Este miércoles la Policía Metropolitana de Barranquilla dio cumplimiento a un acto administrativo autorizado desde 2016, que le ordenaba a un grupo de vendedores ambulantes, ubicados en la calle 17 con carrera 10, retirar sus negocios de esa zona.
Durante el operativo, los uniformados procedieron con el derrumbe de 17 kioskos de madera que bloqueaban la vía peatonal. El secretario de control urbano, Henry Cáceres, informó a Rcn Radio que muchos sectores se encuentran afectados por la presencia de vendedores ambulantes en el espacio público, y esto, retrasa el proceso de transformación que está buscando Barranquilla. (Lea también: Suspenden a profesor que tuvo ‘relación afectiva’ con alumna en el Atlántico)
“En esta oportunidad estábamos en mora de hacer esta actividad que se ajusta a la ley y decirles que estos terrenos serán utilizados por la empresa Transmetro para el mejoramiento del servicio de transporte”, manifestó Cáceres.
Además, el secretario de control aseguró que los negocios tenían conexiones ilegales de electricidad y expendían estupefacientes. Al parecer, los 17 vendedores informales desalojados se trasladaron con sus enseres a otras zonas de la ciudad.
Un integrante del grupo de vendedores, dice estar adelantanto diálogos con las autoridades para encontrar una forma de ayudar a los afectados por el incidente.
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