Daniel Quintero, alcalde de Medellín, confirma que tiene COVID-19
De acuerdo con Quintero, desde hace varias semanas había tomado la decisión de aislarse de su familia, previendo cualquier contagio. Dice no tener síntomas.
El alcalde de Medellín, Daniel Quintero, informó este martes que, luego de realizarse los exámenes pertinentes, resultó positivo para COVID-19. “Después de realizarme la prueba para Covid-19 el viernes, como cada 8 días, el resultado fue positivo. Hemos puesto todo lo que está en nuestras manos para enfrentar este virus y lo seguiremos haciendo sin descanso”, dijo el mandatario en su cuenta de Twitter.
Según Quintero, la prueba que se realizó el viernes tuvo una baja carga viral, lo que lo obligó a realizarse una segunda prueba para confirmar que tenía la enfermedad. “Por tal razón me he movido al PMU (puesto de mando unificado), será el lugar desde donde estaré tomando las decisiones en estos 15 días de aislamiento”, agregó el alcalde.
En ese mismo sentido, señaló que, hasta el momento, no ha presentado ningún síntoma. De esta manera, Quintero se une a la lista de mandatarios en el país que han resultado contagiados con el nuevo coronavirus, como el gobernador encargado de Antioquia, Luis Fernando Suárez, o el alcalde de Cúcuta, Jairo Yáñez.
De acuerdo Quintero, desde hace varias semanas había tomado la decisión de aislarse de su familia, previendo cualquier contagio.
Justo hace dos días, Quintero abrió un fuerte debate en el país luego de solicitar al embajador de Cuba en Colombia, José Luis Ponce, una brigada médica de ese país para atender 600 unidades de cuidados intensivos (UCI) en Medellín, anticipándose al pico de la pandemia.
“Con el ánimo de anticipar los momentos más difíciles una vez nos aproximemos al pico, quiero solicitarle formalmente al Gobierno de la República de Cuba su solidaridad con una brigada médica para Medellín, con la capacidad de atender 600 Unidades de Cuidado Intensivo”, dijo Quintero en una carta conocida por la opinión pública.
De inmediato, llegaron las críticas desde varios sectores, en donde se destacaron las del uribismo, que manifestó su inconformidad con la llegada de médicos cubanos, advirtiendo que se estaba ante una estrategia de ideologización y que así había empezado “la toma de Venezuela”.
El alcalde de Medellín, Daniel Quintero, informó este martes que, luego de realizarse los exámenes pertinentes, resultó positivo para COVID-19. “Después de realizarme la prueba para Covid-19 el viernes, como cada 8 días, el resultado fue positivo. Hemos puesto todo lo que está en nuestras manos para enfrentar este virus y lo seguiremos haciendo sin descanso”, dijo el mandatario en su cuenta de Twitter.
Según Quintero, la prueba que se realizó el viernes tuvo una baja carga viral, lo que lo obligó a realizarse una segunda prueba para confirmar que tenía la enfermedad. “Por tal razón me he movido al PMU (puesto de mando unificado), será el lugar desde donde estaré tomando las decisiones en estos 15 días de aislamiento”, agregó el alcalde.
En ese mismo sentido, señaló que, hasta el momento, no ha presentado ningún síntoma. De esta manera, Quintero se une a la lista de mandatarios en el país que han resultado contagiados con el nuevo coronavirus, como el gobernador encargado de Antioquia, Luis Fernando Suárez, o el alcalde de Cúcuta, Jairo Yáñez.
De acuerdo Quintero, desde hace varias semanas había tomado la decisión de aislarse de su familia, previendo cualquier contagio.
Justo hace dos días, Quintero abrió un fuerte debate en el país luego de solicitar al embajador de Cuba en Colombia, José Luis Ponce, una brigada médica de ese país para atender 600 unidades de cuidados intensivos (UCI) en Medellín, anticipándose al pico de la pandemia.
“Con el ánimo de anticipar los momentos más difíciles una vez nos aproximemos al pico, quiero solicitarle formalmente al Gobierno de la República de Cuba su solidaridad con una brigada médica para Medellín, con la capacidad de atender 600 Unidades de Cuidado Intensivo”, dijo Quintero en una carta conocida por la opinión pública.
De inmediato, llegaron las críticas desde varios sectores, en donde se destacaron las del uribismo, que manifestó su inconformidad con la llegada de médicos cubanos, advirtiendo que se estaba ante una estrategia de ideologización y que así había empezado “la toma de Venezuela”.