Fiscal "llora" por la vergonzosa Comisión de Acusaciones: Claudia López

La senadora Claudia López respondió a las recientes críticas del fiscal Eduardo Montealegre al tribunal de aforados incluido en la reforma de equilibrio de poderes que la semana pasada se aprobó en primer de ocho debates en el Congreso.

Luego de que Montealegre convocara a los jueces para protestar por la iniciativa, la cual calificó de “revanchista” en contra de la justicia, López dijo que los únicos que anhelan continuar con la Comisión de Acusaciones de la Cámara para el juzgamiento de los aforados son el fiscal y los magistrados. (Lea: Magistrados ahora tendrán quién los juzgue).

“Los magistrados y el Fiscal son los únicos colombianos que lloran y anhelan la vergonzosa Comisión de Acusaciones”, dijo.

Según ella, el país tiene que “inventarse algo mejor” para el juzgamiento de los altos dignatarios pues históricamente la Comisión de Acusaciones ha demostrado su inoperancia.

El domingo, en entrevista con El Espectador, la senadora de la Alianza Verde dijo que “para que una democracia tenga equilibrio de poderes nadie se puede sentir por encima de la ley”. (Lea: "Me duele que mi mamá se angustie por mí").

“Lo que está ocurriendo con los aforados —el presidente, el fiscal y los magistrados— es que tienen impunidad de facto. Una piedra fundamental del reequilibrio de poderes es que el fiscal y los magistrados tengan un tribunal ante el cual respondan si violan la ley”, insistió.

López además insistió en que su iniciativa no se trata de un “revanchismo” advirtiendo que está con vida “gracias a la Fiscalía y a la Corte Suprema”.

“¡Cuál revanchismo! Si en las investigaciones de la parapolítica o las denuncias que he hecho contra narcotraficantes como Kiko Gómez ellos me hubieran dejado colgada de la brocha, yo estaría muerta o exiliada”, explicó la congresista.

Esta semana el Senado retomará las deliberaciones sobre la reforma para elaborar la ponencia que será llevada a la plenaria de la corporación para su aprobación en segundo debate.

Para que la reforma sea una realidad debe ser aprobada en al menos cuatro debates (dos en Senado y dos en Cámara) antes del próximo 16 de diciembre. Luego deberá cumplir cuatro aprobaciones más antes del 20 de junio del próximo año.