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Las fuerzas israelíes bombardearon este viernes varios puntos de la Franja de Gaza, entre ellos un campo de refugiados, el mismo día en el que la guerra entre Israel y el movimiento palestino Hamás cumple ocho meses.
Los enfrentamientos de ahora, que empezaron el 7 de octubre, han cobrado decenas de miles de vidas, han devastado gran parte de la Franja de Gaza y han obligado a desplazarse a la mayoría de sus 2,4 millones de habitantes, que corren riesgo de hambruna. Una semana después del anuncio del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, de una hoja de ruta, los esfuerzos diplomáticos para alcanzar un alto al fuego parecen de nuevo estancados.
Los bombardeos continuaron el viernes en todo el territorio palestino, controlado desde 2007 por el movimiento islamista Hamás. En Deir al-Balah, en el centro, seis personas murieron y otras seis resultaron heridas por un ataque con misiles contra la casa de una familia del campo de refugiados de Al Maghazi, indicó una fuente médica.
En Ciudad de Gaza, dos personas murieron y varias resultaron heridas en un ataque con misiles israelíes contra una vivienda, según una fuente hospitalaria. De acuerdo con la información de un periodista de la AFP, los buques de guerra israelíes dispararon proyectiles contra casas en el puerto de pescadores de Sheikh Ajlin, al oeste de la ciudad principal del enclave.
El Ejército atacó también con artillería los campamentos de Al Maghazi y Al Bureij, en el centro de la Franja, así como la ciudad de Al Qarara, cerca de Jan Yunis, y Rafah, según fuentes locales. Las operaciones militares en esta ciudad superpoblada del sur de la Franja han obligado a huir a un millón de palestinos, según la ONU. El paso fronterizo con Egipto, esencial para la entrada de ayuda internacional al territorio sitiado, sigue cerrado.
“Base de Hamás”: el argumento que usó Israel para atacar una escuela de la UNRWA
La actual guerra en la Franja de Gaza fue desencadenada por el ataque en el sur de Israel de comandos de Hamás infiltrados desde el territorio palestino, ocurrido el 7 de octubre, que se saldó con la muerte de 1.194 personas, la mayoría civiles muertos ese día, según un recuento de la AFP con base en datos oficiales israelíes.
Ese día 251 personas fueron tomadas como rehenes. Después de una tregua en noviembre, que permitió liberar a un centenar de ellos, 120 siguen retenidos en Gaza, 41 de los cuales han muerto, según el Ejército israelí. En respuesta al ataque, las autoridades de Israel lanzaron una ofensiva que ha dejado al menos 36.731 palestinos muertos, en su mayoría civiles, según el Ministerio de Salud de Gaza, controlado por Hamás.
Un hospital de la Franja de Gaza anunció el jueves la muerte de al menos 37 personas en un bombardeo contra una escuela de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA). Según el Ejército israelí, que se atribuyó la responsabilidad del ataque, en la escuela había “una base de Hamás”. La institución dijo: “Aviones de combate del Ejército (...) llevaron a cabo un ataque preciso contra una base de Hamás, ubicada dentro de una escuela de la UNRWA, en la región de Nuseirat”.
Ante lo sucedido, Estados Unidos le pidió el jueves a Israel transparencia. De hecho, en declaraciones a la prensa, el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, aseguró: “El Gobierno de Israel anunció que daría más información sobre el ataque, incluyendo los nombres de las personas fallecidas. Esperamos que sean totalmente transparentes y que hagan pública la información”.
El funcionario sostuvo que Washington creía en las consideraciones israelíes de que Hamás se ha escondido en ocasiones en infraestructura civil, pero dijo que espera más información sobre este último ataque: “Hemos visto las afirmaciones de que 14 niños murieron en este ataque y, ciertamente, cuando se aprecia, si eso es exacto, que 14 niños murieron, pues esos no son terroristas”.
En el frente diplomático, Biden presentó el 31 de mayo una hoja de ruta, propuesta por Israel, según él, que prevé, en una primera fase, un alto al fuego de seis semanas, acompañado de una retirada israelí de las zonas densamente pobladas de Gaza, y de la liberación de algunos rehenes y prisioneros palestinos. Hamás dará su respuesta a la propuesta “en los próximos días”, dijo el jueves un alto responsable citado por Al Qahera News, un medio cercano a los servicios de inteligencia egipcios.
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