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Aunque desde los años sesenta se han desarrollado arma capaces de destruir satélites que orbitan la tierra, la tecnología de hoy permite prever un escalamiento en el desarrollo de armas que pueden ser lanzadas hacia la estratósfera.
Este domingo, por ejemplo, según el ABC, España lanzó al espacio el satélite de defensa PAZ, a bordo del cohete Falcon 9. Lea también: Estamos a dos minutos de la hora del apocalipsis
El informe “2018 Wordlwide Threat Assessment of the US Intelligence Community”, elaborado por el Centro Nacional de Inteligencia norteamericano, dice: “Afirmamos que, si Estados Unidos entrara en un posible conflicto con Rusia o China, cualquiera de estos justificaría los ataques contra los satélites estadounidenses o aliados para contrarrestar la ventaja militar percibida y derivada de sistemas espaciales civiles, militares y comerciales”.
Esto quiere decir, según el mismo informe, que: “las potencias extranjeras, particularmente China y Rusia, seguirán expandiendo sus sistemas espaciales de reconocimiento, navegación y comunicaciones, con más satélites y con mayores capacidades”.
Tanto Rusia como China están desarrollando con cada vez más rapidez armas anti-satélites que puedan ser usadas en posibles conflictos bélicos.
Armas que alcanzarán su “capacidad operacional inicial en los próximos años”, asegura el mismo documento.
La investigación asegura tener indicios de que China ha comenzado el “entrenamiento operacional de capacidades contra-espacio, como los misiles anti-satélite lanzados desde tierra”, y Rusia estaría desarrollando armas similares.
Los satélites que ambas potencias estarían preparando tienen una función dual, es decir, son de servicio tanto civil como militar.
“Algunas tecnologías pueden tener aplicaciones pacíficas, como inspeccionar, reparar o repostar satélites, pero también pueden ser usadas contra las naves espaciales del adversario”, asegura el reporte.
El informe de la inteligencia norteamericana critica el desarrollo de China y Rusia por estar “aumentando sus capacidades militares en el espacio al mismo tiempo que públicamente afirman que el espacio debe ser un dominio pacífico”.
Declaraciones algo irónicas, pues los Estados Unidos también están desarrollando armamento en este sentido. Lea también: La amenaza nuclear en la era Trump
Según Brian Weeden, analista de Secure World Foundation, aseguró al portal space.com que los EE.UU. han convertido la órbita terrestre en un potencial campo de batalla. Pues han desarrollado satélites con funciones militares, y se rumora que están en el desarrollo de sistemas más “ofensivos” para defender sus propias naves.
El mismo analista asegura que las diferentes potencias han empezado a construir armas capaces de cegar satélites enemigos y de alcanzar otros blancos en órbita. De hecho, hay informes de que Rusia ha interceptado los sistemas de GPS ucranianos.
Lo que estaría en contra de la posible paz que estos países dicen querer alcanzar con un desescalamiento ascendente de las armas con potencial bélico.