Gobierno italiano declarará estado de emergencia en Sicilia tras terremotos

El Gobierno italiano, formado por el populista Movimiento Cinco Estrellas (M5S) y la ultraderechista Liga, celebrará mañana un Consejo de Ministros en el que declarará el estado de emergencia en las zonas de Sicilia que han sufrido daños con los recientes terremotos ocasionados por la erupción del Volcán Etna.

"Mañana se celebrará un Consejo de Ministros y será declarado el estado de emergencia", dijo hoy a los medios el líder del M5S y vicepresidente del Ejecutivo italiano, Luigi Di Maio.

El también ministro de Desarrollo Económico y de Trabajo afirmó que por el momento los técnicos examinan los edificios golpeados tras los sismos y que el objetivo es "devolver la normalidad lo antes posible".

La actividad sísmica, que ha proseguido en las últimas horas, aunque de forma leve, está vinculada a la erupción del Etna que comenzó el pasado 24 de diciembre y que continúa, aunque con menor intensidad.

Hoy, los dos vicepresidentes del Gobierno, Di Maio y Matteo Salvini (líder de la ultraderechista Liga) visitaron Catania y ofrecieron una rueda de prensa conjunta.

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Salvini, quien también es ministro del Interior, sostuvo que la intención del Gobierno es "dotar a las autoridades locales de todos los instrumentos" adecuados para recuperar la normalidad.

"Me gustaría que en esta situación hubiera plena responsabilidad de los alcaldes, con plenos poderes. Hay muchas fases, procesos y dudas. Por eso es necesario que los alcaldes tengan plenos poderes, después si alguno lo hace mal pagará duramente", señaló.

Aseguró que los expertos que siguen la actividad del Etna "dicen que la situación está bajo control" y afirmó que el Ministerio de Educación va a movilizar un fondo de 20 millones de euros para permitir la reapertura inmediata en las escuelas que presentan deterioros.

Igualmente, garantizó que los más de 400 desalojados podrán tener un espacio donde vivir de forma temporal hasta que sus casas sean reconstruidas o se haya comprobado, en aquellas que no han sufrido daños aparentes, que las estructuras no corren peligro de desplomarse.

El Gobierno italiano, formado por el populista Movimiento Cinco Estrellas (M5S) y la ultraderechista Liga, celebrará mañana un Consejo de Ministros en el que declarará el estado de emergencia en las zonas de Sicilia que han sufrido daños con los recientes terremotos ocasionados por la erupción del Volcán Etna.

"Mañana se celebrará un Consejo de Ministros y será declarado el estado de emergencia", dijo hoy a los medios el líder del M5S y vicepresidente del Ejecutivo italiano, Luigi Di Maio.

El también ministro de Desarrollo Económico y de Trabajo afirmó que por el momento los técnicos examinan los edificios golpeados tras los sismos y que el objetivo es "devolver la normalidad lo antes posible".

La actividad sísmica, que ha proseguido en las últimas horas, aunque de forma leve, está vinculada a la erupción del Etna que comenzó el pasado 24 de diciembre y que continúa, aunque con menor intensidad.

Hoy, los dos vicepresidentes del Gobierno, Di Maio y Matteo Salvini (líder de la ultraderechista Liga) visitaron Catania y ofrecieron una rueda de prensa conjunta.

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Salvini, quien también es ministro del Interior, sostuvo que la intención del Gobierno es "dotar a las autoridades locales de todos los instrumentos" adecuados para recuperar la normalidad.

"Me gustaría que en esta situación hubiera plena responsabilidad de los alcaldes, con plenos poderes. Hay muchas fases, procesos y dudas. Por eso es necesario que los alcaldes tengan plenos poderes, después si alguno lo hace mal pagará duramente", señaló.

Aseguró que los expertos que siguen la actividad del Etna "dicen que la situación está bajo control" y afirmó que el Ministerio de Educación va a movilizar un fondo de 20 millones de euros para permitir la reapertura inmediata en las escuelas que presentan deterioros.

Igualmente, garantizó que los más de 400 desalojados podrán tener un espacio donde vivir de forma temporal hasta que sus casas sean reconstruidas o se haya comprobado, en aquellas que no han sufrido daños aparentes, que las estructuras no corren peligro de desplomarse.