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Algunos congresistas llevan intentando desde el semestre pasado tramitar varios proyectos que buscan bajar la edad para llegar al Congreso. La preponderancia de jóvenes en las calles durante el estallido social que comenzó en abril y se prolongó por más de un mes le dio un gran impulso a este tipo de ideas. Tal ha sido su impacto que muchos se han tomado en serio la propuesta de que desde los 18 años se pueda aspirar al legislativo.
Tanto así que la Cámara ya le dio el sí en primera vuelta a una propuesta de la autoría de la representante Norma Hurtado que busca que desde los 18 años se pueda lanzar cualquier colombiano al Senado y a la Cámara. Este martes, la plenaria de dicha corporación aprobó la propuesta de una forma apabullante, solo hubo un voto en contra del proyecto.
La aprobación del proyecto fue impulsada por el representante José Daniel López, que es el ponente del texto. Para el que es uno de los representantes más jóvenes, este tipo de propuestas son necesarias pues son “una provocación para que (los jóvenes) vengan a donde se generan las soluciones. No hay mejor manera que decirles que vengan acá”. Para este, el paro del primer semestre de 2021 demuestra que el Congreso debe modernizarse y darles cabida a las nuevas generaciones.
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Además de impulsar el proyecto, López se encargó de mantenerlo lo más simple posible. En un primer momento, en Comisión, el texto contaba con la propuesta de crear una circunscripción especial de jóvenes, pero en la ponencia buscaron quitar este punto, bajo el argumento de que podía restringir la participación. Además, en el debate de este martes, el representante de Cambio Radical le cerró el camino a propuestas que querían quitarle impacto al proyecto estableciendo la edad de aspiración a los 21 años. Asimismo, mantuvo al margen del texto una propuesta de una comisión legal en el Congreso para la participación juvenil, pues esto, según el ponente, debe ser un tema de modificar la ley quinta del Congreso y no de índole constitucional.
Aunque la votación fue casi que a totalidad por el sí, el trámite del proyecto no estuvo libre de debate. Varios representantes conservadores expresaron sus temores y objeciones. Por ejemplo, Buenaventura León comprometió su voto, pero cuestionó “si realmente es la solución”. Esto debido a que considera que la iniciativa no entra a solucionar los problemas de las juventudes, que son el desempleo y la pobreza.
“El constituyente definió unas edades, y la corte ha precisado que es coherente y necesario porque la edad es un medio adecuado”, agregó el representante León, que llegó a decir que el Congreso ha estado pendiente de los temas de los jóvenes, por lo que llegó a sembrar dudas sobre si era necesaria la representación desde los 18 años.
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En esta misma línea continuó el representante Víctor Ortiz, que rechazó el proyecto bajo el argumento de que los constituyentes de 1991 habían fijado las edades para aspirar bajo unos estudios de carácter psicológico sobre la maduración del individuo. Por eso, llegó a decir que si se quitaba la edad mínima para llegar al Congreso también se debía tomar la misma decisión para los cargos de presidente y sus ministros. Por último, sentenció que un proyecto de este tipo podría ocasionar que en unos años se tenga un “congreso de solo youtubers legislando”.
El representante Mauricio Toro fue uno de los que tomó el turno para responderle a Ortiz y criticar sus comentarios, que fueron tomados como displicentes. Para Toro, la edad no es un argumento válido, pues en el Congreso se ha visto que hay mayores de 40 años que “no saben votar” y que incluso han firmado leyes sin haberlas leído. Por el contrario, habrían youtubers con amplios conocimientos, “hablan de ciencia, escriben y aportan”. Para este, el proyecto se trata de darle representación propia a los jóvenes, pues las capacidades para ser congresista no son producto de la edad sino del conocimiento y de la preparación de la persona.
