“Los médicos que hacen esto son, permítanme la palabra, sicarios. Esto no se puede discutir. Están matando una vida humana”, afirmó el papa Francisco en su vuelo de Bélgica de regreso a Roma. De hecho, durante su intervención, dijo que el rey Balduino fue un “santo” por haber abdicado temporalmente en lugar de firmar la legislación que legalizaba el aborto en los años 90. Estos comentarios ocasionaron un revuelo, con voces a favor y en contra.
En su visita a suelo belga, Francisco llegó hasta la tumba del monarca, que, bajo el argumento de objeción de conciencia, se negó a firmar la ley que permitía la interrupción voluntaria del embarazo. “Se necesita un político que lleve pantalones para hacer esto. Se necesita coraje”, añadió el jerarca de la Iglesia católica, quien le mencionó a la prensa que la beatificación del belga estaba avanzando. En un mensaje en X, antes Twitter, añadió: “A mi regreso a Roma, iniciaré el proceso. Que su ejemplo de hombre de fe ilumine a todos los líderes”.
Las reacciones no se hicieron esperar. Unos tacharon a Balduino de “cobarde” y aseguraron que la prohibición del aborto “nunca ha salvado vidas”. Sin embargo, los detractores de la práctica dijeron que él fue “un guerrero”, pues, según también dijo el papa, se negó a firmar “una ley asesina”. En el discurso navideño de 1989, el rey recordó que “los niños merecen especial protección y cuidado, y ello incluye los derechos del no nacido”.
Sin embargo, el aborto fue legalizado en Bélgica el 4 de abril de 1990, con algunas restricciones, y sigue siendo una lucha para las mujeres de hoy en día. De hecho, más de 300 de ellas al año se ven obligadas a viajar a los Países Bajos para interrumpir su embarazo, a pesar de las diferentes vulnerabilidades a las cuales se exponen con esto.
¿Qué más ha dicho el papa Francisco sobre el aborto?
Hace poco se le escuchó decir al jefe de la Iglesia católica que los votantes estadounidenses deberían elegir el “mal menor” a la hora de optar por un candidato presidencial que quiere deportar a los inmigrantes y otro que apoya el derecho al aborto, en referencia a Donald Trump y Kamala Harris, respectivamente. “Ambos están contra la vida”, aseguró.
Específicamente sobre el aborto, Francisco comentó que equivale a “matar a un ser humano”. Agregó: “Aunque sean palabras que no gustan, es un asesinato. No te gustará esto, y no es que la Iglesia esté cerrada, pero es un asesinato y eso lo tenemos claro”.
En 2018 expresó cuestiones similares ante sus fieles en el Vaticano: “Yo les pido: ¿es justo ‘quitar’ una vida humana para resolver un problema? ¿Es justo contratar un sicario para resolver uno? No se puede, no es justo ‘quitar’ a un ser humano, aunque sea pequeño, para resolver un problema”.
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