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Francia conejeada

Jaime Arocha
28 de diciembre de 2021 - 05:00 a. m.

Tenía razones para sospechar que el Pacto Histórico vulneraría su alianza con el movimiento Soy Porque Somos. A los pocos días de iniciada la alcaldía de Petro, comenzó a funcionar una Dirección de Asuntos Étnicos con el liderazgo de Rudecindo Castro, figura representativa del movimiento afro. Preocupado por la falta de acciones afirmativas en favor de las minorías étnicas del Distrito, él pensó en un proyecto que diera cuenta de los cambios demográficos de esas poblaciones, de sus nuevas características socioculturales, de las organizaciones que habían creado, y a partir de esas indagaciones diseñar políticas públicas. Para perfeccionar la propuesta, el director de etnias convocó al CIDSE de la Universidad del Valle por su experiencia en el estudio de las poblaciones negras, al ICANH y al Grupo de Estudios Afrocolombianos de la Universidad Nacional. La Secretaría de Planeación convocó una reunión con los proponentes, exceptuando a Rudecindo Castro. Justificaron la ausencia diciendo que él no era académico. Pasaron por alto sus credenciales universitarias y su papel en la gestación del proyecto. ¿Dejos racistas? De ahí en adelante peregrinamos por las agencias que implementarían los cuatro componentes de una propuesta para cuyo apoyo temprano se manifestaron USAID y OEI.

“Los negros se autoflagelan”, fue un argumento frecuente para poner en duda las acciones afirmativas por las cuales pugnábamos. A esa noción la acompañaba la de prevenir la “bantuización” de la ciudad, medio de descalificar el rechazo del asimilacionismo que hoy Petro camufla mediante su propuesta del interculturalismo. De ese pensamiento dio plena cuenta un funcionario del Instituto Distrital de Cultura y Turismo. Se había inscrito en la maestría de Estudios Culturales de la Universidad Nacional, en uno de cuyos seminarios alardeó que “los negros” se negaban a ser parte de la nación, autodiscriminándose. Que era falso que por su raza los arrendadores les negaran acceso a la vivienda y que más bien ellos insistían en formar guetos, cuyo manejo ya era problemático para la administración distrital.

Hacia mediados de 2012 era indudable que la Secretaría de Gobierno no apoyaría la propuesta. Pero entonces Planeación me invitó a una reunión con Viva la Ciudadanía, la ONG que para mi sorpresa había sido escogida para hacer la caracterización sociocultural que el Grupo de Estudios Afrocolombianos había propuesto desde el inicio de la gestión. En vez de las aproximaciones etnográficas y de las conversaciones con los miembros de las mesas organizativas que el ICANH había identificado, el nuevo equipo proponía unos grupos focales para cuya realización me responsabilizaban mediante una especie de asistencia de investigación, opción que rechacé y la cual contrastaba con la que la misma Secretaría le ofreció al CIDSE de Univalle en cuanto al liderazgo del componente demográfico (ver el libro Igualdad para un buen y mejor vivir).

Estos eventos evidencian el racismo contra el cual lucha Soy Porque Somos, así como un significativo vacío de ética. A propósito del proyecto mencionado, ese déficit moral involucró al colegaje científico, y con respecto a la contienda electoral, el profundo y preocupante incumplimiento de los compromisos acordados con tres emblemáticos adalides del movimiento negro: Francia Márquez, Carlos Rosero y Vicenta Moreno.

Nota 1. Tombuctú es el cielo donde las almas de los perros se encuentran con las de la gente que los entiende. Paul Auster lo creó para que el poeta vagabundo Willy Christmas esperara a Mr. Bones, tan loco y libre como quien lo había encontrado callejeando. Mostro y Jaime Osorio ya están allá juntos. Por 15 años, con mi adorada Ángela, Jorge Forero y su esposa, Lina, fuimos testigos del amor que unió al director de cine con su perro. Gracias a la vida que nos permitió imaginar el dichoso encuentro de ambos en Tombuctú.

Nota 2. Elaboré esta página desde el Valle de Aburrá, en medio de músicas estridentes y estallidos de voladores. Poco han parado desde la “alborada” del 1° de diciembre. Ya desesperado por la algarabía y el estruendo, un vecino se quejó, pero le respondieron disparando cohetes contra las ventanas de su apartamento. Minutos después aparecieron en portería unos motociclistas anunciando que si la administración del edificio no ponía en cintura a esos objetores, ellos tenían la manera de hacerlo. Infortunadamente, esto va mucho más allá del fuego y el juego, acerca de los cuales escribió Arturo Guerrero.

* Miembro fundador, Grupo de Estudios Afrocolombianos, Universidad Nacional.

 

Tayrona(31467)28 de diciembre de 2021 - 04:11 p. m.
Petro gana porque, gana. Primero el triunfo, y después las rencillas personales. No seamos insensatos y no le hagamos el favor a la corrupta ultraderecha goda y uribestia.
Cordillerano(64187)28 de diciembre de 2021 - 03:55 p. m.
Plenamente de acuerdo con el profe Jaime Arocha, hay mucho mas Petrismo que pacto histórico!!!
Periscopio(2346)28 de diciembre de 2021 - 02:26 p. m.
"SOY petrista PORQUE SOMOS humanistas" debió ser el slogan de Francia Márquez al ingresar a COLOMBIA HUMANA. Francia podrá no ser una conejita de Play boy, pero es una morena decente que sirve de ejemplo a muchos que presumen de ser "gente de bien" pero que solo son la vergüenza de los colombianos y la deshonra de la especie humana.
  • Cordillerano(64187)28 de diciembre de 2021 - 03:46 p. m.
    ????
WILSON(19257)28 de diciembre de 2021 - 01:50 p. m.
Francia Márquez no fue "conejeada", no sea mentiroso, ya aceptó las explicaciones de Gustavo Petro y el Pacto Histórico, marcha viento en popa, rumbo a constituirse en la primera fuerza política del país contra su voluntad, señor columnista.
Joaquín(65075)29 de diciembre de 2021 - 12:34 p. m.
Muy bien
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