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Al menos 18 personas, entre ellas tres atacantes, murieron y otras 15 resultaron heridas hoy en un asalto contra la sede del Ministerio de Refugiados en la provincia de Nangarhar, en el este de Afganistán, informó a Efe una fuente oficial.
Un primer atacante suicida hizo detonar los explosivos que portaba para abrir paso a dos de sus compañeros, que se atrincheraron en el edificio hasta que fueron abatidos casi seis horas después del inicio del ataque.
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"La operación para matar a los atacantes terminó (...) pero las fuerzas de seguridad aún están ocupadas despejando el edificio de los remanentes de municiones para evaluar el daño y las pérdidas", afirmó a Efe el portavoz del gobernador provincial, Attaullah Khogyanai.
El ataque en Jalalabad, capital de Nangarhar, comenzó hacia el mediodía y resultaron heridas 15 personas que se encontraban en las instalaciones y que se encuentran hospitalizadas fuera de peligro, explicó Khogyanai.
Algunas de las víctimas "resultaron heridas tras saltar hacia los edificios vecinos tratando de salvar sus vidas", detalló.
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Khogyanai precisó que el asalto se produjo mientras se celebraba una reunión en la oficina de Refugiados entre funcionarios y organizaciones colaboradoras, y que todos los participantes en el encuentro fueron evacuados a tiempo a un lugar seguro.
El portavoz de los talibanes, Zabihullah Mujahid, afirmó a través de la red social Viber que la formación insurgente no está involucrada en el ataque.
En lo que va de mes, varios ataques de envergadura han sacudido la provincia de Nangarhar.
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Un grupo de insurgentes atacó el pasado sábado un centro de formación para matronas en la provincia causando al menos cinco muertos y ocho heridos, mientras que el pasado 11 de julio las fuerzas de seguridad abatieron a dos atacantes que se atrincheraron durante dos horas en el Departamento de Educación de Jalalabad, matando a once empleados de la oficina e hiriendo a otros diez.
Esa ciudad fue escenario a principios de mes de un atentado suicida que costó la vida a 19 personas e hirió a otras 21, en su mayoría miembros de las minorías hindú y sij, coincidiendo con una visita a la ciudad del presidente afgano, Ashraf Gani.