Otra EPS liquidada

El Espectador
16 de octubre de 2019 - 05:00 a. m.
Leer las razones que llevaron a esa decisión es ver un resumen de todas las fallas que el sistema de salud ha tenido con los colombianos. / Foto: Archivo El Espectador
Leer las razones que llevaron a esa decisión es ver un resumen de todas las fallas que el sistema de salud ha tenido con los colombianos. / Foto: Archivo El Espectador

La semana empezó con la liquidación de otra EPS por parte de la Superintendencia de Salud. La intervención que viene realizando la entidad de control ha demostrado los graves problemas que persisten en el sistema de salud de los colombianos, pero también, esperamos, es un buen síntoma de las medidas de choque que se están adoptando para solucionar el problema.

En esta ocasión, la medida de la Supersalud estuvo dedicada a la EPS Saludvida. Mediante la Resolución 8896 de 2019, se ordenó su liquidación.

Leer las razones que llevaron a esa decisión es ver un resumen de todas las fallas que el sistema de salud ha tenido con los colombianos. Según el superintendente nacional de Salud, Fabio Aristizábal, Saludvida tuvo fallas en la capacidad de atención, un incremento en el número de reclamaciones relacionadas con la falta de provisión de servicios del plan básico, reportes insatisfactorios del uso inadecuado de los recursos que le han dado a la EPS para la prestación de servicios de salud y el incumplimiento de la mayoría de los indicadores de calidad. Además de lo anterior, hay un déficit financiero abrumador: Saludvida tiene deudas que rondan los $200.000 millones y que superan los 380 días. Asimismo, tiene pérdidas acumuladas que suman cerca de $900.000 millones y un endeudamiento del 326 %.

Así es muy difícil tener un sistema de salud que garantice la dignidad y los derechos fundamentales de los colombianos. No se trata, por cierto, de un caso aislado. Hace unas semanas, la Supersalud también ordenó la liquidación de la EPS Emdisalud, que tenía 448.994 afiliados. En ese caso, los pasivos y el patrimonio (en negativo) son de $503.000 millones y -$404.000, respectivamente. Eso volvía inviable su funcionamiento adecuado.

Podríamos continuar: la EPS Cruz Blanca, con 312.000 usuarios, fue liquidada por tener pasivos por de $446.000 millones. Cafesalud, Manexca y Comfacor son otras entidades promotoras de salud que desaparicieron (o están en el proceso) por las fallas en el servicio y sus finanzas.

La pregunta necesaria es si estas liquidaciones, sumadas a los planes de inversión y saneamiento de deudas anunciados por el Gobierno Nacional, serán suficientes para que, de una vez por todas, el sistema de salud colombiano salga del enorme hueco en el que está sumergido. Aunque hay voces críticas de las estrategias adoptadas, el mensaje que se les está enviando a los colombianos es de esperanza. Sumado a los esfuerzos del Gobierno pasado, el Ministerio de Salud y la Supersalud están mostrando resultados.

Es importante que los usuarios no se vean afectados en este proceso. Los próximos meses mostrarán si los colombianos pudieron vincularse sin problemas a las EPS que entraron a suplir los vacíos de las liquidadas. ¿Aguantarán las EPS la nueva carga? ¿Muestra el sistema señales de fortaleza? El tiempo lo dirá.

¿Está en desacuerdo con este editorial? Envíe su antieditorial de 500 palabras a elespectadoropinion@gmail.com.

Nota del director. Necesitamos lectores como usted para seguir haciendo un periodismo independiente y de calidad. Por favor, considere adquirir una suscripción digital y apostémosle al poder de la palabra.

Por El Espectador

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
Aceptar