El nuevo sistema de lanzamisiles con el que Kim Jong-un quiere preocupar a sus enemigos

Foto de referencia. / EFE

Corea del Norte probó un nuevo sistema de lanzamisiles teledirigidos múltiple de alto calibre en su test más reciente de este miércoles, que fue supervisado por el líder del país, Kim Jong-un, informó hoy la agencia estatal de noticias KCNA.

La prueba "verificó la efectividad de combate del sistema", que, según indicó el citado medio, "jugará un papel principal en las operaciones militares terrestres, en un corto período de tiempo, de acuerdo con la política estratégica de modernización de artillería" del país, establecida por el régimen norcoreano.

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Además, como prueba de que sí se realizó el ejercicio, Corea del Norye difundió hoy imágenes pixeladas de su último ensayo armamentístico. La filmación retransmitida por la televisión estatal KCTV mostraba al líder Kim Jong Un supervisando desde lo que parece un puesto de comando móvil, y la silueta de él mirando cómo el arma se elevaba en el cielo. Tras conocer el resultado señaló que el sistema sería "una molestia ineludible" para las fuerzas que se conviertan en su objetivo.

No obstante, en un movimiento inusualmente secretista, algunas de las imágenes habían sido posteriormente pixeladas, y la agencia oficial KCNA ni siquiera publicó fotografías de las pruebas.  Esto sugiere que Pyongyang no ha mostrado previamente el nuevo sistema en uno de sus desfiles militares y que estaba tratando de ocultar algunas de sus características.

En la prueba balística de este miércoles Corea del Norte lanzó dos misiles balísticos de corto alcance desde una zona próxima a Wonsan, en la costa oriental del país. Los misiles cayeron en el Mar de Japón (llamado Mar del Este en las dos Coreas) tras recorrer unos 250 kilómetros.

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El test de la víspera fue similar al que el país realizó la semana pasada y se produjo a pocos días de que comiencen las maniobras militares de Seúl y Washington, a las que Pionyang se opone.

Las recientes pruebas armamentísticas norcoreanas, las primeras desde el encuentro entre Kim y el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, el 30 de junio en la frontera intercoreana, amenazan con recrudecer la tensión en la región, mientras las negociaciones para la desnuclearización del régimen siguen estancadas.

La Administración Trump ha rebajado la importancia de las pruebas, que podrían ser un intento del régimen norcoreano por reafirmar su posición ante el probable reinicio de las negociaciones para los dos países, para el que aún no hay fecha definida.