Se inicia la construcción de la Troncal de los Andes en Chía

Archivo El Espectador

Este fin de semana se dio inicio a la construcción de la Troncal de los Andes (variante de Chía), con la que el Gobierno Nacional busca reducir los tiempos de viaje y mejorar la conectividad con los municipios cercanos como Cajicá, Tabio, Tenjo, Cota, Briceño, Tocancipá, Tunja, Zipaquirá, Sopó y Guasca.

Lea: Troncal de Los Andes en Chía: todo listo para arrancar obras

En la Troncal de los Andes, que tendrá una longitud de 3,4 kilómetros, el Gobierno Nacional invertirá $120.000 millones, con lo que se construirán dos puentes que atravesarán el río Bogotá, 20 puentes peatonales y ciclorrutas a ambos costados de la vía, que permitirá diferenciar el tráfico de vehículos que ingresan al municipio de los que siguen su camino hacia la Autopista Norte. 

De acuerdo con el presidente de la ANI, Louis Kleyn, “esta obra consolida la red vial de la sabana norte de Bogotá, conecta el municipio de Chía con la Autopista Norte, evitando la baja velocidad de operación, embotellamientos y saturación de las vías”.

Recientemente el alcalde de Chía, Leonardo Donoso, informó que ya se cuenta con el 43% de los predios y los restantes están próximos a ser escriturados y otros están en proceso de expropiación. Ante esto, se iniciarán las obras se empezarán sobre la Autopista Norte, en el sector conocido como Hacienda Cuernavaca, donde ya se tiene previsto un plan de manejo de tráfico para evitar traumatismos en la movilidad. 

Se espera que la construcción de la Troncal de los Andes tenga una duración de 18 meses, por lo que se entregaría la vía en septiembre de 2020. Además de la construcción de la doble calzada, se harán trabajos de mejoramiento y rehabilitación de la calzada existente, así como la ampliación de 4,2 kilómetros en calzada sencilla. 

Le puede interesar: La ANLA entregó la licencia ambiental para construcción de Troncal de los Andes

La necesidad de este corredor quedó demostrada en septiembre de 2016, cuando el mandatario de Chía restringió la circulación de vehículos de carga por la población. Aunque en su momento, el principal argumento fue la necesidad de mejorar la calidad de vida de los habitantes, de fondo apuntaba a que la Nación se comprometiera con la vía alterna.

Los camiones hoy no tienen otra opción que recorrer la avenida Pradilla, un tramo de 800 metros que, aparte de ser la vía de acceso al municipio, es la única conexión entre Cundinamarca, el norte de Boyacá y los Santanderes. El tráfico en la zona es tan pesado que, según cálculos de la propia Alcaldía, un recorrido desde Siberia hasta Chía, que debería durar 15 minutos, hoy puede tardar casi hora y media.

Esta obra hace parte del proyecto de ampliación de la Autopista Norte, entre la 245 y La Caro, en la que se invertirán $1,2 billones y por la que se talaron alrededor de 3.200 árboles que se encontraban sobre el separador de dicha vía.