Cerca de 80 personas detenidas en manifestaciones en Hong Kong
La mayoría de protestas fueron prohibidas desde comienzos de año en Hong Kong, donde en junio entró en vigor una ley sobre seguridad nacional. Esta ley reprime en especial la secesión y la subversión, con penas particularmente severas.
Miles de policías antidisturbios fueron desplegados este jueves en las calles de Hong Kong para evitar cualquier manifestación con ocasión de la fiesta nacional china. Las autoridades movilizaron a unos 6.000 agentes, indicó a la AFP una fuente policial, es decir, el doble del efectivo que normalmente se utiliza en caso de manifestaciones probables.
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Horas después, la policía intervino en el barrio comercial de Causeway Bay, escenario de violentos enfrentamientos el año pasado. Los uniformados advirtieron con pancartas a los manifestantes que estaban infringiendo la ley sobre la seguridad nacional. La policía indicó que había detenido al menos a 80 personas, la mayoría por participar en una “concentración no autorizada”. El año pasado, el 70º aniversario de la creación de la China popular dio lugar a violentos enfrentamientos entre manifestantes y policías.
La mayoría de manifestaciones fueron prohibidas desde comienzos de año en Hong Kong, donde en junio entró en vigor una ley sobre seguridad nacional, impuesta por Pekín. Esta ley reprime en especial la secesión y la subversión, con penas particularmente severas.
“Hoy, en China, los que quieren libertad son reprimidos y los que la reprimen están en el poder”, dijo a la prensa el activista Lee Cheuk-yan.
Rodeado de unos cuarenta policías, otro manifestante gritó “Pongan fin a la regla del partido único”. Varios participantes se reunieron frente a la Oficina de Enlace, que alberga las oficinas del gobierno central chino en Hong Kong.
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“Hoy no es un día de fiesta (...) es hora de que el mundo tome conciencia de la manera en la que el Partido Comunista acalla las voces de Hong Kong”, declaró a la prensa Joshua Wong, uno de las principales figuras del movimiento prodemocracia, antes de que la policía le obligara a irse.
Desde que arrancó el 2020 ha sido casi imposible organizar manifestaciones en la ciudad. En las pocas protestas que se han llevado a cabo, la policía antidisturbios y agentes vestidos de civil han intervenido rápidamente.
Solo en un día a principios de septiembre detuvieron a cerca de 300 personas. De hecho, más de 10.000 personas fueron detenidas por haber participado en manifestaciones en los últimos 16 meses, incluyendo a varios dirigentes prodemocracia, según informó la AFP.
¿Paz en Hong Kong?
La jefa de Gobierno de Hong Kong, Carrie Lam, participó en un acto oficial en el centro de exposiciones de la isla, escoltada por las fuerzas de seguridad, mientras varios helicópteros sobrevolaban el territorio desplegando banderas chinas y hongkonesas.
“Durante los últimos meses, un hecho incontestable para todo el mundo es que nuestra sociedad está de nuevo en paz”, declaró Lam en su discurso. “La seguridad nacional de nuestro país fue protegida en Hong Kong y nuestros ciudadanos pueden ejercer de nuevo sus derechos y libertades conforme a las leyes”, añadió.
Miles de policías antidisturbios fueron desplegados este jueves en las calles de Hong Kong para evitar cualquier manifestación con ocasión de la fiesta nacional china. Las autoridades movilizaron a unos 6.000 agentes, indicó a la AFP una fuente policial, es decir, el doble del efectivo que normalmente se utiliza en caso de manifestaciones probables.
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Horas después, la policía intervino en el barrio comercial de Causeway Bay, escenario de violentos enfrentamientos el año pasado. Los uniformados advirtieron con pancartas a los manifestantes que estaban infringiendo la ley sobre la seguridad nacional. La policía indicó que había detenido al menos a 80 personas, la mayoría por participar en una “concentración no autorizada”. El año pasado, el 70º aniversario de la creación de la China popular dio lugar a violentos enfrentamientos entre manifestantes y policías.
La mayoría de manifestaciones fueron prohibidas desde comienzos de año en Hong Kong, donde en junio entró en vigor una ley sobre seguridad nacional, impuesta por Pekín. Esta ley reprime en especial la secesión y la subversión, con penas particularmente severas.
“Hoy, en China, los que quieren libertad son reprimidos y los que la reprimen están en el poder”, dijo a la prensa el activista Lee Cheuk-yan.
Rodeado de unos cuarenta policías, otro manifestante gritó “Pongan fin a la regla del partido único”. Varios participantes se reunieron frente a la Oficina de Enlace, que alberga las oficinas del gobierno central chino en Hong Kong.
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“Hoy no es un día de fiesta (...) es hora de que el mundo tome conciencia de la manera en la que el Partido Comunista acalla las voces de Hong Kong”, declaró a la prensa Joshua Wong, uno de las principales figuras del movimiento prodemocracia, antes de que la policía le obligara a irse.
Desde que arrancó el 2020 ha sido casi imposible organizar manifestaciones en la ciudad. En las pocas protestas que se han llevado a cabo, la policía antidisturbios y agentes vestidos de civil han intervenido rápidamente.
Solo en un día a principios de septiembre detuvieron a cerca de 300 personas. De hecho, más de 10.000 personas fueron detenidas por haber participado en manifestaciones en los últimos 16 meses, incluyendo a varios dirigentes prodemocracia, según informó la AFP.
¿Paz en Hong Kong?
La jefa de Gobierno de Hong Kong, Carrie Lam, participó en un acto oficial en el centro de exposiciones de la isla, escoltada por las fuerzas de seguridad, mientras varios helicópteros sobrevolaban el territorio desplegando banderas chinas y hongkonesas.
“Durante los últimos meses, un hecho incontestable para todo el mundo es que nuestra sociedad está de nuevo en paz”, declaró Lam en su discurso. “La seguridad nacional de nuestro país fue protegida en Hong Kong y nuestros ciudadanos pueden ejercer de nuevo sus derechos y libertades conforme a las leyes”, añadió.