La voz de los videos de ISIS habla por primera vez, esto fue lo que dijo

En octubre 2014, el FBI en Estados Unidos le pidió ayuda al público para identificar al individuo, o individuos, detrás de los videos propagandísticos del Estado Islámico (ISIS). El hombre de las narraciones hablaba inglés con un fluido acento norteamericano. Se convirtió de a poco en uno de los hombres más importantes del grupo terrorista, pues era el encargado de seducir a estadounidenses y anglosajones para que sirvieran a la ideología de ISIS.

Mohammed Khalifa, de 35 años, le ha confesado a The New York Times que es él era ese evangelista sin rostro. Nació en Arabia Saudita y en 2013 cruzó a Siria para unirse a la Brigada Muhajireen dirigida por Omar al-Shishani, que le prometió lealtad al Estado Islámico antes de 2014. Poco antes de su ingreso a la Brigada, Khalifa comenzó a trabajar para el ministerio de medi0os del grupo, un órgano crucial del grupo terrorista.

“Es un símbolo: la voz que proviene de ISIS, que habla al mundo de habla inglesa durante la mayor parte de los últimos cuatro a cinco años”, le dijo a The New York Times Amarnath Amarasingam, investigador de la radicalización en Canadá. “Su voz es la voz de habla inglesa más reconocible que haya aparecido en la propaganda del Estado Islámico”, complementa el investigador del Centro Internacional para el Estudio de la Radicalización del College King de Londres, Charlie Winter.

El trabajo narrativo de Khalifa incluye docenas de clips de audio y video que sirvieron para la propaganda de ISIS en Occidente. El video “Flames of War”, lanzado el 19 de septiembre de 2014 marcó el inicio de su éxito, pues se apareció meses antes de que el grupo pronunciara su califato. Antes de ello, ISIS no había publicado un material tan ambicioso. Vea también: Propaganda de Estado Islámico muestra por primera vez a mujeres combatientes

“Me gusta Flames of War”, dice Khalifa, quien ahora está en una prisión en el noroeste de Siria, donde fue capturado por tropas respaldadas por Estados Unidos en enero de 2019. Ese video, de 55 minutos, fue filmado con una GoPro y fue el primero en crear una experiencia inmersiva a los espectadores, pues mostraba a un soldado cavando una trinchera antes de una operación.

Antes de ser la voz de ISIS, Khalifa había migrado a Canadá cuando niño en donde aprendió el acento norteamericano. Estudió tecnología de sistemas informáticos y trabajó en una empresa privada. Ahora se encuentra entre los cientos de prisioneros de más de 50 países en el norte de Siria, con sus esposas e hijos también recluidos en campos de detención. Khalifa ha confesado que tiene esposa y dos hijos, pero no entregó detalles sobre su actual paradero.

Tras ser capturado, el gobierno canadiense no le ofreció ayuda consular. El Ministerio de Relaciones Exteriores no se pronunció sobre su detención. Khalifa ha dicho que su papel no era tan importante y señaló que su aparición en los videos no iba más allá de proporcionar su voz. Llegó a ISIS sin necesidad de que lo convencieran por la jihad. Fue un video de YouTube, de los mismos para los que prestó su voz después, el que lo convenció de ir a Siria a ser un recluta del Estado Islámico. Le puede interesar: ¿Son locos los del Estado Islámico?

La voz de ISIS detalló que trabajaba para Abu Muhammad al-Furqan, líder de la unidad de medios que fue asesinado en un ataque aéreo en 2016. Los videos buscaban capturar a personas de diferentes nacionalidades dentro del califato para mostrar el alcance global del grupo.

“No, no me arrepiento de nada”, confesó ante los reporteros del Times en una entrevista. “Yo solo era la voz”, asume Khalifa. Su voz representó a un grupo que juró nunca rendirse. Sin embargo, cedió finalmente ante los bombardeos y los desafíos en la zona de batalla. “Estaba agotado. No tenía munición. Me pidieron que me rindiera, así que tiré mi arma”, concluye.

En octubre 2014, el FBI en Estados Unidos le pidió ayuda al público para identificar al individuo, o individuos, detrás de los videos propagandísticos del Estado Islámico (ISIS). El hombre de las narraciones hablaba inglés con un fluido acento norteamericano. Se convirtió de a poco en uno de los hombres más importantes del grupo terrorista, pues era el encargado de seducir a estadounidenses y anglosajones para que sirvieran a la ideología de ISIS.

Mohammed Khalifa, de 35 años, le ha confesado a The New York Times que es él era ese evangelista sin rostro. Nació en Arabia Saudita y en 2013 cruzó a Siria para unirse a la Brigada Muhajireen dirigida por Omar al-Shishani, que le prometió lealtad al Estado Islámico antes de 2014. Poco antes de su ingreso a la Brigada, Khalifa comenzó a trabajar para el ministerio de medi0os del grupo, un órgano crucial del grupo terrorista.

“Es un símbolo: la voz que proviene de ISIS, que habla al mundo de habla inglesa durante la mayor parte de los últimos cuatro a cinco años”, le dijo a The New York Times Amarnath Amarasingam, investigador de la radicalización en Canadá. “Su voz es la voz de habla inglesa más reconocible que haya aparecido en la propaganda del Estado Islámico”, complementa el investigador del Centro Internacional para el Estudio de la Radicalización del College King de Londres, Charlie Winter.

El trabajo narrativo de Khalifa incluye docenas de clips de audio y video que sirvieron para la propaganda de ISIS en Occidente. El video “Flames of War”, lanzado el 19 de septiembre de 2014 marcó el inicio de su éxito, pues se apareció meses antes de que el grupo pronunciara su califato. Antes de ello, ISIS no había publicado un material tan ambicioso. Vea también: Propaganda de Estado Islámico muestra por primera vez a mujeres combatientes

“Me gusta Flames of War”, dice Khalifa, quien ahora está en una prisión en el noroeste de Siria, donde fue capturado por tropas respaldadas por Estados Unidos en enero de 2019. Ese video, de 55 minutos, fue filmado con una GoPro y fue el primero en crear una experiencia inmersiva a los espectadores, pues mostraba a un soldado cavando una trinchera antes de una operación.

Antes de ser la voz de ISIS, Khalifa había migrado a Canadá cuando niño en donde aprendió el acento norteamericano. Estudió tecnología de sistemas informáticos y trabajó en una empresa privada. Ahora se encuentra entre los cientos de prisioneros de más de 50 países en el norte de Siria, con sus esposas e hijos también recluidos en campos de detención. Khalifa ha confesado que tiene esposa y dos hijos, pero no entregó detalles sobre su actual paradero.

Tras ser capturado, el gobierno canadiense no le ofreció ayuda consular. El Ministerio de Relaciones Exteriores no se pronunció sobre su detención. Khalifa ha dicho que su papel no era tan importante y señaló que su aparición en los videos no iba más allá de proporcionar su voz. Llegó a ISIS sin necesidad de que lo convencieran por la jihad. Fue un video de YouTube, de los mismos para los que prestó su voz después, el que lo convenció de ir a Siria a ser un recluta del Estado Islámico. Le puede interesar: ¿Son locos los del Estado Islámico?

La voz de ISIS detalló que trabajaba para Abu Muhammad al-Furqan, líder de la unidad de medios que fue asesinado en un ataque aéreo en 2016. Los videos buscaban capturar a personas de diferentes nacionalidades dentro del califato para mostrar el alcance global del grupo.

“No, no me arrepiento de nada”, confesó ante los reporteros del Times en una entrevista. “Yo solo era la voz”, asume Khalifa. Su voz representó a un grupo que juró nunca rendirse. Sin embargo, cedió finalmente ante los bombardeos y los desafíos en la zona de batalla. “Estaba agotado. No tenía munición. Me pidieron que me rindiera, así que tiré mi arma”, concluye.