el servicio de electricidad por incluso más de 12 horas. Los trenes, metros y ascensores dejaron de operar, al tiempo que se presentaron retrasos y cancelaciones de vuelos en algunos aeropuertos, así como cierres en los comercios. En este momento, los dos países tienen el sistema restablecido y están indagando sobre lo sucedido.
El regreso de la luz fue lento. En territorio español, solo el 61 % del servicio había regresado para la medianoche, pero fue aumentando de a poco: 77 % a las 2:00 a. m., 87 % a las 4:00 a. m., 92 % a las 5:00 a. m., y 99,95 % a las 7:00 a. m. A eso de las 11:15 a. m., el operador Red Eléctrica dio a conocer por redes sociales que el funcionamiento del sistema eléctrico peninsular estaba normalizado.
Ahora bien, la recuperación de los servicios ha sido lenta. De hecho, la prensa local reportó desde temprano que aún persistían problemas con las telecomunicaciones, aunque también informó que se han recuperado las conexiones de alta velocidad y larga distancia, y que en las grandes ciudades los metros y cercanías intentan volver a la normalidad.
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, mencionó que va a solicitar un “informe independiente” a Bruselas para tener una imagen “mucho más certera” de lo que ha ocurrido. En su tercera comparecencia desde que inició la emergencia, también anunció que el país va a crear una comisión de investigación, liderada por el Ministerio de Transición Ecológica. A la vez, dijo que exigirá las responsabilidades pertinentes a los operadores privados tras lo sucedido, cuyas causas pueden estar ligadas a problemas con la generación de energía solar.
El apagón en Portugal
El país pasó casi un día entero sin electricidad, algo sin precedentes, según mencionó el primer ministro, Luís Montenegro, quien anunció que le pedirá a la Unión Europea una auditoría independiente para esclarecer las causas de lo sucedido. La interrupción del servicio se dio a las 11:30 a. m. del lunes, paralizando el metro, los trenes y los ascensores, así como afectando las comunicaciones por el celular y el acceso a internet, que presentaron fallas. Los supermercados, además, se quedaron sin luz, comida y agua.
Portugal amaneció este martes con el 80 % del servicio restablecido, luego de que la luz llegara desde las 9:30 p. m. del día anterior en algunas zonas del país. El operador de la red eléctrica aseguró que a eso de la medianoche el suministro de energía llegó a alrededor de 6,2 millones de consumidores, entre un total de 6,5 millones. El Gobierno dio a conocer que el país está volviendo a la normalidad.
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